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jueves, octubre 3, 2024
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Frustrado madruguete por la CESPT

El jueves 26 de septiembre, Carlos Bustamante Anchondo, alcalde de Tijuana, quiso madrugar al Gobernador del Estado, José Guadalupe Osuna Millán, con la Comisión Estatal de Servicios Públicos de Tijuana. Incluyó en la agenda de la sesión de Cabildo que programó para el viernes 27 de septiembre a las 17:00, en el orden del día: “1.- Lista de asistencia y declaración de quórum legal. 2.- Proyecto de acta de la sesión anterior para su aprobación. 3.- Proyectos de acuerdos y resoluciones: 3.1.- Acuerdo mediante el cual se autoriza al Ejecutivo Municipal para que realice solicitud formal al Ejecutivo Estatal, respecto a la transferencia de los servicios públicos de agua potable, drenaje, alcantarillado, tratamiento y disposición de sus aguas residuales, conforme a lo establecido en el artículo 115 constitucional”. Así, de un párrafo, Bustamante intentó agenciarse la Comisión Estatal de Servicios Públicos. Sin la presencia de Fernando Castro Trenti, aun a esa fecha el líder de la mayoría priista en la XX Legislatura, Bustamante quiso aprovechar las últimas horas de esa legislatura, y su incipiente presencia política, para quitarle la CESPT al Estado de Baja California. Pero no pudo. De hecho, se vio obligado no solo a sacar el tema del orden del día de la Sesión de Cabildo a la que convocó para el viernes 27, sino a cancelar la reunión entre ediles. El todavía alcalde de Tijuana quiso sorprender al Gobernador del Estado, José Guadalupe Osuna Millán, pues no le informó de la solicitud que haría, ni pretendió acordar con él la entrega recepción de la aún paraestatal encargada del agua. Por su cuenta, sin notificar a sus diputados, sin dar cuenta al Gobernador, y sin siquiera acordar con el resto de los alcaldes de Baja California, Bustamante creyó poder solo y se topó con pared. El jueves por la tarde, el Regidor del PAN en Tijuana, Erwing Areizaga se enteró de la intención del Presidente Municipal de Tijuana, buscó al director de la CESPT, Hernando Durán, para solicitar información al respecto de la paraestatal, Durán se comunicó con Miguel Ávila Niebla, Director de la Comisión Estatal del Agua, quien a su vez notificó al Secretario de Gobierno, Francisco García Burgos, y éste al Gobernador del Estado, José Guadalupe Osuna Millán. Exhibida la intención del Alcalde, Osuna Millán se comunicó con él. Le advirtió el gobernador que reflexionara sobre la “histórica” decisión que estaba a punto de tomar al solicitar la desincorporación de la CESPT, y le pidió que rectificara su posición, que evitara pasar a la historia como “muy mal por una decisión totalmente equivocada”. Carlos Bustamante cedió ante el Gobernador, y canceló la sesión de Cabildo donde solicitaría la Comisión Estatal de Servicios Públicos de Tijuana. El desconocimiento en la materia por parte de Bustamante, le impide ver, que aun cuando ciertamente el artículo 115 Constitucional que enaltece la municipalización de los servicios, la desincorporación de la paraestatal llevará algo más de tiempo que los dos meses que le restan de administración. Para empezar, al municipio también sería trasladada la deuda de la Comisión Estatal, que asciende a mil 883 millones 901 mil 227 pesos, que sumados a los más de dos mil 600 millones de pesos a que asciende la actual deuda del Ayuntamiento, Tijuana sería la ciudad más comprometida en razón prácticamente de cinco mil millones de pesos. Aparte, la Comisión Estatal de Servicios Públicos de Tijuana abastece también al municipio de Playas de Rosarito, por lo que la desincorporación debería ser para los dos ayuntamientos y no para uno. De acuerdo a Hernando Durán, actual director de la CESPT, ese paso sería de lo más difícil, dado que no solo las redes que abastecen de agua a Rosarito cruzan la ciudad de Tijuana, sino que la infraestructura que de manera integral abastece a los dos municipios, está divida entre ambos territorios. Así, en Tijuana por ejemplo se encuentran las plantas potabilizadoras, mientras en Rosarito están dos plantas de tratamiento, la Rosarito Norte y la Rosarito Lagunas, esta última que atravesó una actualización millonaria recientemente. De solicitar Rosarito también la desincorporación de la CESPT para ser administrada por el ayuntamiento, y dado que la red de tubería que abastece al quinto municipio atraviesa toda la ciudad de Tijuana, también ese ayuntamiento debería pagar derecho de vía al fronterizo. En relación con la deuda de la Comisión, también es un asunto que en caso de desincorporarse, llevará más de dos meses. Dado que los créditos que ha solicitado la paraestatal, están sustentados en las participaciones y los egresos estatales, y no en la economía menguada del Ayuntamiento de Carlos Bustamante. En total, la Comisión Estatal de Servicios Públicos de Tijuana tiene mil 228 empleados de base, 462 de confianza, y 44 de contrato eventual, el costo mensual de la nómina asciende a los 60 millones 921 mil 695 pesos, y anualmente, 731 millones 60 mil 350 pesos. Para 2013, los ingresos presupuestales fueron 2 mil 474 millones 153 mil 131 pesos, mientras los egresos presupuestales para el mismo año están en 2 mil 366 millones 568 mil 171 pesos. A decir de Durán, en el 2012 hubo un déficit del 10 por ciento en la paraestatal, que este 2013 está siendo remontado. En estas condiciones, el madruguete que quiso dar Bustamante a Osuna Millán, se le frustró. Aun cuando en el Ayuntamiento aseguraron contar con el apoyo del director de la Comisión, Hernando Durán, para elaborar la solicitud, éste lo desmintió, aunque dijo que sí entregó toda la documentación cuando Carlos Bustamante y Antonio Cano se la pidieron antes de tomar posesión en diciembre de 2010. La desincorporación, pleito añejo En la administración de Jorge Hank se intentó y nada se logró. Al llegar Carlos Bustamante a la presidencia de Tijuana la solicitud se hizo de nuevo. El objetivo de los ediles priistas era retomar la propuesta de campaña del entonces candidato a gobernador Héctor Terán Terán, que consistía en transferir los servicios públicos de agua potable al municipio, como lo señala el artículo 115 Constitucional. La oferta sonó muy atractiva, pero hasta la fecha la dependencia sigue “cobijada” por el estado. Desde entonces ha sido botín de funcionarios, la caja chica del gobierno estatal, la agencia de colocación de panistas desempleados, o bien el premio de consolación de otros. Lo cierto es que sus adeudos ascienden a mil 800 millones de pesos; y aunque el 70 por ciento de su cartera son cuentas que adeudan entre 5 mil y 15 mil pesos; ningún titular quiere dejar la dirección. Recientemente, el tema de transferir los servicios fue puesto en la mesa de regidores. Se trataría en la sesión de cabildo programada para el viernes 27 de septiembre, pero repentinamente la asamblea se canceló. Rubén Salazar Limón, regidor presidente de la Comisión de Desarrollo Urbano, Obras  y Servicios Públicos, señaló a ZETA que desde que la Ley entró en vigor hace aproximadamente 15 años, habían sido escasos los intentos de “pedirle cuentas” a la CESPT, las excusas han sido que la paraestatal despacha con “números rojos”. “Lo que ha dicho el gobierno del estado es que la CESPT es una dependencia que trabaja con números rojos, que subsiste y se solventa porque el estado apoya con recursos. Han dicho también que el municipio no tiene la capacidad solvente de operar una dependencia así. Éstos han sido los argumentos, pero no hay un documento, un análisis, cuentas claras de cómo salen esos número rojos; ¿Cómo lo sostienen? ¿En qué se basan? ¿Por qué se aferran a un mandato Constitucional?”. Salazar Limón señaló que a inicios de la administración de Bustamante Anchondo, a través del secretario de Gobierno, se hizo una solicitud por escrito al director de la CESPT, Hernando Durán, para que presentara un balance de la paraestatal. “En aquella ocasión no pasó nada, nunca presentaron algo. Hace un año se volvió a realizar la solicitud, y la respuesta fue la misma: operan con números rojos y el municipio no tiene la capacidad, ¿okey?, vamos a creer en lo que se nos dice, que operar la CESPT sería una irresponsabilidad del municipio;  ya que por no tener recursos se puedan descuidar otras áreas. Pero no podemos caer en esos dichos, si no se nos presentan las pruebas”. El regidor aseguró que al no tener respuesta de manera formal, la solicitud se hará de manera oficial; por lo que el tema será incluido en la próxima sesión de cabildo a realizarse la semana entrante. El edil señaló que está consciente que quizá esta administración no logre el objetivo de tener las cuentas claras de la paraestatal en sus manos, pero sí van a dejar encaminada la petición formal para que los regidores entrantes le den seguimiento. “Desde el punto legal no hay que discutir y desde el punto económico, ellos (CESPT) no nos pueden decir si somos o no capaces de administrar y llevar a cabo eficientemente la dependencia, si no nos han mostrado los números ni han permitido un dictamen”. Salazar señaló que si los servicios de agua se transfirieran al municipio, los ciudadanos serían los más beneficiados. “El clamor de la ciudadanía son los baches, y en ese sentido la CESPT abre, hace una reparación y no cierra; es un desorden, lo vemos a diario. Hay veces que las obras quedan abiertas por meses. En cambio si los servicios pasan al municipio, en cuanto se haga una reparación se cierra de inmediato. “Otra ventaja es que habría más coordinación de los pluviales, porque siempre hay un problema con la CESPT, hay pluviales que entran al drenaje y no podemos operar”, dijo. El regidor mencionó que con tanta negación de la paraestatal se convierte “en un asunto político”. “Si el gobierno del estado da tantas participaciones a la CESPT, pues también las puede seguir dando si pasa al municipio. Debe haber coordinación y voluntad política, se debe respetar el mandato Constitucional. “¿Qué se ocultará? Hay muchas especulaciones, que es la caja chica del gobierno del estado o bien premios políticos para algunos funcionarios, sin siquiera tener la vocación”, acotó. La CESPT en números 225 mil tomas de agua en 1995      371 mil tomas de agua en 2002 508 mil tomas de agua en 2010 600 mil tomas de agua en 2013       100 mil usuarios morosos 90 por ciento cobertura de alcantarillado en Tijuana 88 por ciento cobertura de alcantarillado en Rosarito Mil 740 empleados Mil 800 millones de pesos se adeudan 40 millones de pesos al mes se gastan en luz 100 millones pesos la deuda del agua de la UABC. 99.9 por ciento la eficiencia de la CESPT en cuanto al suministro de agua 21.05 pesos cuesta producir un metro cúbico de agua.  16.39 pesos es el costo que se le cobra al usuario de vivienda por metro cúbico. 45.97 pesos el costo para el usuario industrial por metro cúbico 70 por ciento de los deudores son civiles. 30 por ciento son instituciones públicas.

Autor(a)

Redacción Zeta
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Redacción de www.zetatijuana.com
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