En el último Informe de Gobierno de José Guadalupe Osuna Millán, el enviado del Presidente de la República, Enrique Peña Nieto, fue el secretario de Medio Ambiente, Juan José Guerra Abud. Ni hablar, lo que se consideró un desaire al panista, se ha convertido en una norma del Presidente para el Norte del país. Resulta que para ahorrarse las visitas a los estados, en calidad de testigo de tomas de posesión o informes, Peña dividió la República en regiones, y nombró en cada una de las zonas, a representantes para el protocolo institucional; y pues en Baja California, nos tocó la de perder con el titular de Medio Ambiente. Hoy viernes por la noche, el señor Guerra Abud atestiguará -en representación del mandatario nacional- la toma de posesión de Francisco Arturo Vega de Lamadrid como gobernador del Estado de Baja California. Ni modo, una vez más, el Centro del país poco apoya a la frontera.