Divididas las células del cártel de Sinaloa en Baja California De acuerdo a Investigadores Estatales, han detectado un patrón: ante la presión e interrogatorios policiacos, los detenidos por narcotráfico o narcomenudeo, están siendo obligados a señalar como cabecilla a “El Atlante”. La razón, explican los Policías a ZETA, es que Alfonso Lira “El Atlante”, identificado físicamente hace unas semanas, se trasladó a otro estado, desde donde mantiene relaciones criminales en Baja California, y está protegido. Señalarlo como responsable, concluyen: es quitar la marca a otras células criminales. Por eso el nombre de Lira es la constante tratándose de droga, dos ejemplos: * 3 de abril 2013.- José Iván Jiménez Méndez, “El Chulo” o “El Chore”, un ex agente municipal del estado de Oaxaca de 2001 a 2002, por deuda de drogas asesinó al estadounidense Jorge Alejandro Medina Ortiz. Según declaraciones tenía que ver con el narcomenudeo y con el grupo de “El Atlante”. * 21 de agosto 2013.- La indagatoria oficial indica que los homicidas del policía Raúl Ruiz Martínez fueron contratados por “Los Pelones” célula criminal que opera en la zona norte de Tijuana, ligada a Lira Sotelo. Revela un investigador al observar el patrón de señalar a un solo presunto delincuente: “El plan es quitarle la marca policiaca de encima a los verdaderos jefes, Alfonso Arzate García “El Aquiles” y José Antonio Soto Gastélum “El Tigre”, los representantes de la mafia sinaloense en la zona costa bajacaliforniana. Evitar que el resto de los operadores de gran escala sean identificados y perseguidos, y que la actividad policiaca se concentre en Alfonso Lira Sotelo quien ciertamente funge como “lugarteniente apoyado por su familia”. En el área de inteligencia de la Estatal Preventiva, tienen identificado un organigrama de tinte familiar-criminal que incluye a familiares de Lira Sotelo en actividades que se presumen ilícitas: 1.- Javier Lira Sotelo “El Carnicero”, identificado como hermano de “El Atlante”, fue detenido el 9 de abril de 2012 junto a tres hombres y una mujer, en un operativo de la Policía Municipal de Tijuana y elementos del Ejército, que duró dos horas y dos casas fueron intervenidas ante flagrancia de delito. En una casa del Florido encontraron 857.7 kilos de marihuana, 29 kilos de crystal y 7.262 kilos de heroína y en otra de Loma Dorada, 15 armas largas nuevas, un arma corta, 200 cartuchos, y 24 cargadores. Los otros detenidos señalaron a Lira, como jefe del grupo y delataron la existencia de tres casas de cambio en la zona Este para lavar dinero de las drogas; que pagaban piso a “El Aquiles” con droga, y que un tal “Meño” del Cártel de Guadalajara les vende droga; que distribuían en Tijuana con “los Teos” hoy encabezados por “El Tigre”; y a Estados Unidos cruzaban enervantes en carros arreglados. 2.- “Concha” Lira.- identificada así por la Policía, una mujer presuntamente hermana de “El Atlante” que es investigada por su posible involucramiento en lavado de dinero a través de casa de cambio y compra de inmuebles. La mujer había sido mencionada en declaraciones de 2012, pero hubo mayores datos en agosto de 2013 tras la captura de “El Tío”. 3.- José Lorenzo Porfirio Cervantes Martínez.- Apodado “El Tío”, fue detenido el 12 de agosto de 2013 por la policía Estatal Preventiva, es un hombre de 51 años, quien según sus delatores “es cuñado de Concha, una hermana de El Atlante”. 4.- Un tercer hermano varón.- Investigadores siguen la actividad de un tercer hermano a quien ubican como coordinador-responsable de un Centro de Rehabilitación que inició operaciones en un local del fraccionamiento Soler pero que a partir de 2011 extendió su zona de influencia con otro centro en la zona norte de Tijuana, identificada como el mayor foco de tráfico de drogas en la ciudad y área de influencia de “El Atlante”. Otras familias presuntamente relacionadas en negocios ilícitos con los Lira incluyen los apellidos Martínez, Rodríguez, Alba, Cervantes y Quiebrera. Del modus operandi Los operativos policíacos organizados contra el grupo de “El Atlante”, iniciaron en 2012, cuando se fue acreditando un alto nivel de violencia e implicación en asesinatos y secuestros de la zona costa bajacaliforniana. La información de las áreas de inteligencia de la Policía Preventiva, indica que la célula está integrada por muchos grupos criminales encabezados a su vez por parientes. En abril de 2012 la policía municipal pudo encontrar una casa de seguridad y una lista de los distribuidores de Lira con los siguientes apodos: “La Rosy”, El Tito”, “El Marqués”, “El Tribi”, “El Chespi”, “El Bolonia”, “Nacho”, “Miguel de Las Canchas”, “Alan”, “Roberto”, “Ely”, “El Pony”, “El Guarachín”, “La Doña”, “Felipe”, “El Güero”, “Luisillo”, “Robert”, “Mich” y “Ramón”. Capturas realizadas entre el 8 y el 16 de agosto de 2013, llevaron al decomiso de más de 11 millones de pesos en cocaína en Tijuana y una definición más clara de la operatividad de este grupo delictivo. Captaron más información de José Lorenzo Porfirio Cervantes Martínez, quien fue detenido; pero informan que están en libertad y delinquiendo sus principales operadores y administradores de tienditas de droga: “Efrén apodado El Chamuco y Martín”. También llegaron a la conclusión los investigadores, que la droga que trasiega y vende Lira Sotelo, llega a Baja California procedente de Sinaloa, lo mismo la cocaína, y de Jalisco el crystal. Además que controla menudeo en Tijuana, en Tecate y que trafica a Estados Unidos en “carros arreglados”. Cómplices aprehendidos refirieron que tienen un sistema seguro para cruzar por las garitas, pero no detallaron los arreglos, que eso lo maneja Lira directamente: “El Atlante supervisa personalmente la llegada y salida de cargamentos grandes y dinero, lo hace por vía radio”; esto hasta agosto de 2013, cuando salió de Tijuana vía aeropuerto. Han concluido también los Policías, que Lira es muy desconfiando, prefiere estar cerca de la zona donde se hacen los movimientos para vigilar que traficantes, competidores o policías, no roben su droga, “pero lo suficientemente lejos para no ser detenidos en caso de una intervención policiaca”. De hecho, detenidos aseguraron que el 17 de agosto de 2013 cuando el jalisciense Luis Ángel Torres Barba fue asegurado en un Ford Ranger en la calle Escuadrón 2001 del fraccionamiento Aviación, y Luis Jesús Ramírez Partida en un Honda Civic en el estacionamiento de Soriana Zona Río, “El Atlante estaba en el área”. Ahí se incautaron 11 kilos 300 gramos de cocaína, seis paquetes en el Ford y tres en el Honda, todo con un valor aproximado de 11 millones 300 mil pesos, los envoltorios tenían inscritas las iniciales “AL” y según los policías, los detenidos dijeron que la droga era de Alfonso Lira “El Atlante”. Días después –informaron Policías– abandonó la ciudad. Los homicidios De acuerdo a la Procuraduría General de Justicia del Estado, de los 375 asesinatos ocurridos en lo que va de 2013 en Tijuana, el 25 por ciento están relacionados con la célula de “El Atlante”, un 20 por ciento con “Los Pelones”, ex compañeros criminales y actuales competidores. “En su momento tenemos registros en las propias declaraciones de donde sí había una colaboración de un grupo unido y obviamente después evolucionan y hacen sus propias divisiones y se vuelven grupos antagónicos, en cuanto a esta célula que se independiza y crean dos frentes que son Los pelones y Los Atlantes y se diputan entre ellos, al fin de cuentas un todo arropado por un cártel que es Sinaloa”, explicó Abel Galván subprocurador Contra la Delincuencia del Estado de Baja California. — ¿En cuántos expedientes tienen como presunto autor intelectual a Alfonso Lira “El Atlante”? “Hasta el momento no tenemos orden de aprehensión contra El Atlante, estamos explorando no solamente en ejercitar acción penal contra los autores materiales, estamos apostando también a que nuestros expedientes dentro de los resolutivos, el ministerio público sea astuto y pueda atreverse a razonar y ejercitar acción penal en contra de los autores intelectuales quienes están mandado hacer estas ejecuciones”. —Pero ha sido mencionado en… “Ha sido mencionado porque cuando tenemos gente detenida, interrogados se les comentan a qué célula pertenecen y bueno responden trabajamos para El Atlante, estamos en esa fase, de ese 25 por ciento de los homicidios que se han presentado, cuando comento que están relacionados con El Atlante es porque estas personas refieren que trabajan para la célula, tal vez no refieran El Atlante me dio instrucciones de forma directa, estamos en esa ruta de solicitar esos mandamientos que en su momento esperamos nos estén obsequiando los jueces. “Como ha sucedido con otras células, como sucedió con José Luis Mendoza Uriarte ‘Güero Chompas’, otros sujetos que aunque no anden en la calle accionando las armas de fuego, sí están desde sus trincheras dando esas órdenes”. Las detenciones previas Para llegar a la cocaína, el área de inteligencia de la Policía Estatal Preventiva realizó una investigación que inició el 5 de agosto de 2013 con la captura de Margarito Javier Ibarra García y tres cómplices, este hombre fue el primero en señalar a Lira Sotelo plenamente, aunque las autoridades locales ya lo tenían físicamente identificado. Las declaraciones de Ibarra, quien había sido detenido con armamento prohibido en la zona de Granjas Familiares, también permitieron a los policías ponerle cara al presunto concuño de “El Atlante”, José Lorenzo Porfirio Cervantes Martínez “El Tío” o “Lorenzini”, quien era su jefe directo, y ya había sido mencionado en varias detenciones. Ese día este hombre se convirtió en objetivo de los uniformados locales, habían sido informados que operaba en la zona oeste de Tijuana y siete días después fue capturado “…en posesión de 26 dosis de la droga sintética (ice) y 100 gramos de crystal”. Lo pudieron detener porque el presunto delincuente fue denunciado. Un anónimo informó que circulaba en la avenida Fuentes de Tecate casi esquina con la calle Hacienda Fuente del Viejo. Al ser interceptado, el hombre estaba –de acuerdo a la versión oficial– en la parte trasera de un vehículo Nissan Frontier modelo 2001, de color azul, con placas de circulación BP05240. Su mención previa había ocurrido el 19 de mayo de 2013, cuando se incautaron 544 kilos de mariguana. Esta detención se realizó al darle seguimiento a una denuncia ciudadana que reportó detonaciones de arma de fuego en calle Acacia en El Florido, Tercera Sección. Frente a la casa 9630 fueron capturados Ramón Arturo Ramos Bojórquez y Miguel Antonio Gómez Celleli, según el parte estaban armados y 202 paquetes de droga fueron localizados en el inmueble. En el mismo operativo, posteriormente detuvieron a José Carmen Vázquez Andrade en el fraccionamiento Las Delicias con un arma y pequeños envoltorios de marihuana y cristal. Y más tarde a Manuel Jacobo Montoya en El Refugio. “Durante su detención Vázquez Andrade manifestó que el arma que le fue asegurada la utilizaba para participar en homicidios por ajustes de cuentas de narcomenudeo en los que su función era la de “puntero”, al igual que Ramón Arturo Ramos Bojórquez, y el encargado de perpetrar los asesinatos era Miguel Antonio Gómez Celleli”. “Ramón Arturo Ramos Bojórquez también dijo que todos los asegurados al igual que Manuel Jacobo Montoya trabajan para José Lorenzo Porfirio Cervantes Martínez, alías “El Tío”, de aproximadamente 50 años de edad, quien es jefe de una célula del grupo criminal del presunto narcotraficante identificado como “El Atlante”. Ambos párrafos están contenidos en el parte informativo. Señalan abuso de autoridad de la PEP Las declaraciones de los detenidos indicaron que Lira Sotelo controla varias casas de cambio en las que lava un promedio de 200 mil dólares semanales, y dieron algunos nombres, las corporaciones hicieron seguimiento. En ese contexto fueron detenidos el 25 de agosto, dos hermanos de apellido López. El reporte indica que la captura fue resultado de una denuncia ciudadana en la que se reportó como sospechosos a dos hombres “que contaban mucho dinero en vía pública” sobre la calle Escuadrón 201 de la colonia Aviación de Tijuana. En el expediente: que el hermano mayor, Jorge, intentó huir al ver a los policías, y al ser capturado traía 40 mil pesos en billetes de 200 pesos; y su hermano Juan López Coronado, de 40 años de edad, quien al ser intervenido por los estatales preventivos, traía 107 mil pesos. Los consignaron a la PGR por portación de recursos cuya procedencia lícita no pudieron comprobar, sin embargo el ministerio público del fuero federal los liberó después que sus jefes, propietarios de una casa de cambio, reclamaron el dinero que también les fue regresado. Un hombre que se identificó como casa-cambista que pidió no publicar su nombre por temor a represalias, acudió a las oficinas de ZETA a reportar este hecho como un abuso de autoridad. Aseguró que en fechas recientes los agentes de la PEP se han dedicado a extorsionar a casa-cambistas honestos, y que los hermanos López fue la segunda detención de empleados de casa de cambio en un período corto, y que esas dos capturas se deben a que se niegan a pagar a los uniformados extorsionadores. Tres asesinos consignados delinquían para “El Tío” Homicidios a la alza La Procuraduría General de Justicia del Estado de Baja California consignó el 12 de septiembre de 2013 a Marco Antonio Salazar “El Arqui”, Yesenia Palomina “La China” y Jesús Mario Sierra López, por los homicidios cometidos el 10 de enero de 2013 en contra del policía municipal activo Ricardo Hernández Salgado, y el 31 de julio, al distribuidor de droga al menudeo Artemio Carrera Guzmán. Dentro de las indagatorias, los detenidos confesaron operar criminalmente bajo la tutela de José Lorenzo Porfirio Cervantes Martínez “El Tío” o “Lorenzini”-capturado el 12 de agosto de 2013-, concuño de Alfonso Lira “El Atlante”. A este grupo le decomisaron una subametralladora de 9 milímetros, una escuadra de 45 milímetros, un cuerno de chivo, cargadores, 17 casquillos de 9 milímetros percutidos y tres más calibre 45. Como parte de la misma célula, previamente fueron capturados Erick Múzquiz, Cristian Godoy y Daniel Martínez, cuya información permitió llegara a los autores materiales de los homicidios. Al 10 de septiembre de 2013, en Baja California se han registrado 552 homicidios violentos, de los cuales 375 corresponden a Tijuana, 101 a Mexicali, 26 a Rosarito, 19 a Tecate y 31 a Ensenada. Las cifras corroboran el incremento del asesinato violento es más de un 16 por ciento en el estado, en relación con la incidencia del año pasado. Las autoridades locales consideran que este aumento está directamente relacionado con el cambio de la política de seguridad del Gobierno Federal, y la retirada del Ejército de la tarea preventiva y combativa a las actividades del crimen organizado. De los 375 crímenes ocurridos en Tijuana, el municipio más afectado por la violencia, la Procuraduría estatal atribuye la autoría del 30% de los homicidios violentos a la célula delictiva encabezada por Luis Mendoza Uriarte “El Güero Chompas”, el 25% relacionados con la célula de “El Atlante”; un 20% al grupo de “Los Pelones”, y un 25% a los grupos de sicarios que dependen directamente de Alfonso Arzate “El Aquiles”. “Han sido estas cuatro células principales las que se han estado registrando en nuestras entrevistas de homicidios violentos”, detalló Abel Galván, subprocurador en Delincuencia Organizada del estado. En la ciudad fronteriza, las zonas donde más se registra el delito de asesinato en Tijuana son las siguientes delegaciones: Presa, Presa Rural, La Mesa y San Antonio de los Buenos, y esporádicamente, la Zona Norte. Las cifras de efectividad en materia de homicidio de la PGJE indican que del 1 de enero al mes de agosto de 2013, se ha detenido a 130 presuntos responsables (30 ciudadanos deportados), se han hecho efectivas más de 90 consignaciones, 35 expedientes relacionados de forma directa con narcomenudeo con temas de arraigados, y se tienen pendientes alrededor de 70 órdenes de aprehensión -20 han sido cumplimentadas-, el 80% relacionadas con temas de drogas, y un presunto responsable de homicidio se encuentra arraigado. En cuanto a modus operandi, Galván explicó que además de asesinar con armas de fuego, los criminales organizados están estrangulando, usando armas punzo cortantes, objetos contusos o contundentes, y calcinando. “Dejamos atrás las grandes armas que demostraban la pugna entre grandes cárteles que deseaban mostrar el poderío y mandar un mensaje. Ahora estamos hablando de problemas entre células, tenemos una fuerte adicción, una fuerte oferta demanda que lleva la pelea de territorios de una colonia a otra. Inclusive ya no tenemos la tiendita de droga en la casa, sino que gente en bicicleta, en el parque, cargando 10, 15, 20 dosis y una 9 milímetros fajada a la cintura para proteger el terreno”. Asimismo, el funcionario destacó que los homicidas están usando menos las pistolas para evitar ser vinculados a través de los bancos balísticos y dificultar el trabajo del Ministerio Público. “Pero nos hemos apoyado con las entrevistas y búsqueda de información, primero identificar a la víctima, y revisar el círculo familiar, laboral, los antecedentes”. De los homicidios calcinados, reconoció que ninguno ha sido resuelto. “El objeto del calcinado es que se pierda la evidencia, y al dificultar la identificación, el expediente se complica; hay gente que se han acercado presumiendo que el calcinado es su familiar y se han procesado exámenes de ADN, pero son procesos tardados”, dijo. Versiones extraoficiales ubican a los calcinados como víctimas de “Los Uriarte”. Finalmente, se le preguntó del retorno de los homicidios en espacios públicos, el 2 de mayo 2013, cuando un comensal fue asesinado en el restaurante de mariscos Nueva Tecuala, ubicado en la calle Constitución y Bulevar Cucapah, Delegación La Presa; el 1 de septiembre, José Luis Lunardón Godínez, dueño de la misma marisquería, fue asesinado en el local; y el 9 de septiembre, Hugo Alberto Nava Ávila y David Cueto fueron asesinados en las canchas de futbol rápido Furati, ubicadas en Paseo de Los Héroes, Zona Río Tijuana. “En todos los casos, las entrevistas permitieron ubicar a las víctimas en actividades ilícitas de venta de droga y sus homicidios, presumiblemente como venganzas por deudas de enervantes que se están investigando, incluso en los casos mencionados ya hay avances que no se pueden informar por el sigilo de la investigación. En este aspecto cabe destacar que aunque se dieron en espacios públicos, en todos los casos se trató de ataques directos y certeros”, culminó Abel Galván. PEP's consignados por extorsión Conforme al parte informativo, los policías estatales preventivos Fernando Cruz Bórquez, Marco Antonio López Martínez, Manuel Alejandro Toscano González, Jesús Israel Quintero Cabrera y Eduardo Agúndez Guadarrama, fueron detenidos el 9 de septiembre de 2013 en la base, después de que consignaran a los hermanos Jorge y Jesús Hurtado Duarte, a quienes decomisaron 19 mil 911 dosis de metanfetamina. El filtro de revisión instalado por los oficiales acusados en la calle Miraflores del fraccionamiento El Rubí, recibió una vista de inspección de los supervisores. En el lugar informaron que tenían detenidos a dos hombres con psicotrópicos. “Preguntándole el Comandante Pérez García si había hechos, el reporte a la central de radio y verificados los nombres de los detenidos, a lo que le contestó Cruz Bórquez que sí, mencionando el comandante que en el lugar solo se percató de que se encontraba una persona”, refiere el comunicado. En los renglones siguientes, el supervisor explica que por instrucciones superiores se dirigió a ver la casa donde se había realizado la detención y, sin entrar, después todos se trasladaron a la base. Ante la inconsistencia del reporte de uno o dos detenidos, el comandante operativo ingresó a las celdas para hablar con los presuntos traficantes. Jesús Hurtado dijo que lo habían detenido en el carro con unas cuantas pastillas frente a su casa, a la cual ingresaron los policías y encontraron el resto de la droga. Lo aseguraron junto a los enervantes y lo llevaron al filtro, donde “…un agente que en ese momento no identificó, le indicó que hiciera una llamada a su hermano para pedirle la cantidad 15,000.00 (quince mil dólares moneda americana)”. Ante esta declaración, llamaron a Asuntos Internos. Jorge Hurtado declaró haber recibido la llamada de su hermano, “…quien le dijo que había sido detenido por unidades de la PEP, con pastillas, y que fuera por quince mil dólares a su casa y que me trasladara al domicilio de él”. Detalló que al llegar al punto, le quitaron el dinero, lo guardaron en una patrulla y le dijeron que lo iban a consignar. Acompañado de dos jefes operativos, el director de Asuntos Internos, de la Secretaría de Seguridad Pública, inspeccionó las unidades 293 y 719, “…encontrando en la primera de ellas, una maleta color negro, mismo que contenía equipo táctico, objetos personales, y en una de las bolsas que se encuentran en el exterior de dicha maleta, una bolsa de plástico color negra escondida, misma que contenía en su interior billetes de denominación de 100 dólares, arrojando la cantidad de quince mil dólares, además una bolsa de plástico color negra conteniendo en su interior siete envoltorios trasparentes conteniendo en su interior una yerba verde y seca al parecer marihuana, además dos envoltorios transparentes conteniendo una sustancia blanca, así mismo un envase de vidrio pequeño conteniendo una sustancia granulada la parecer cristal, además nueve pastillas rivotril, continuando con la revisión en la parte trasera del asiento del copiloto se encontraban regados billetes de varias denominaciones, con un total de 1886.00 dólares y la cantidad de 600.00 pesos moneda mexicana”. Con este reporte se presentó a los agentes ante la PGJE. Familiares de los detenidos informaron que los agentes no están conformes con lo manifestado por su jefes en el parte, aseguran que existen muchas inconsistencias, incluso que se elaboraron dos reportes para cuadrar los hechos y poderlos presentar. De la misma manera, expusieron que es mucha casualidad que la célula delictiva a la que pertenecen los Hurtado, fue la misma que denunció a los subjefes policíacos de la PEP que fueron removidos y están siendo investigados por Asuntos Internos. Al cierre de edición, los inculpados presentaban sus declaraciones preparatorias. Decomisos 9 de septiembre de 2013. La Policía Estatal Preventiva decomisó 83.6 kilogramos de cocaína en el fraccionamiento El Lago, en Tijuana, la cual era transportada por el de nombre Manuel Zatarain Peña. En lo que va del sexenio se han incautado 6 millones 701 mil 757 dosis de cocaína, valuadas en un billón 340 millones 351 mil 400 pesos. 10 de septiembre. En diferentes operativos en Ensenada, la PEP incautó 140 dosis de droga sintética y arrestó a Manuel Francisco Amador Carrillo, Gildardo Camacho López y Humberto Aceves Villagrana. En la zona de Otay, en Tijuana, se detuvo a Omar Carín Míreles Arcila y Leobardo Eduardo Gutiérrez Ramos, quienes circulaban en un vehículo donde policías estatales encontraron 2 kilos 900 gramos de cristal y 10 mil dólares dentro de un compartimiento oculto. 11 de septiembre. En Tijuana, los hermanos Jorge y Juan Manuel Peña Rivas fueron detenidos a bordo de una camioneta donde la PEP encontró 222 kilos 700 gramos de marihuana, droga valuada en casi 9 millones de pesos. 12 de septiembre. Elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional realizaron un decomiso de más de dos toneladas y media de marihuana y 14 kilos de cristal en Mexicali, tras un operativo en la Garita Centro, a la altura del Parque Héroes de Chapultepec. La persona detenida se incorporaría a la Línea Internacional para cruzar hacia Calexico.