Drogadicción, padecimiento más detectado en jornadas de salud a migrantes

Durante la más reciente jornada de salud para atender a deportados e indigentes, el secretario de Salud del Estado, José Bustamante, indicó que el padecimiento más frecuente entre los atendidos en este tipo de jornadas, es la drogadicción. La mañana del 12 de agosto, se instalaron módulos de salud en el Parque Constitución, en la Zona Centro, para brindar atención a la población desalojada de la canalización y quienes acampan en el refugio temporal instalado por “Ángeles sin Fronteras”. Además de la aplicación de vacunas contra la tuberculosis y la difteria, en las revisiones médicas y dentales generales participaron representantes de centros de rehabilitación para promover sus servicios. Internos en tratamiento y directores de las asociaciones civiles, tomaban turnos en el megáfono para narrar sus historias de vida e invitar a los presentes a acudir con ellos. En 2012, la Secretaría de Salud destinó 14 millones de pesos para financiar los tratamientos de pacientes en 167 centros de rehabilitación de Baja California. A pesar que en cada jornada, realizada habitualmente dos veces al año, los centros ofrecen hasta 30 espacios disponibles -los pagados por el Estado -, en promedio, dos personas en situación de calle deciden iniciar el tratamiento. “La adicción trae otros problemas como la tuberculosis”, citó el doctor Bustamante. También, pueden ser transmitidos padecimientos como VIH, sífilis y hepatitis “B” y “C”. De ahí la preocupación de las autoridades de salud con los operativos realizados para desalojar a la población atendida en  el “Bordo”. “Necesitamos estar coordinadas las dependencias para evitar que se dispersen las epidemias”, refirió uno de los médicos. Aunque a decir del secretario de Salud, “esta jornada no se hace por lo que pasó en el canal”, reconoció que la fecha fue adelantada “porque no queremos que (los migrantes) se nos dispersen y se pierdan”. Las decenas de hombres y mujeres atendidos partían del parque con una bolsa de plástico que contenía desde jeringas, condones, desparasitantes, sueros y vendas, hasta jabón. Además de pruebas de detección rápida de VIH y tuberculosis, se dio atención al control de diabetes e hipertensión, y se llevaron a cabo afiliaciones al Seguro Popular.