Jóvenes que laboraban como empacadores voluntarios en tiendas Aurrerá y Walmart de Tijuana, fueron despedidos para dar “empleo” a personas de la tercera edad; medida fue tomada por los mercados de autoservicio desde el 16 de julio de 2013. Madres de familia se quejaron por la disposición tomada por la empresa, pues el recurso que obtenían los jóvenes en base a las propinas que los clientes otorgaban, era invertido en sus propios estudios. “Según el pretexto que recibió mi hijo fue que Enrique Peña Nieto, nuestro Presidente de la República, había dado la orden; con esa respuesta despidieron a aproximadamente 25 jóvenes que laboraban voluntariamente a cambio de propinas”, expuso una progenitora. En Tijuana, cinco tiendas de la firma de supermercados que daban trabajo a jóvenes estudiantes de bajos recursos, pero con excelentes calificaciones, siendo ése uno de los requisitos. Sin embargo, la compañía decidió que personas de la tercera edad formen parte de sus empacadores, como ocurre en la mayoría de los supermercados de la localidad y a nivel nacional. “Con esa medida, fueron bastantes los jóvenes que fueron dejados sin recursos para ayudarse con sus estudios. Por si fuera poco, antes de su despido, la empresa les dijo que les iba a dar una sorpresa, que consistía en un bono económico; a cambio les pidieron su boleta de calificaciones, pero fueron mentiras, no recibieron nada. Así que, sin más, un día llegaron a trabajar y les dieron las gracias, ahora se quedarán sin la posibilidad de luchar para sacar sus estudios, ya que por nuestra parte, no hemos podido cubrirlos, por lo precario de los salarios y la vida tan cara”, agregó la madre de familia, quien por último, recriminó que la empresa Walmart no haya consumado el contrato firmado con los jóvenes, que les garantizaba tener empleo hasta cumplir los 16 años de edad, siempre y cuando éstos tuvieran un promedio mínimo de 8 en sus estudios.
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