Sr. César René Blanco Villalón Sra. Adela Navarro Bello. — Codirectores del Semanario ZETA Reciban Ustedes un saludo cordial y afectuoso. Al amanecer lo primero es ver las noticias para enterarnos de qué está pasando en nuestro lugar y de paso en varias ciudades, aquí un poco de todo eso. Da vergüenza que en México haya hambre, dice Rosario Robles. Pero más vergüenza nos da a nosotros que Usted no tenga hambre por salir adelante y quitarse la desnutrición mental al igual que todos los políticos. Señora Ana María Jiménez Ortiz, pues como digo una cosa digo otra, un aplauso para Usted, que lo hace con la luz encendida, sin vendas en su rostro, pero lo cierto es que cierra los ojos pensando en el chofer, Usted sí, no discrimina al indio. La pregunta de la conductora de Once Noticias es quién les provee a los profesores de casas de campaña igualitas y nuevas, autobuses para sus traslados, quién les da para comer y etcétera. Tendrá el mismo valor de preguntarles por televisión y bien desmenuzado a los políticos de todo el dinero que se roban. Señor Luis Ernesto Cordero, de verdad qué pantalones tiene Usted para hablarle al jefe de gobierno del D. F. de esa manera para que haga su trabajo y quite a los profesores, eso sí es valor, pero a la hora de ver la realidad no aparece Usted, ¿lo podremos comparar con algún animalito de los que abundan en las casas? Cuánta discriminación hacia los vendedores de la vía pública, están saliendo en estos momentos por distintas partes del país, pero no hay por qué extrañarse, los vendedores, que son en su mayoría indígenas que no tienen otra forma de ganar dinero, están en zonas turísticas y en el centro de las ciudades, al vender sus productos le hacen competencia los establecimientos y los dueños de estos establecimientos les pagan y les dan regalos costosos a los inspectores de los municipios (en algunos lugares llegan a darles hasta vehículos) para quitarlos a como dé lugar, pues también dicen que dan mal aspecto y que se entienda bien, lo gringos no son tan discriminatorios, es México el país que más discrimina a las persona, esto lo hace a su propia raza y todo de manera silenciosa, que en realidad es una de las peores formas. Ya empezaron a perdonar y a salir de las cárceles personajes muy conocidos, ¿verdad que si hay billetes en México? Me refiero a ti, el más guapo de la televisión, sales a todas horas del día y de la noche, todo indica por qué la Gaviota cayó a tus pies, pero triste realidad, parece que ya no puede alzar el vuelo. Sigue y empieza la represión a los grupos que se defienden, que son los pueblos que están hasta la madre de tanta delincuencia, pero viéndolo por el otro lado, México ya no está tanto de rodillas, se va levantando y empieza a levantar la cabeza y después esa mirada, pero será demasiado tarde. Pacto por México, ¿alguien me podría explicar para qué sirve?, porque lo único que se entiende es cómo repartirse el gran pastel llamado México. La reforma energética, no te preocupes ciudadano común y corriente, ahí están los súper chingones para representarte y seguir exprimiendo a México lindo y necesitado, déjalos que inviertan sus pocos millones que tienen, quizás un día no muy lejano, al levantarse se darán cuenta que solo cenizas queden, me gusta tu sonrisa, Carlos Slim, más cuando te dicen que eres humilde y agachas la cabeza, pero por dentro te sientes como un elefante, cuidado con el ratón, mi pequeño saltamontes. Y para terminar, ¿se acuerdan de la bola que se va, se va y se fue haciendo, pues así es, se fue haciendo pequeña y todos y felices y contentos, ¿verdad?, pero viéndolo por el otro lado, la bola ahí viene y viene y se va haciendo, cuidado, duendecillo, porque te aplasta, luego entonces pon atención a esto. Empiezo a correr porque me están siguiendo, sigo corriendo por este jardín de puro pasto, al tratar de subir por un pequeño montículo me resbalo y desesperado trato de pararme para seguir corriendo, pero unas manos me agarran los pies y me capturan, al voltear únicamente veo sus pies y vienen vestidos con uniforme camuflado, me levantan y seguimos caminando por el jardín de esa casa que está en la ciudad, al ir pasando por unos grandes ventanales, volteo la mirada a la izquierda y adentro ahí está parado, viéndome que ya me capturaron adentro de su casa y no puedo escapar, donde está parado está un poco oscuro, pero es su figura que ya la conozco, pequeño, delgado y esas orejas. Aquí estoy en esta casa alejado de todo, parece una casa de campo, hay un camino de terracería con muchas plantas y arbustos para llegar hasta ella, también a los lados hay árboles y en la entrada están construidos dos arcos. (Al Señor Manuel Muñoz Rocha le gusta la cajita de madera con cajeta, porque dice que no le gustan los emparedados) Muchas gracias por su atención y agárrense porque ahí va la bolsa, Señores, ahí va la bolsa, ahí va la bolsa. Juan Ángel Hernández Tijuana, B. C.
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