La muerte siempre latente

Por su naturaleza, el Boxeo es un deporte brutal y peligroso, al mismo tiempo, adorado por muchos y criticado por otros. A pesar de que la mayor parte del tiempo se toman medidas de seguridad, éstas no son lo suficientemente estrictas para evitar acontecimientos trágicos que se han dado a lo largo de la historia de deporte de los puños. Según diversas fuentes, ya que no existen cifras exactas, se han registrado entre 600 y mil 200 muertes de pugilistas arriba del ring, la mayoría consideradas como accidentes, aunque muchas por una causas que podrían evitarse, desde mala preparación de los boxeadores, peleas desniveladas, fallas en la revisión médica, y hasta por el mal criterio de los réferis al decidir cuándo detener un combate. Dentro de la larga lista de boxeadores fallecidos en el cuadrilátero, aparecen varios mexicanos, entre 50 a 60 es el número que se maneja, el último caso fue el del mexicalense Francisco Javier “Frankie” Leal, quien perdió la vida tras su combate ante Raúl “Rayito” Hirales. “Frankie” fue noqueado en el octavo round dentro de una función que se disputó el 19 de octubre en el Auditorio Municipal de Cabo San Lucas, Baja California Sur. El pugilista recibió una certera golpiza por parte de Hirales, la cual el réferi decidió detener cuando transcurría el octavo capítulo. Leal fue atendido tras el nocaut y salió en camilla, aunque no recibió la atención necesaria en su momento. Luego de permanecer tres días en coma, en un hospital de San Diego, California, el cachanilla falleció a causa de las lesiones ocasionadas en la pelea. Tenía 26 años y un récord como profesional de 20 victorias, ocho derrotas y tres empates en apenas 31 peleas. “Nos duele muchísimo esto, sabíamos que ‘Frankie’ era un buen muchacho, un gran boxeador, un guerrero arriba y abajo del ring. Como empresa hicimos, con mucha responsabilidad, lo humanamente posible para tratar de salvar su vida, y ahora solo nos queda unirnos a la pena que embarga a su familia, a la familia boxística, y tratar de ayudar en lo que sea necesario”, señaló mediante un comunicado de prensa Fernando Beltrán, presidente de Promociones Zanfer, empresa encargada de llevar a cabo la función que fue transmitida a nivel nacional. “Nos duele esto que ha pasado, nuestras oraciones y solidaridad. Sabíamos que Leal era un buen joven al que le gustaba ganarse la vida bien, con base en su esfuerzo, desafortunadamente ha pasado esto y no pudimos hacer más que apoyar las decisiones de su familia respecto al intento de salvaguardar su integridad, y con ese mismo apoyo que les brindamos, trataremos de dar lo mejor para que se sientan respaldados en este momento tan difícil”, complementó. En Tijuana, sin víctimas En Tijuana, este tipo de acontecimientos no suelen suceder, de hecho jamás se ha dado una muerte sobre el ring de un boxeador, pero sí algunos casos extraordinarios. El más sonado y grave fue en 2003, durante el combate por el título mini mosca de la Federación Internacional de Boxeo (FIB), entre el mexicano, Edgar “Tun Tun” Cárdenas y el colombiano Miguel Barreda. En esta pelea, realizada en el Auditorio Municipal “Fasto Gutiérrez Moreno”, el boxeador colombiano fue noqueado en el décimo round por “Tun Tun” Cárdenas y quedó conmocionado sobre el cuadrilátero. Más tarde, Barreda fue intervenido quirúrgicamente debido a un derrame cerebral; por fortuna se recuperó paulatinamente. “Aquí en Tijuana no habido casos graves, ya que existe un protocolo muy bien determinado por el encargado de servicios médicos. Una de las grandes ventajas es que es una gran plaza boxística y de alguna forma se ha tenido la capacidad de poder preparar a los médicos”, reconoció Juan Carlos Pelayo, presidente de la Comisión de Box, Lucha Libre y Artes Marciales en Tijuana. “Creo que hemos avanzado muchísimo porque  nos hemos preocupado por cuidar la integridad de los boxeadores. Por eso tenemos que prevenir que haya accidentes, por eso es vital que todos lleguen con su salida médica, eso quiere decir que están aptos para subir al ring, de lo contrario no subirán porque está de por medio la vida. También somos los únicos en México y en el mundo que contamos con un Patronato para beneficio y protección de los boxeadores locales. El boxeador y el empresario aportan cada uno el dos por ciento de su ingreso, es un fondo que tenemos para prevenir este tipo de situaciones, así los mandamos a que reciban la mejor atención médica”, explicó Pelayo. Sobre el caso de  “Frankie” Leal, Pelayo comentó: “En lo personal vi la pelea y siento que les faltó seguir los protocolos médicos y clínicos para haber hecho algo más por él, ya que lo bajaron sin collarín, ni lo acostaron, es más, ni los guantes le quitaron. Por eso hay que preparar más a la gente, ponerle más atención al Boxeo, hay que hacer una ley para que esto funcione de otra forma”, afirmó el directivo. Para el actual comisionado de Box y también ex pugilista Alex “Terra” García, la pérdida de un compañero de oficio es lamentable, pero es algo que siempre está latente. “Yo fui boxeador y sé exactamente lo que pasa por la mente de uno cuando sale en cada pelea. Es cierto que uno sube con poquito de miedo y nervios, pero siempre pensando en ganar y dar todo, ya que a ninguno nos gusta rajarnos”, dijo el tijuanense, retirado prematuramente a los 29 años tras ser campeón del mundo. “Lo que influyó en mi retiro fue que me tocó vivir en carne propia lo que le pasó a mi amigo el boxeador Víctor Burgos, con quien crecí boxísticamente. Él estuvo en coma, a punto de la muerte, afortunadamente él está vivo, aunque no pudo recuperarse totalmente. Es por eso que decidí retirarme en plenas facultades”. — En tu época de boxeador, ¿cuál era el protocolo que seguías después de cada pelea? “Siempre me checaba, después y antes de cada pelea me metía al tubo para hacerme estudios de la cabeza principalmente, aunque aquí no me lo exigían, lo hacía, porque en Estados Unidos sí lo pedían para poder pelear”. Ahora que “Terra” vive su etapa como directivo, recomienda a todos los boxeadores a cuidarse siempre, porque se trata de un trabajo y, como en cualquier otro, hay que prepararse y enfocarse cien por ciento al Boxeo. “En mi época de boxeador siempre fui dedicado, cuando me preparaba para una pelea nunca me descuidé, no me desvelaba y no tomaba, sé que es duro pero hay que hacer ese sacrificio, de lo contrario puede haber graves consecuencias al subirse al ring sin la preparación necesaria”. El entrenador Rómulo Quirarte Junior, coincidió con García en que todos los peleadores tienen que estar muy bien preparados en cada pelea: “Regularmente y por ética siempre debemos tener a los peleadores bien preparados, en buena condición física, siempre en todos los aspectos, incluso asesorados por un médico, porque sabemos que éste es un deporte de riesgo. La gente piensa que lo duro es la pelea y ya, pero no es así, un boxeador recibe más golpes durante los entrenamientos que son diarios y son más rounds, aunque en éstos se use protección”. El hijo del Don Rómulo Quirarte confesó que ellos como entrenadores son responsables de velar por la integridad del peleador y que éste no reciba muchos golpes. “Nadie tiene más autoridad que nosotros para detener una pelea cuando están sometiendo a nuestro boxeador, incluso en ocasiones hemos sido duramente criticados por ser sobreprotectores con los peladores, pero siempre nos ha interesado más la integridad física del boxeador, que el dinero o lo que sea”, afirmó el entrenador. El protocolo médico Para evitar este tipo de desgracias o accidentes, como son considerados dentro del pugilismo, es importante llevar siempre un protocolo de seguridad. El encargado de Servicios Médicos de la Comisión de Tijuana, José Luis Hernández, es quien da el visto bueno a los peleadores previo a sus combates, de no encontrarlos en condiciones, no recibirán autorización de subir al ring. “Nuestra misión es velar por la vida de los boxeadores. Nosotros lo que hacemos es estar seguros que los peleadores tengan su licencia y estén en condiciones aptas para pelear. Eso sí, con nuestro boxeadores podemos estar más seguro porque los revisamos nosotros, pero los que vienen de afuera, ahí sí nos tenemos que basar en la salida médica que traen, así que la responsabilidad no es de nosotros, sino de los médicos que les expiden esa salida en sus localidades. Incluso hay algunos que se molestan porque no los dejamos pelear tan seguido, pero como te decía, nuestra misión es velar por la vida de los boxeadores, así que si se molestan, ni modo”, recalcó. Hernández, quien lleva ya 12 años como jefe médico de la comisión tijuanense, asegura que no siempre se pueden prever los accidentes como el sucedido con Leal. “En el Boxeo desafortunadamente suceden accidentes que son mortales por la misma naturaleza del deporte, hay muchos detalles que se pueden prever, pero existen otros que no. Por ejemplo, lesiones cerebrales por el traumatismo continuo que no puedes saber, y aparece en la última pelea del boxeador porque estaba esperando el momento del desenlace”. — ¿Se toman en cuenta los antecedentes de los peleadores antes de otorgarles la salida médica para subir al ring? “Siempre deben tomarse en cuenta, y más cuando hay ya una lesión severa es muy importante que se tenga en cuenta. Aunque los peleadores muchas veces no se los hacen porque son muy caros, pero afortunadamente aquí contamos con un patronato, así que si no está bien nuestro peleador, no va a subir al ring”. El cirujano recomendó que si los peleadores tienen alguna duda de su estado, hay que atenderse y obviamente no subirse al ring, ya que es preferible perder lo que les van a pagar en una pelea, a exponer la vida. Por su parte, Alejandro Stephenson, médico neurocirujano, manifestó que los daños que provocan los golpes en los boxeadores son graves, y en muchas ocasiones pueden tener consecuencias mortales. “Los impactos repetitivos generan micro traumas en el cerebro y hacen que éste se inflame porque está flotando, así que por pequeños que sean éstos, pueden causar edemas cerebrales que en algunas ocasiones pueden ser severos y causan la muerte. También se lastiman los vasos, sobre todo los vasos venosos, con lo que puede provocar coágulos, ya que se tapa por completo la circulación. “Lo más probable que le pasó a este boxeador, fue que tuvo una enfermedad llamada tromboembolia pulmonar, que se forma un coágulo en alguna parte del cuerpo y entonces viaja a través del torrente sanguíneo y llega a tapar por completo las arterias del pulmón, con lo que se da la muerte”. — ¿Con que podríamos comparar los impactos que reciben los boxeadores? “Pues a ciertas caídas, o cuando vas en un auto y tienes un impacto de 70 kilómetros por hora, es más o menos el tipo de impacto que llega a recibir el cerebro por recibir cada golpe, incluso está comprobado que hasta pueden ser más fuertes porque a veces la velocidad de impacto de un golpe pude alcanzar los 80 o 100 kilómetros por hora. Imagínate a esa velocidad el daño que puede ocasionar”. El especialista agregó que además del daño instantáneo, los golpes en los pugilistas pueden ocasionar consecuencias en un futuro por la pérdida de neuronas y el envejecimiento prematuro del cerebro, así como fallas en el comportamiento, ya que se vuelven más agresivos que el resto de la gente. “Las recomendaciones principales es que los boxeadores deben cuidarse más y dejar pasar un periodo de tiempo mayor entre cada pelea, debido a que el golpeteo constante que reciben en el ring, sí llega a perjudicarlos en su vida diaria, y obviamente llegar a provocar eventos catastróficos como puede ser la muerte”, puntualizó. Víctimas recientes En lo que va del siglo, el Boxeo mexicano ha estado involucrado en siete muertes como producto de los golpes en el cuadrilátero. En cuatro casos había antecedentes de nocauts recientes en sus historiales, cuatro fueron peleas sancionadas por el Consejo Mundial de Boxeo (CMB), y los últimos tres, perecieron en funciones organizadas por la promotora Zanfer. Francisco Leal falleció cuatro días después de haber sido noqueado por Raúl Hirales en Baja California Sur. Trascendió el hecho de que los órganos de “Frankie” fueron donados y salvaron la vida a seis personas. El costarricense Alejandro “Timón” Martínez trasladó su carrera a México en busca de mejores oportunidades, y hasta hizo una pequeña gira boxística por Baja California. En 2009 viajó a Nuevo Vallarta, Nayarit, para medirse a Juan Alberto “Topo” Rosas. “Timón” perdió por decisión unánime y nunca fue noqueado en 19 peleas, pero salió del escenario en coma. Sobrevivió y regresó a su país natal, donde vivió en estado casi vegetativo hasta su muerte, en agosto de 2012. 2009 fue un año trágico, el vallartense Marco Nazareth venía de perder tres de sus últimas cuatro peleas y era el escalón perfecto para inflar el récord de Omar Chávez, a quien ya había enfrentado anteriormente. El “Texano” Nazareth cayó en el asalto inicial y sostuvo golpes a la cabeza, incluyendo la nuca, hasta que fue detenido el combate en el cuarto giro. Nazareth se desvaneció varios minutos después de la pelea y fue hospitalizado por un derrame cerebral. Murió cinco días después. Tres meses antes, Benajmín Flores perdió la pelea por el título súper gallo de Norteamérica contra Al Seeger y perdió la vida en un hospital de Dallas. El michoacano de 24 años no fue derribado, el réferi detuvo la pelea en el octavo asalto para evitar mayor castigo sobre Flores. En octubre de 2008, cinco meses después de haberse ido al límite y perder por la vía de los puntos, Daniel Aguillón subió al ring frente a un imbatido Alejandro Sanabria. Cayó en el primer asalto y aguantó toda la ruta hasta caer noqueado de manera aparatosa en el duodécimo. Fue intervenido para remover un coágulo, pero falleció cinco días después. Se acusó de negligencia a la Comisión de Box del Distrito Federal y de mala atención médica. Su familia quedó sin apoyo económico. El capitalino Martín “Bombero” Sánchez tenía tres nocauts recientes en su historial antes de enfrentar a Rustam Nugaev en Las Vegas. El ruso noqueó en el noveno asalto a Sánchez, quien murió al siguiente día. En 2002, Fernando “KO-Chulito” Montiel arrebató la corona súper mosca de la Organización Mundial de Boxeo al panameño Pedro “Rockero” Alcázar. Montiel noqueó en el sexto y Alcázar no mostró síntomas de ningún tipo. Dos días después fue encontrado sin vida en la tina del hotel en el que se hospedaba, murió a causa de lesiones cerebrales. Leal, Nazareth y Martínez sufrieron sus lesiones en funciones de Zanfer. Martínez, Nazareth, Flores y Aguillón peleaban bajo el sello del CMB. Aparentemente Zanfer se libró de otra tragedia. José Carmona fue inducido a coma e intervenido quirúrgicamente en dos ocasiones para remover un coágulo cerebral tras ser noqueado por Jorge “Travieso” Arce en la pelea de regreso del sinaloense. Carmona fue el tercer rival para el “Travieso”, primero iba a enfrentar al recién noqueado William Prado, pero este sufrió un accidente en motocicleta. Giovani Caro fue anunciado como emergente. Cinco días antes apareció Carmona como rival emergente. El colombiano ya respira por sí mismo, pero no le garantiza una buena calidad de vida. (Carlos Aguirre Barajas) Más vale tarde que nunca A punto de concluir 2013, la Comisión de Box, Lucha Libre y Artes Marciales Mixtas, por fin premió a lo mejor del Boxeo de 2012. La Comisión en turno, que se quedará para la siguiente administración, resaltó las 145 funciones de Box en tres años, no solo lo del año pasado. En esta ocasión, el Boxeo Femenil tuvo su propia premiación. Jackie Nava fue galardonada como Peleadora del Año, Sandra “Perla Negra” Robles se llevó la distinción de Novata del Año, la Prospecto del Año fue Kenia “Jaguarcita” Enríquez; el premio a Manejadora del Año se lo llevó Viridiana Santillana, y la jueza Lorena Gaxiola se llevó Oficial del Año. Araceli Martínez Rose recibió un reconocimiento especial por su libro “El Negocio del Dolor”, el Odontólogo Rafael Alcaraz y la marca de equipo boxístico Cleto Reyes, también fueron distinguidos. Del lado de los varones, los premiados fueron Iván Morales, Peleador del Año; Enrique “Duende” Bernache vs. Daniel “Bad Boy” Rosas, Pelea del Año; Daniel “Galeno” Sandoval vs. Enrique “Colincillo” Colín, Pelea Más Dramática; Hanzel Martínez, Prospecto; Daniel Ramírez, Preliminar; José “Tigre” Cayetano, Estelar; Heriberto Delgado, Promesa; Luis “Pantera” Nery, Novato. Pedro Morán Jr. fue Manejador del Año, Juan Carlos “Mini” Burgos, Peleador en el Extranjero; Cristian Curiel, Réferi; mientras que Juez del Año se lo llevó Carlos Flores. Promociones Mayén, Zanfer, Promociones González y Promociones Tijuana, se llevaron a la par distinciones de promotoras de 2012. Asimismo, Ultimate Warrior Challenge México fue reconocida como Empresa del Año de la cada vez más ausente escena de Artes Marciales Mixtas a nivel local. La premiación de Lucha Libre será hoy viernes 29 de noviembre en el Auditorio Municipal “Fausto Gutiérrez Moreno”, durante la velada luchística. (Carlos Aguirre Barajas)