Carson, California. Para Jhonny González todo salió acorde al plan. Un triunfo contundente en contra de los pronósticos y regresar a casa con el cinturón que antes le perteneció. Fue especialmente dulce para él porque Golden Boy ya hacía planes a futuro para Abner Mares, quien se había posicionado como uno de los mejores libra por libra. La manera en que cayó el ex campeón invicto sorprendió a propios y extraños. Abner perdió en calidad de local. “Esto no se acaba, es un pequeño tropiezo, te lo digo por experiencia”, consoló González a Mares. Y vaya que sabe de lo que habla. Después de cuatro defensas exitosas del cinturón pluma del Consejo Mundial de Boxeo (CMB), González seguía sin proyección mediática. Tuvo la oportunidad de compartir cartel con Saúl “Canelo” Álvarez en Las Vegas mientras defendía su cetro ante Daniel Ponce de León. Pasó por alto una costilla fracturada y problemas personales, pues la oportunidad de proyección era inmejorable. Una serie de cabezazos obligaron la decisión técnica que favoreció a Ponce de León. Jhonny parecía estar acabado y fue presentado a este combate como un escalón más en la carrera de Abner Mares. “Nadie creía en mí, teníamos todo en contra, en el camerino nos pusieron mil pretextos del vendaje, pero no nos sacaron de concentración”, comentó el campeón. Fue en realidad un golpe, volado de izquierda, que desplomó a Mares. Se levantó sobre piernas tambaleantes y el hidalguense radicado en el Distrito Federal completó la faena. “La forma en que lo agarré y vi cómo cayó lastimado, desde ahí me di cuenta que la pelea se había terminado, era cuestión de abrumarlo para que se terminara”, relató. González sabía que tenía una ventaja, el aspecto mental. No solo por dejar atrás problemas ajenos al cuadrilátero, sino por el encaramiento previo con Mares. “Desde que lo vi en la conferencia de prensa, dije, ‘ya gané el primer round’, la forma como lo vi, como me vio, no lo veía confiado, él sabía que yo venía bien preparado. Uno como boxeador aprende a estudiar a su rival antes de subir al ring, yo lo noté temeroso, no con esa confianza como anteriormente se había visto, desde ahí uno se da cuenta cómo viene el rival, y eso me motivó a tener más confianza y seguridad de que iba a ganar esta pelea”, aseguró. De manera caballerosa y como buen ex compañero de gimnasio, Mares tomó la derrota con serenidad. “Me da mucho gusto que un amigo se quede con el cinturón”, expresó. Ahora tiene que reconstruir el camino después de un descanso para asimilar lo que sucedió y escalar desde abajo. “Me prendió muy rápido, supo terminar como un gran campeón que es, hay Abner Mares para mucho tiempo y le deseo lo mejor a Jhonny. Tienes que aprender a ganar y perder. No estoy en esto para tener un récord invicto, sino para pelear contra los mejores”, apuntó el oriundo de Jalisco. Mares se convirtió en el cuarto peleador en ascenso de Golden Boy Promotions en ser derrotado contra un boxeador ajeno a la empresa. Marco Antonio Peribán perdió por la vía de las tarjetas ante Sakio Bika. Jorge “Niño de Oro” Linares acababa de firmar con la promotora como campeón y fue destronado en Japón por Juan Carlos Salgado. Después, Antonio De Marco lo noqueó mientras disputaban el cetro ligero vacante del CMB. Víctor Ortiz debutaba como estelar cuando Marcos Maidana lo sorprendió con nocaut en Los Ángeles. Sacude al Vikingo Leo “Terremoto” Santa Cruz destronó a Víctor “Vikingo” Terrazas de manera aparatosa en solo tres rounds, para agenciarse el fajín súper gallo del CMB. El californiano con raíces mexicanas mostró más poderío que el fajador Terrazas, dejó al rival con el ojo derecho cerrado desde el segundo asalto y lo mandó a la lona en dos ocasiones para finalizar el combate. Primero lo sacudió con un zurdazo a la quijada y luego terminó por abrumarlo con golpeo al cuerpo, simplemente fue demasiado castigo para Terrazas. “Lo empecé a agarrar con upper y volado, cuando vi que no podía con la presión, me dije que lo iba a terminar para irme a casa temprano”, explicó. El “Terremoto” se coronó campeón por segunda vez en su carrera en el mismo escenario, pero no planea durar mucho tiempo en peso súper gallo. “Estoy para el que sea, si me dicen que peleo en un mes o dos meses, yo voy. Quiero hacer una o dos defensas antes de subir a 126 libras”, apuntó. Mares-González en números JHONNY 55-8, 47 KO 8 nocauts en el primer round 17 golpes conectados 9 golpes en la embestida final para acabar el combate 2 veces campeón del mundo 2:55 tiempo oficial de la detención 9-4 récord en peleas de campeonato ABNER 26-1-1, 14 KO 8 golpes conectados 3 derribes en su carrera, dos a manos de González 3 divisiones de peso en dos años 1 derrota como profesional 0 defensas del cetro pluma 6-1-1 récord en peleas de campeonato
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