Bustamante: desairado en su autoelogio Urbalejo: convirtió críticas en “logros” Robles: en 20 minutos, tres años Pelayo: el no informe y las manifestaciones Isabel Mercado Juárez Los priistas se despidieron. Carlos Bustamante, de Tijuana; Javier Urbalejo, de Tecate; Javier Robles, de Rosarito; y Enrique Pelayo, de Ensenada, concluyeron su trienio con un informe final, donde en términos generales, salieron raspados, entre críticas, señalamientos de corrupción, malos manejos y excesos. El colmo: Enrique Pelayo no hizo informe público por la amenaza que tenía de manifestaciones en su contra. Después justificaría que la decisión del primer no informe en Ensenada, había sido para ahorrar recursos… que no tiene. Aunado a ello, Francisco Vega de Lamadrid, el gobernador del Estado Baja California, no acudió al informe de Carlos Bustamante. En general, los alcaldes emanados del Revolucionario Institucional negaron la palabra a la oposición, y se retiraron en el autoelogio, solos. Sin representantes de su partido, como cuando tomaron posesión en 2010, sin el acompañamiento de sus regidores y sin la solidaridad de la sociedad. Tijuana: el autoelogio y el desaire Un discurso lleno de autoelogios, números inflados, obras intangibles y omisiones, rindió Carlos Bustamante ante un público que no llenó el recinto dispuesto para el lucimiento del alcalde. Desairado, con decenas de butacas vacías, una escasa presencia de políticos, pocos representantes de organismos empresariales, se desarrolló el tercer y último Informe de Gobierno bustamantista, acto que costó al erario de Tijuana un millón 400 mil pesos. Vaya, ni el gobernador Francisco Vega de Lamadrid acudió, cuando sí acompañó a los alcaldes de Mexicali, Tecate y Rosarito. Cuatro regidores del Cabildo tijuanense también desairaron a Bustamante: Erwin Aréizaga, Claudia Ramos y María Luisa Sánchez, del Partido Acción Nacional; así como Najla Wehbe, del Partido Nuevo Alianza. Dividida en dos actos, la sesión solemne del tercer informe inició al mediodía del martes 26 de noviembre en la sala de Cabildo, ahí los representantes de las seis fracciones de los diversos partidos políticos del Cabildo de Tijuana, dieron su posicionamiento respecto de la gestión municipal. Con minutos contados, apremiados si se extendían, los regidores de oposición, PAN, PANAL y PES, coincidieron en reprobar el desempeño de Carlos Bustamante, a quien señalaron de actuar en beneficio de intereses propios y de particulares. El panista Erwin Aréizaga Uribe le recordó al alcalde que los 700 millones de pesos que elevó la deuda pública con el refinanciamiento y otros créditos, “fue el primer gran desacierto de su administración, cuando su compromiso era no endeudar”. Reclamó Aréizaga: el daño patrimonial por el derrumbe de la Comandancia de Policía de la calle Ocho, la nula modernización y regulación del transporte, así como la inclusión de familiares y amistades íntimas en la nómina municipal. “Le quedó mucho a deber a Tijuana, sobre todo en materia de educación”, fustigó Najla Wehbe durante su intervención, mientras Carolina de Anda, regidora del Partido Encuentro Social, apuntó que hubo retroceso en la atención a la problemática de migrantes y retorno en delitos de alto impacto. La de Bustamante, fue una administración excluyente, que gobernó para una minoría y que “vio la administración pública como un negocio”, remató De Anda. La representante del PRI en el Cabildo, Franciscana Krauss, se desvivió en elogios durante más de ocho minutos, sin que el secretario Obed Silva le observara el exceso de tiempo. Así, como mero requisito, se desarrolló la primera parte del acto solemne, que no duró ni media hora. Se abrió un receso de cinco horas y se reinició en el centro de espectáculos El Foro. Acto reservado para el lucimiento del presidente del XX Ayuntamiento de Tijuana. “Bustamante, mentiroso, te pareces a Pinocho…”, fue una de las tantas consignas con las que el grupo de antorchistas recibió a Carlos Bustamante a su arribo a El Foro, a pesar que ocho calles aledañas fueron acordonadas desde las 2:00 pm, ante la inconformidad de los automovilistas. Sin faltar la alfombra roja, el recinto fue dispuesto como un set de televisión. Pantalla gigante, flores y decoración apropiada para las fotos del recuerdo que desde el inicio y hasta el final se tomaron los asistentes, principalmente la familia de Bustamante y quienes integraron el staff de presidencia. A un costado, una sala para conferencia de prensa y un recinto de medios. Tras bambalinas, un camerino dispuesto para Bustamante y otro para los regidores; una elegante sala con canapés y bebidas para el alcalde, funcionarios de primer nivel e invitados especiales. Ahí en los camerinos, el priista esperó a que las butacas del Foro se llenaran, pero ni con la presencia de asociaciones civiles que su gobierno apoyó, lo logró. A la notoria ausencia del gobernador y los regidores, se sumó la de las figuras del PRI. Ni el dirigente nacional del partido, ni el diputado Manlio Fabio Beltrones, ni un senador. Solo y en representación del Presidente de México, Enrique Peña Nieto, asistió el delegado de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT), Alfonso Blancafort. En 38 minutos, Carlos Bustamante leyó un discurso de 14 cuartillas, en el que en dos ocasiones perdió la lectura. Más que informe, fue autoelogio para él y su gabinete. Sus números alegres omitieron la realidad de su gestión. Refirió 2 mil 500 millones de pesos invertidos en proyectos sociales, acción que los regidores, cuando requirieron información, no la obtuvieron, por lo que la acepción no se puede corroborar. Bustamante omitió, en este caso, decir que a los regidores, salvo los del PRI y del Partido Verde Ecologista de México, no les entregó el cien por ciento de del gasto social. Más de 2 millones de pesos presupuestados de los que no se conoce su destino. Tampoco precisó qué hizo con los recursos canalizados a una bolsa especial para la contratación de personas con discapacidad, cuyo monto captado se estima en 25 millones de pesos. Sobre las finanzas de Tijuana, mencionó la restructuración de la deuda pública de Tijuana, su penalización y la tasa de interés que de fija, pasó a ser variable, por lo que se contrató un seguro “para que la tasa de interés nunca sea mayor al 7 por ciento”. Omitió informar que a largo plazo la deuda se duplicará a 5 mil 500 millones de pesos, y que el seguro para que la tasa de interés no se elevara a más del 7 por ciento, solo se contrató para el trienio que él encabezó. En infraestructura, ponderó un presupuesto en obras por 3 mil 700 millones de pesos, los cuales, dijo, invirtió en reparación de baches y reconstrucción de vialidades. En este punto admitió que dejará obras inconclusas por el orden de los 248 millones de pesos. Bustamante se dijo insatisfecho por el caso de las luminarias y con la empresa que signó un contrato por 144 millones de pesos, pero no explicó por qué. A más de un año de detectada la pifia, apenas interpuso una demanda en tribunales. De sus promesas incumplidas de campaña, mejor ni habló. Al finalizar el acto protocolario, el munícipe ofreció una conferencia de prensa en la que evadió aclarar el crecimiento de más de 500 empleados en la nómina del Municipio. Reconoció haber pactado con el Sindicato de Burócratas la basificación de 67 empleados de confianza, entre ellos las jóvenes de su staff; consideró que sí se merecían ese beneficio “por trabajar hasta por doce horas diarias”. “No me voy en deuda”, concluyó Carlos Bustamante. Tecate: el monólogo de Urbalejo Justamente los señalamientos de deficiencia y mala administración que la oposición ha realizado de lo que fue la administración del XX Ayuntamiento de Tecate, el alcalde saliente, Javier Urbalejo Cinco, los convirtió en “logros” y beneficios para la ciudad en su tercer y último informe de actividades. En Tecate se repitió la táctica de los presidentes municipales priistas: que las diversas fuerzas políticas representadas en el Cabildo, no pudieran fijar su postura el día del informe. Así, Urbalejo convocó a sesión de Cabildo solo para alardear cifras alegres y datos acogedores en un largo y aplaudido monólogo. El acto de despedida fue en el Teatro Universitario de la ciudad el jueves 21 de noviembre. Primero en un video de aproximadamente veinte minutos, el edil resumió sus tres años de gestión con testimonios de residentes beneficiados por pavimentación y obras. Proyectó en la presentación audiovisual, las inversiones en obra pública y servicios, tales como el equipamiento a bomberos y un monumento (dijo Urbalejo, “bien merecido”) para los apagafuegos. Resaltó además las remodelaciones a los parques de la ciudad, y enalteció los 161 mil metros cuadrados en recarpeteado que bajo su mando se ejecutaron. Los temas que lo han convertido en el centro de críticas y cuestionamientos, para él fueron logros. Tal es la deuda por 80 millones de pesos, adquirida en los últimos meses de su gestión, para pavimentar calles y “así, disminuir las enfermedades respiratorias” producidas por el polvo. O bien, el contrato por 20 años para que una empresa remplazara todas las luminarias de la ciudad, es decir, la concesión del alumbrado público. Mientras presumía que se hicieron inversiones históricas en deporte y obras, afuera del recinto, tres personas con una pancarta denunciaban los compromisos incumplidos de Urbalejo y las irregularidades, pero quedaron en un segundo plano ante las varias familias que fueron a corear: “Urbalejo, el mejor presidente de México”. Traídos en decenas de camiones, los porristas dentro y fuera, aplaudieron cada beneficio que el alcalde les heredó. El Teatro Universitario fue abarrotado por personas de la tercera edad, quienes fueron trasladados desde sus colonias. Javier Urbalejo señaló que para promover el turismo realizó diversos eventos como “el grito de las fiestas patrias”, entre otros. En cuanto al decreto de Pueblo Mágico, reconoció que el elemento “mágico” estaba en la “hospitalidad en la gente”, acreditación en riesgo de perderse, al no aplicar los recursos y no apegarse al manual de operaciones. Otra de las críticas comunes para Urbalejo, han sido las deudas y la falta de solvencia financiera, al grado que hubo catorcenas que no realizó el pago a sus trabajadores y atrasos millonarios con el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales del Gobierno y Municipio del Estado de Baja California (ISSSTECALI). Pero en su mensaje, el edil presumió que logró la condonación de 80 millones de pesos de Impuesto Sobre la Renta con la Secretaría de Hacienda, y 32 millones de pesos ante el Gobierno del Estado. Al acto solemne acudieron el gobernador de Baja California, Francisco Vega de Lamadrid; la presidenta del Tribunal, María Esther Rentería; los secretarios Guillermo Trejo, Ricardo Magaña Mosqueda y Miguel Osuna Millán; así como los alcaldes de Tijuana y Rosarito, Carlos Bustamante y Javier Robles. Urbalejo se despidió diciendo que sus críticos eran “solo unos espectadores inmóviles que magnificaron errores y minimizaron aciertos”. La sentencia final no fue menos confusa: “Hay que tener una venda muy, pero muy, muy gruesa en los ojos para no ver que Tecate mejoró”. Rosarito: acelerado alcalde; informe igual En el mensaje con motivo del tercer y último informe del alcalde de Playas de Rosarito, Javier Robles Aguirre, éste leyó de corrido y a máxima velocidad todo el recurso ejecutado en obras públicas, desde rampas en banquetas de colonias, colocación de pisos firmes, remodelación de oficinas, hasta pavimentaciones de concreto. Además, “Tito” presumió obras publicas sin construir y otras edificadas por otras administraciones, tal es el caso del gimnasio paraolímpico y el Parque Metropolitano de Rosarito, respectivamente. El acto solemne se realizó en la explanada del Palacio Municipal de Playas de Rosarito, azotado por fuertes lluvias el viernes 22 de noviembre. Inició con la presentación de un video y concluyó con la lectura de más de 40 minutos del alcalde saliente. El mayor tiempo lo dedicó a enlistar las obras, montos y direcciones que se ejecutaron en su gestión. Como en el resto de los informes, los regidores fueron parte de la utilería del evento, no se les permitió fijar posicionamiento ni tomar la palabra. La lectura de Robles logró despertar algunos bostezos y la distracción de su público. En total, lo ejecutado en la administración dijo fue 165 millones de pesos. Interrumpió pocas veces su postura fija y clavada en las hojas de lectura. Se fue de largo durante más de media hora. A la mitad de su recitación dijo: “Ya sé que es mucho esto, pero pues fue lo que se hizo en la administración”. Después, pasando la larga lista, tuvo que recurrir incluso a sus benévolas reparticiones por medio de su esposa Karla López, la primera dama al frente del DIF, con “cobijas, medicamentos y despensas”, además de “cursos de escuelas para padres”. Robles Aguirre manejó su tiempo y su espacio a su antojo. Por ejemplo, en la primera fila lucía -con todo y corona- la señorita Rosarito. Filas atrás la procuradora del Estado y el secretario de Seguridad Pública, Perla del Socorro Ibarra y Daniel de la Rosa, respectivamente, por mencionar algunos que no alcanzaron primera butaca. Rompiendo filas, los reporteros e invitados se amontonaron alrededor del gobernador Francisco Vega de Lamadrid, “Tito”, por su lado, solo y sin atenciones. Ahí se dio un breve espacio para que atendiera a quien escribe. — Te vimos nervioso alcalde, qué pasó. Robles alarga el “no” hasta que se transforma en sílaba femenina: “Na…”. — ¿Por qué tan acelerado? “Quise leerlo rápido porque sabía que era mucho, entonces para no cansar a los presentes”. — Satisfecho o te faltó algo más… “Lógico lo que se hace aun cuando se hace muchísima ayuda, pero siempre hace más por hacer. O sea, es una ciudad que tiene un gran índice de crecimiento poblacional mucho muy elevado, de hecho por encima de la media nacional, y esto te genera que día a día te estén reclamando más servicios, incluso muy por arriba de nuestra capacidad, nos falta cubrir más servicios”. Silvano Abarca, quien relevará a Robles en la alcaldía, calificó el informe: “Estuvo con sus limitaciones y anclas, como fue su administración, mencionó obra por obra, pero fueron tan pocos que lo pudo haber hecho en tres renglones, se hubiera ahorrado mucho tiempo y esfuerzo”. Pero por si alguien no se convenció de lo “mucho” que se hizo en Rosarito, “Tito” Robles se justificó: “No fue fácil administrar un ayuntamiento con deudas”. En su mensaje, el presidente municipal se despidió argumentando que la administración le dejó “años de aprendizaje y enseñanzas”. Una de ellas ahí mismo citada: “Traté a todos como me gusta que me traten”. Ensenada: retirada entre manifestaciones Para Enrique Pelayo Torres, los últimos días de su gestión al frente del XX Ayuntamiento le han resultado sumamente incómodos. Manifestaciones de la burocracia, de gasolineros, de vitivinicultores, de comerciantes, de hoteleros y de ciudadanos en general en las calles y en los medios de comunicación -incluyendo internet-, han enmarcado la retirada del más polémico alcalde en la historia de esta ciudad. El desencuentro de Pelayo Torres con la población ensenadense es tal, que decidió cancelar, dos días antes, la presentación de su tercer y último Informe de Gobierno, programado para el lunes 25 de noviembre en las instalaciones de la Casa Municipal. Durante una ceremonia cívica, el mismo día, dio a conocer su decisión públicamente. No daría su tercer informe en público. Lo realizaría por televisión, pregrabado, y repartiría el documento en discos compactos, ediciones impresas y por internet. Pelayo intentó justificar la cancelación de su informe, argumentando que así se ahorraría recursos, y porque le preocupaba la seguridad de los asistentes al evento, debido a que podrían registrarse manifestaciones en su contra. Canceló el evento, pues, para evadir las expresiones y abucheos de la población hacia su gobierno. “Con honestidad no traemos recursos, y aparte amenazaron por ahí en las redes de una manifestación, de que se iban a manifestar. En aras de evitar cualquier problemita, opté por cancelar”, refirió a la prensa ese día. El no informe de Pelayo Torres, se convirtió en el primer informe de un presidente municipal de Ensenada, que no se realizará en un evento público. Previamente videograbado, el informe de Enrique Pelayo sería transmitido a las 8:30 pm del miércoles 27 de noviembre, a través de televisión abierta -canal 29-, y del canal 151 en Cablevisión. Sin invitados, aplausos o rechiflas, y prácticamente a escondidas. El funcionario saliente aprovechó el hecho de no estar obligado por Ley a dar la cara a la población, a pararse enfrente y dar un recuento de su labor. Así lo dijo el lunes 25 de noviembre, cuando anunció formalmente la cancelación del evento. “El día de hoy, pensé yo en llevar a cabo mi evento de informar a la ciudadanía. Hubo por ahí algunas voces que pensaban manifestarse. Son muy libres de manifestarse, pero yo ya informé, como marca la ley, ante Sesión de Cabildo, una sesión ordinaria, abierta, que no fue como lo marcan por ahí algunos diarios, que se han empeñado en calumniar. Fue en una sesión ordinaria normal la semana pasada, que fue en la mañana, efectivamente fue cierto. Por ahí estuvo la prensa también, y ahí informé a todos los señores regidores, de nuestras actividades en este tercer ejercicio. Con eso yo cumplo con la Ley, con el reglamento establecido. “Hoy no voy a hacer informe en la tarde, porque yo ya cumplí. Y precisamente por la escasez de recursos que traemos, tomé la decisión de no llevar a cabo el informe en el Palacio Municipal, en aras de ahorrar ese recurso. Haré llegar a todas las cámaras, representativas de Ensenada, un ejemplar del informe. El sábado pasado, antier, para ser exactos, cené con el gobernador, le entregué un libro de las actividades y le informé que cancelaba el informe de hoy en la tarde”, expuso Pelayo ante los asistentes a la ceremonia cívica que se celebraba en las instalaciones de DIF Municipal, en Avenida Reforma y Bulevar Ramírez Méndez. Como testigos, una veintena de funcionarios de su gabinete, algunos estudiantes de primaria invitados al evento, universitarios y uno que otro curioso que pasaba por ahí. Ese mismo día, aproximadamente a las cinco de la tarde, una manifestación con alrededor de 300 personas partió de un centro comercial hacia la Casa Municipal, en un recorrido de unos 15 minutos sobre Avenida Reforma, donde gritaron consignas contra el alcalde y la mayor parte de los integrantes del Cabildo. Los acusaban de corruptos, de malos gobernantes, y pedían que Pelayo diera la cara, pero no ocurrió. Las pancartas e insultos de los que marcharon, quedaron plasmados en las puertas de la oficina del presidente municipal, donde una a una fueron pegadas las cartulinas y el recordatorio de su mal gobierno. La oficina estaba a oscuras y cerrada bajo llave. Pelayo se va, bajo un rechazo generalizado de múltiples sectores y organismos de la sociedad ensenadense. Renunció al Grupo Madrugadores de Ensenada, luego de que ese organismo fuera cuestionado por medios locales respecto a la permanencia del próximo ex alcalde en sus filas. En tres años de gestión, Enrique Pelayo deja polémicas, corruptelas, manejos oscuros de millones de pesos y dólares, y un gobierno alejado de la transparencia, al que curiosamente, no se le ha castigado en absoluto por ninguna instancia superior en ninguna de sus múltiples irregularidades, documentadas y narradas por todos lados. Hasta el último momento… …Bustamante saca provecho de la presidencia Nuevamente Carlos Bustamante se auto benefició al aprovechar la coyuntura que su gobierno dispuso para la regularización de rótulos, anuncios y similares. En un claro conflicto de intereses que lo colocaron como juez y parte, el alcalde del XX Ayuntamiento de Tijuana no tuvo empacho en acaparar nueve de los 42 espacios públicos que fueron concesionados a seis empresas para la colocación de carteleras de publicidad, entre ellas Publi-Cyr, S.A. de C.V., la cual es de su propiedad. Estas concesiones, aprobadas en la sesión extraordinaria de Cabildo del viernes 22 de noviembre, fueron adjudicadas únicamente a seis empresas; la propuesta iba encaminada a ceder los espacios sin costo alguno, lo cual fue observado por la regidora Claudia Ramos Hernández. Fue así que el dictamen se aprobó, añadiéndole la palabra oneroso, al título de concesión cedido a los particulares, pero sin especificar la cantidad del cobro que se hará a las empresas que por cada anuncio colocado en sus estructuras, cobra una renta mensual que fluctúa en los 2 mil dólares, de acuerdo a un sondeo realizado por ZETA. Entre las seis empresas de publicidad beneficiadas, destaca Anuncios e Imagen, S.A. de C.V., propiedad de empresario Miguel Ledesma Romo, a quien la actual administración municipal le retiró en 2011 cuatro pantallas electrónicas -algunas ubicadas en el predio conocido como “Calete”, Calimax Zona Río y Garita de San Ysidro-, acto que el afectado calificó como una presión política, más que administrativa. El encono entre el gobierno de Carlos Bustamante y Miguel Ledesma se resarció al concedérsele a éste último la licencia de 16 espacios públicos para instalar sus anuncios monumentales. Los 17 espacios restantes, cedidos a particulares, se dividieron entre las empresas Exteriores, S.A. de C.V. -dos concesiones-; Roger Sistemas Exteriores, S. de R.L. de C.V. -dos concesiones-; Impulsora Terra, S.A. de C.V. -dos concesiones- y Molior Onni, S.A. de C.V. -seis concesiones-. De esta última, a los regidores de la Comisión de Desarrollo Urbano solo les fueron presentados cinco expedientes en los que no se especifica dirección de la ubicación de las carteleras. Las 42 estructuras que soportan las carteleras panorámicas podrán estar colocadas en terrenos propiedad del Municipio por tiempo indefinido, ya que la durabilidad de la concesión se estipuló en un tiempo “dependiente de la vida útil de la estructura de cada uno”. “Se me hace perfecto”, externó en tono de gran satisfacción el alcalde Carlos Bustamante, sobre el hecho que con solo agregar la palabra oneroso, fuera aprobado el dictamen en el que su firma de publicidad se quedaría con nueve de las 42 concesiones autorizadas por Cabildo. Publi-Cyr es una empresa conformada en 1984, de la cual Carlos Bustamante Anchondo figura como administrador único; su giro es el de servicios de investigación de mercados y encuestas de opinión pública (agencia publicitaria), se lee en su acta constitutiva. El domicilio de su oficina lo ubica en Bulevar Agua Caliente número 4558-1801, Colonia Aviación, mientras que los anuncios que publicita, se encuentran colocados en las siguientes direcciones: 1. Avenida de la Amistad, área verde, Zona Urbana Río Tijuana. 2. Carril izquierdo Línea Internacional, en área verde. 3. Vía Rápida Oriente, talud canalización Zona Urbana Río Tijuana, a un costado de la Avenida de la Amistad, en Línea Internacional. 4. Vía Rápida Oriente, talud canalización Zona Urbana Río Tijuana, Línea Internacional, terminando el Puente México. 5. Vía Rápida Oriente, talud canalización Zona Urbana Río Tijuana, Línea Internacional, bajo el Puente México. 6. Avenida Internacional y Puente Paseo de los Héroes. 7. Calle Tercera y Bulevar Sánchez Taboada, a un costado del terreno conocido como “Mexitlán”. 8. Vía Rápida Poniente y acceso a rampa carril izquierdo de la Línea Internacional, Zona Centro. 9. Gaza de incorporación Puente México, Avenida Internacional, Calle Segunda, en el Puente Rampa Internacional. Con los cambios aprobados, también se abrió el área de consolidación urbana a los anuncios y rótulos de azotea, anteriormente autorizados únicamente fuera de la mancha urbana. De igual manera, se permitió regularizar los anuncios colocados en predios de particulares que incumplen con el pago del Impuesto Predial. Al final, las adecuaciones al reglamento de Rótulos, Anuncios y Similares, solo sirvieron para dar facilidades de pago a los propietarios morosos en cuanto a la actualización de sus permisos. Así, Carlos Bustamante solo pagó 637 pesos por cada uno de sus nueve permisos de anuncios panorámicos. Isabel Mercado Ante el Órgano Fiscal Superior por donación a “Xolos”, entre otras sospechas Demandan a Bustamante por peculado Por posible peculado en el manejo de las finanzas del XX Ayuntamiento de Tijuana, regidores panistas demandaron ante el Órgano de Fiscalización Superior (ORFIS)-, a Carlos Bustamante, aún alcalde de Tijuana, y quienes resulten responsables. Los regidores Erwin Aréizaga y Claudia Ramos Hernández presentaron el jueves 28 de noviembre dos solicitudes de auditoría de desempeño, cuyo resultado, consideraron, podría derivar en juicio político. El primer requerimiento lo planteó Aréizaga, solicitando al ORFIS investigar cuatro puntos específicos de la administración bustamantista, uno de ellos, el que consideró “una malversación de recursos” por 14.5 millones otorgados “en forma discrecional” al equipo de futbol Club Tijuana Xoloitzcuintles de Caliente, propiedad de Jorge Hank Rhon, sociedad mercantil a la que este gobierno omitió requerirle impuestos municipales por el orden de los 14 millones de pesos. Otro aspecto en el que el edil estimó un desaseado manejo de los recursos públicos, es el referente a las cámaras de seguridad, por haber entregado el gobierno de Carlos Bustamante 150 millones de pesos a la empresa Global Corporation. El tercer punto hace referencia al fallido programa de mejoramiento del sistema de alumbrado público, para lo cual el XX Ayuntamiento firmó un contrato de 144 millones de pesos con Sola Basic, convenio que la empresa incumplió. Por último, Aréizaga Uribe pidió al ORFIS investigar la negligencia de Bustamante al no hacer valer las garantías de las vialidades que integran el Programa Integral de Repavimentación (PIRE) ejecutado por el ex alcalde Jorge Ramos, poniendo en riesgo la inversión ejercida y aprobada por el Congreso del Estado. La segunda petición fue presentada por Claudia Ramos, para que se dé a conocer el destino de cuando menos 25 millones de pesos captados por el incremento del 5 por ciento en el cobro por revalidación de permisos para venta de bebidas embriagantes, aprobado por el Cabildo de Tijuana el 12 de noviembre de 2011, con el fin de integrar una bolsa para dar empleo a personas con discapacidad. “El aumento en este rubro sí se dio, porque el impuesto se elevó de un 10 a un 15 por ciento, pero el programa no se llevó a cabo”, indicó. Muestra de ello, continuó, es el hecho de que en la nómina del Ayuntamiento de Tijuana, solo 25 trabajadores con discapacidad se encuentran incluidos, y no a raíz de este proyecto. La regidora argumenta haber requerido en reiteradas ocasiones el cumplimiento de dicho acuerdo, mismo que quedó ratificado en el Presupuesto de Egresos de 2012 y 2013, sin que la inversión en ese rubro social específico se cumpliera. Ambos ediles confiaron en que la pluralidad que ahora integra el Congreso del Estado, derive en una investigación a fondo que permita deslindar responsabilidades sobre estos temas, que en su momento fueron plateados a la síndico Yolanda Enríquez de la Fuente, a quien acusan de ser omisa en el seguimiento de las demandas. Isabel Mercado