La Comisión Estatal para la Protección Contra Riesgo Sanitarios en Baja California Sur, reconoció que se sacrificó a más de veinte reses para evitar la propagación de tuberculosis animal. Los brotes se dieron en tres ranchos de la entidad. “En este caso fueron dos o tres, los otros ya están enviando detalladamente el número de cabezas y ganado, y el resultado final que hizo el veterinario”, informó René Francisco Cota Bendaño, encargado del proyecto de rastros de COEPRIS. De igual manera, destacó que los ranchos en los que se presentó la tuberculosis animal en algunas reses, se implementó una estrategia de control y prevención para evitar la transmisión de la tuberculosis; es decir, el total del ganado de los ranchos se sacrificó para evitar que se infectaran. Antes de sacrificarse y después, se analizó a los especímenes para buscar tuberculosis. La medida está establecida en las operaciones de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación, y busca mantener estándares de calidad de la tuberculosis. Es SAGARPA la entidad encargada de proporcionar los datos a detalle del operativo. Los productores ganaderos son compensados por las reses sacrificadas, que luego de ser analizadas y de no estar infectadas, se comercializan para el consumo humano.