Reforma Educativa, ¿impulso positivo o negativo? Muchos ciudadanos podríamos decir: “A mí no me incumbe la reforma educativa”, cuando ciertamente es un problema que ha ocasionado muchos disturbios. De parte del gobierno, al poner la reforma educativa, con la que se pretende que la evaluación magisterial no sea potestativa o voluntaria, sino obligatoria para todos los maestros; que la evaluación no sea pactable; que tenga consecuencias jurídicas, es decir, el maestro que repruebe la evaluación se tendrá que ir (y hay que recordar que en la última evaluación nacional reprobó el 75 por ciento de los maestros). Así, se comience a filtrar a docentes incompetentes, para crear escuelas dignas, escuelas de tiempo completo con criterios de calidad, equidad y autonomía. Pero claro está que a muchos docentes los quitarán de la zona de confort y ahí es donde se muestra el alboroto. El objetivo del gobierno es llevar la educación de México a un nivel alto. ¿De verdad creen los docentes que haciendo paros laborales el gobierno se reprimirá de las decisiones que ya se tomaron? En vez de estar obstruyéndonos las vías públicas deberían de estar innovando sus conocimientos para la evaluación magisterial. Tanto que nos dicen a los alumnos que leamos para aprender, es momento que lo apliquen a ellos mismos, que en vez que interrumpir la educación de los niños y jóvenes, muestren con el ejemplo y se llenen las bibliotecas con docentes que quieran ser partícipes de la educación en México. Pero claro, “cada quien aboga por sus intereses”. Y me pregunto ¿quién aboga por los niños a los que se les suspenden las clases para que los profesores puedan ir a protestar, por esos niños que son el futuro de nuestro país, por esos infantes que muchas veces no son bien atendidos por el maestro porque no está debidamente preparado? Con la frente en alto puedo decir que aquellos profesores que no están de acuerdo con la reforma educativa es porque tienen miedo de no ser lo suficientemente competentes para llevar a cabo una responsabilidad que está acompañada por la vocación, porque por lo único que están enfrente a un grupo es por el cheque que se les deposita cada quince días, por las prestaciones que se les ofrece. Hagamos conciencia y dejemos de pensar en una forma egoísta, profesores y gobierno. Mantengamos una mente abierta y una disposición para alcanzar grandes logros, sé que no es fácil pero la humildad no es imposible de aprender y de desarrollar. Alicia Serrano Méndez Estudiante de la Escuela Normal Fronteriza Educación Especial I.
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