Blancarte desde su estudio

Después de los 80 años o ante la inevitable jubilación, muchos artistas prefieren descansar. No es ése el caso del maestro Álvaro Blancarte. En junio de 2012, el artista plástico sinaloense radicado en Tecate, dijo adiós a su papel de maestro en la Universidad Autónoma de Baja California (UABC). Desde 1987, léase durante 25 años, compartió conocimientos y experiencia, amabilidad o paciencia, para formar generaciones de decenas de artistas en estas tierras. Al abandonar la docencia, también deja atrás su taller que tenía en la UABC de Tecate: “Mi inquietud era despegarme ya de la Universidad, luego de 25 años. Hice un gran ambiente ahí, porque ahí formé bastante gente, sin embargo, aquí no se trata de formar a nadie, se trata de dedicarle más tiempo a mi obra, absoluta, completa”, refiere a ZETA el maestro Álvaro Blancarte en su nuevo taller en Tecate, en mancuerna con el también artista Gabriel Adame. “Si algún alumno o alumna se acerca, si creo yo que tiene posibilidades, pues los atenderé con mucho gusto. Pero básicamente este espacio lo siento para mí en lo personal, sin ninguna molestia, sin ninguna institución que te diga ‘te hablan por teléfono’, ‘necesitamos esto, necesitamos aquello’; ya me jubilé”, advierte.  El artista en su nuevo estudio   Tecate está rodeado de esculturas prehistóricas esculpidas por el tiempo y otras erosiones. Dos cerros emblemáticos vigilan el popular pueblo: El “Cuchumá” y el Cerro de “La Panocha”, ahora homónimo del estudio de Blancarte. Este último cerro, del lado norte, está dividido por el muro fronterizo color cobrizo que separa México de Estados Unidos. Y del lado sur, al final de sus faldas, un bodegón resalta entre las casas tecatenses. En las raíces de la colina, justo enfrente del Parque del Periodista, en un terreno de más de 500 metros cuadrados, destaca la bodega color ocre, recién pintada. De 10 por 20 metros, la casona tiene paredes de cuatro metros en la parte más baja, hasta seis en la cúspide. La altura de los muros es ideal para las majestuosas piezas de Blancarte. Al entrar, inmediatamente figuran obras de gran formato de la serie “Los Matéricos” y “Chamanes”, y también de tamaño mediano, como las de la colección “Kaimansutra”. El artista muestra al reportero dos obras enormes, una de 2.50 por 2.50 metros, y otra de 2.44 por 2.44 metros que acaba de terminar de crear apenas dos días antes: En las fastuosas piezas figuran las piedras colosales de La Rumorosa, formas orgánicas en contextos grises, verdes, violetas y ocres. <p align=”left” class=”p” style=”margin: 0cm 0cm 0.0001pt;”>Por la textura explosiva y las formas rupestres intervenidas por Blancarte, las obras matéricas dan la impresión de entrar en una cueva perdida en el tiempo. “Los trabajé pensando en La Rumorosa, pensando un poco en el paisaje del estado de Baja California”, expresa al reportero y aclara que son piezas pensadas fundamentalmente para una muestra a exhibirse en 2014 en Tijuana. Evidentemente, Baja California ha influido en la obra blancartiana desde 1987: “Yo antes pintaba cosas con mucho colorido. Primero dije: ‘¿Dónde estoy? Vengo de México y Culiacán, tan verde; llego a Baja California y ¿qué pasó con los árboles?’; pero comencé a apreciar el color de las piedras, la arena, de la misma vegetación bajacaliforniana; han influido cien por ciento en mí”.  En El Cubo   El 27 de marzo de 2014, Álvaro Blancarte cumple 80 años. Nace en Culiacán el 27 de marzo de 1934. Y el Centro Cultural Tijuana (CECUT) prepara para la ocasión una muestra selecta en la galería internacional El Cubo a manera de merecido homenaje. A inaugurarse en febrero de 2014, la selección de la obra de Blancarte estará a cargo del curador José Manuel Springer. “La curaduría la quiere hacer en base a la luz y con mis texturas. Él ya vino y seleccionó alguna obra en Ensenada y obra que tengo aquí guardada en el taller. Springer dice que mi obra no cabe en El Cubo completo, que cabía en dos salas; pero más que meter mucha obra, él quiere hacer una gran selección, que no sea tanta obra y trabajar con un efecto visual”, adelanta Blancarte. El artista aclara también que la exhibición de 2014 en El Cubo será 100 por ciento abstracta e incluirá algunas piezas de las célebres series “Barroco Profundo” y “Los Matéricos”. Hay que recordar que la serie “Los Matéricos” fue concebida inicialmente para la exhibición homónima que el artista presentó en la galería Frida Kahlo de la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS) Campus Culiacán en 2010. Mientras tanto, “Barroco Profundo” es una serie de arte abstracto de más de 200 neofrescos (bautizados así por la crítica de arte Raquel Tibol) de formatos diversos exhibida en 2002 en la Sala de Arte Álvaro Blancarte, localizada en la UABC Campus Tijuana. Mientras tanto, la exhibición “Alquimista Matérico” continuará su itinerario.  Del Museo Felguérez a Tecate   En 2012, el Museo Manuel Felguérez invita a Álvaro Blancarte a exhibir en ese internacional museo de arte abstracto. La individual inaugurada ese año lleva por título “Alquimista Matérico”, misma que se ha exhibido en diversos espacios de México. Integrada por 41 piezas de gran formato de las series “Barroco Profundo” y “Los Matéricos”, “Alquimista Matérico” inicia precisamente su itinerario en el Museo de Arte Abstracto Manuel Felguérez, después se monta en el Consejo para la Cultura y las Artes de Nuevo León (CONARTE), luego en el Parque Cultural Reynosa en Tamaulipas, en el CEART de Mexicali y, entre el 30 de agosto y el 7 de octubre de este año, en el Centro Estatal de las Artes (CEARTE) de Ensenada. “La exposición no es la culminación de mi obra, sino de hasta donde voy ahorita en mi obra abstracta. Para mí, la exposición es un poco también un homenaje a los abstractos del mundo, lógicamente a Manuel Felguérez, porque siento que ha hecho una gran labor con su museo”, aclararía Blancarte. “Alquimista Matérico” será inaugurada el viernes 29 de noviembre en la galería del Centro Estatal de las Artes (CEART) de Tecate, y permanecerá en exhibición hasta el 7 de febrero de 2014.  Taller en mancuerna   Álvaro Blancarte y Gabriel Adame comparten el taller tecatense. Dividen gastos, incluida renta y demás servicios básicos. Adame es su alumno desde 1987, año en que el artista sinaloense se establece en Tecate. En aquel entonces, Adame tomó clases de dibujo con Blancarte y, de hecho, la primera producción del alumno fue “Serie Erótica Cuchumá”. Precisamente, en el estudio de Blancarte y Adame, figuran también piezas “Serie Erótica Cuchumá”, “Divas” y “Los Monitos Curados” del alumno. Adame confiesa a ZETA que el estudio en mancuerna con Blancarte es una idea que ya desde hacía mucho tiempo se estaba fraguando: “Éste era un proyecto acariciado por años que teníamos él y yo. Lo habíamos platicado muchas veces: ‘ojalá algún día podamos hacerlo’, y el detonante fue precisamente la jubilación del maestro Blancarte”, cuenta Gabriel Adame a este Semanario. Y mientras Blancarte trabaja algunas piezas para la exposición en El Cubo, Adame también continúa produciendo obra para exhibir en abril de 2014 en Tijuana. Eso sí, el dentista de profesión pero artista por pura pasión, continúa las series en mención: “Una serie no debe terminar, pienso yo. Puede quedarse suspendida un tiempo, uno, dos, tres, cinco años, pero siempre hay que retomarla”, expresa Adame. “La idea es tener el taller hasta que se pueda, estamos pensando mínimo diez años o más. La idea es ésa: Yo me visualizo trabajando aquí cada vez más, haciendo proyectos, participando en eventos y tratando de entender mi cultura y el arte en sí, ir haciendo búsquedas dentro de lo mío”. Y “yo me visualizo -concluye Álvaro Blancarte- metido en ‘La Panocha’ el máximo tiempo que se pueda. Sigo investigando lo mío: de lo matérico y los temas; un tema puede ser muy abstracto, pero siempre hay un concepto ligado en toda mi obra a la materia, a lo matérico, al lugar donde vivo, a la propuesta plástica posible para el crítico, para el que analiza, para el público, pero sobre todo para mí. En realidad para mí comienza una nueva etapa y nuevos compromisos”.