La consultora Ernst &Young aplicó su Doceava Encuesta Global de Fraude a mil 758 firmas en 48 países, incluyendo a México. Lamentablemente en nuestro país, los resultados arrojaron que 6 de cada 10 empresarios del ramo de servicios de consumo energético, construcción, manufactura, farmacéutica y servicios financieros, aceptan sobornar al gobierno para realizar sus operaciones. De hecho, según este estudio, la nación azteca es la que más corrupción presume en América Latina. En concreto las empresas de los sectores de la construcción, farmacéutico y energético, pierden hasta el 5 por ciento de sus ventas debido a estas prácticas, de acuerdo con la Asociación de Examinadores de Fraude. Ernst&Young explicó que los actos más comunes de corrupción, son el pago en efectivo y los obsequios para acordar negocios con alguna autoridad. Dichos egresos son disfrazados en contabilidad por medio de facturas falsas.