Bloqueaban la circulación en una vía pública hacia el Puerto de Ensenada una veintena de elementos de la Secretaría de Marina con sus metralletas al frente y sus chalecos antibalas; una decena policías federales; otro tanto de policías municipales; unos más elementos de seguridad privada de la empresa “Servicios Integrales de Seguridad”; personal de la Administración Portuaria Integral (API) videograbando cada detalle; un helicóptero de la SEMAR circulando arriba; y personal de Capitanía de Puerto. Esto ocurría cerca de las 12:00hrs de este martes 13 de agosto de 2013. Parecía simulacro de ataque terrorista, pero era en realidad un bloqueo a la segunda manifestación pacífica que realizaron pescadores y comerciantes de mariscos que laboran en el Puerto de Ensenada, quienes piden se les permita continuar trabajando en el Puerto de la ciudad. Por “órdenes superiores”, los marinos y detrás de ellos prácticamente todos los empleados de seguridad de la API con vistosos chalecos y modernos lentes oscuros, no permitían avanzar a los cerca de 100 manifestantes que planeaban hacer un recorrido en el muelle destinado a pesca dentro del Puerto de Ensenada, como lo habían hecho minutos antes sobre calles de la ciudad, el Malecón, el Mercado de Mariscos y el edificio administrativo de la API, donde les cerraron con candado las puertas de acceso al Lobby, y no les abrieron aunque tocaron la puerta. Con la consigna, las fuerzas federales advirtieron a los pescadores de no cruzar la improvisada valla que montaron a media calle, dejándolos debajo de una estructura metálica en proceso de construcción, entre pintura y chispazos de soldadura. Bloquearon con leves empujones tanto a manifestantes como a camarógrafos y reporteros que intentaban registrar la interacción entre el líder de los manifestantes, Melchor Campoy Moreno, representante de la Unión de Pescadores de Altamar y Armadores de Baja California, A.C., y quien se identificó como Capitán Gómez Malverde, oficial naval de protección marítima y portuaria del puerto de Ensenada. Los pescadores no pudieron ingresar al muelle de pesca, sus reclamos nuevamente no fueron recibidos por ningún funcionario y/o vocero de la API y ahora, con triples refuerzos fue bloqueada su manifestación. Las demandas son las mismas, la petición de un espacio de muelle para la pesca comercial de altura, ribereña y deportiva en el puerto, y que los pescadores sean incluidos en los proyectos de gobierno.