En un pueblo se está construyendo una carretera. Un pueblerino se sentaba largas horas a ver cómo se realizaba la obra cuando se topó con el ingeniero. — Hola, soy George Frank Steven, el ingeniero que hizo los estudios y encargado de la obra y la maquinaria. “Hola, yo soy Federico Díaz, soy del pueblo de al lado”. — Veo que nunca habías visto cómo se hace una carretera moderna. Dime, ¿cómo hacen las carreteras en tu pueblo? “Bueno, en mi pueblo cuando queremos hacer una carretera de un pueblo a otro, soltamos un burro viejo y el animal escoge el camino más corto y más seguro; y por ese camino hacemos la carretera”. — ¿Y qué pasa si no tienen un burro? “¡Llamamos a un ingeniero!”. Autor: Un arquitecto ardilla.