De los cuatro festivales en los que “Navajazo” ha estado en competencia, ninguno se le ha escapado en cuanto a premios o menciones especiales. La buena racha inició en marzo en el Rivera Maya Film Festival, pasó al FICUNAM y al Festival de Cine de Durango, hasta finalmente llegar al reconocimiento internacional en Suiza, el 16 de agosto, cuando su realizador recibió el premio más importante de la ceremonia. “Estamos muy contentos, pero también todavía estamos asimilándolo porque es un compromiso. Este premio es como tener que dedicarte a hacer más películas. Realmente ya es una exigencia. Ya te tienes que dedicar a hacer cine y un poco eso nos ‘choquea’, el saber que es un momento donde ya el cine que empezaba como un hobby, porque nunca hemos vivido realmente del cine, se está convirtiendo en una profesión. Es lo rápido. La primer película y obtener esto, creo que es por eso el shock”, declaró en entrevista con ZETA Ricardo Silva, director de 28 años que con su ópera prima está logrando que otros lugares volteen la vista al cine hecho en Tijuana. Con imágenes grabadas entre 2009 y 2013, la película de aproximadamente 4 mil dólares de inversión, inició como un proyecto de prácticas entre Silva, que en ese momento estudiaba sociología, y el fotógrafo Adrián Durazo. Usando como base un método que el director obtuvo de su paso laboral por Síntesis TV y TV Azteca, sobre éste agregó: “Trabajé durante una etapa bien pesada para Tijuana, que era 2008-2009, todos los muertos y eso. Siempre me pregunté qué papel era el que jugaba el fotógrafo y camarógrafo, porque quieras o no llegaba un punto en que ya no era la historia del muerto, sino que ya era simplemente muertos, y muertos, y más muertos. No había un análisis… en este momento empecé a pensar mucho en la responsabilidad de la imagen… en la película se maneja eso, tiene momentos donde (ellos) intervienen. Siempre hay algo que está para decir si es real o no”. Centrada en personajes de la ciudad, “Navajazo” es un retrato de varias realidades crudas de esta frontera, a través de escenas espontáneas que Silva, Durazo y la productora Paulina Valencia, consideran fueron la clave para darle vida. Con motivo del premio obtenido en el Festival de Cine de Locarno, esperan tener un reestreno para la gente de Tijuana, mientras que a principios de septiembre, el proyecto competirá en el Festival de Cine de Milán. (Con información de Enrique Mendoza)
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