El Comité Ejecutivo Nacional del Sindicato Nacional de Trabajadores del Seguro Social (SNTSS), encabezado por el doctor Manuel Vallejo Barragán, recibió la solicitud formal: “Pedimos al Comité Ejecutivo Nacional del SNTSS, realice auditoría para dar con el paradero de los dineros que no fueron aplicados en los diferentes rubros, establecidos en nuestro contrato colectivo…”. Esta semana, los ocho trabajadores del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) que el 6 de junio de 2013 denunciaron penalmente a César Joaquín Gualajara Gallegos, delegado del SNTSS Sección VII de Baja California y San Luis Río Colorado, Sonora, pidieron formalmente la intervención de Vallejo como su dirigente nacional, y del doctor Ramón García Jiménez, presidente del Comité de Honor y Justicia del Sindicato. Con los mismo documentos – estados de cuenta de la delegación sindical y cuenta privada del secretario, del 1 de enero de 2012 a abril de 2013- presentados ante la Procuraduría General de la República, donde se acreditan los depósitos retiros y traslados de los dineros del sindicato a la cuenta del doctor Gualajara, es acusado ante el CEN de “… deficiente gestión administrativa, abuso de autoridad, usurpación de funciones, aprovechamiento de su posición para conseguir indebidas ventajas personales; celebración de arreglos privados con el Instituto que perjudiquen a la colectividad; malversación de fondos y hasta fraude electoral”. De igual manera, aseguran que el médico y dirigente sindical no solo malversó el dinero de las cuotas sindicales. En el reclamo enviado por escrito y por paquetería a la Ciudad de México, los afectados refieren que Gualajara tampoco entregó a los trabajadores el dinero que llega como parte de un clausulado del contrato colectivo, que son las cláusulas para juguetes, eventos culturales, eventos deportivos y las becas Sinabeth. Como ejemplo de estos recursos y clausulados adicionales, el Sindicato recibió conforme al contrato colectivo 2009- 2011, los siguientes recursos, distribuyéndolos en las siguientes secciones: Cláusula 77 bis. Reconocimiento a jubilados y pensionados. El 1 de octubre de cada año, el IMSS entrega al Sindicato 3 millones 600 mil pesos para festejos. Cláusula 78, Reconocimiento a Personal de Enfermería. El 1 de enero de cada año, el IMSS entrega al Sindicato 10 millones 800 mil pesos para festejos. Cláusula 80. Cada 13 de agosto, el IMSS entrega al Sindicato 7 millones 200 mil pesos para festejos. Cláusula 80 bis. El 5 de noviembre de cada año, el IMSS entrega al Sindicato 51 millones 840 mil pesos para repartir juguetes. De hecho, César Gualajara envió un comunicado interno a los trabajadores del IMSS, indicando que parte de las cuotas sindicales que se le reclaman, se han gastado en juguetes y becas; afirmación imprecisa de parte del líder sindical, ya que esos dos rubros o gastos están cubiertos por el clausulado, lo que significa que el sindicato y su sección, recibieron dinero adicional para cubrirlos y las cuotas no tienen nada que ver. Como parte de sus acciones de defensa, además de la carta enviada a los trabajadores, Gualajara también decidió presionar a quienes lo denunciaron, y solicitó el apoyo del IMSS como empresa. A los ocho trabajadores que lo denunciaron ante la PGR y a quienes supone que los apoyan, les han suspendido, ilegalmente, sus derechos laborales. Les han prohibido: – Los pases de salida. “Y como no tienen justificación, esto se podría tipificar como secuestro”, acusan los afectados. – Préstamos. Los hospitales donde laboran los disidentes han recibido comunicados electrónicos y en papel, en los que se les pide o se les recuerda que tal empleado tiene los derechos sindicales suspendidos. “Pero los préstamos y los pases son derechos laborales, y como tal, irrenunciables, no pueden suspenderlos, porque además nos siguen descontando nuestras cuotas sindicales quincenal y rigurosamente”, argumentan los denunciantes. De hecho, extrañamente, Efraín Guevara Morales, del área de Recursos Humanos del IMSS en Tijuana, cambió de decisión en este tema porque en mayo de 2012, cuando el Sindicato pidió aplicar esta suspensión de derechos, se negó bajo el argumento de que “… los derechos de los trabajadores son irrenunciables, básicamente se refieren a las condiciones de trabajo que se conforman por sueldo, prestaciones y condiciones de trato generales. Por lo tanto, cuando el Sindicato habla de derechos sindicales, debe referirse a que no pueden ocupar ninguna representación ni votar para cargo alguno, y en su caso, podrían negarle alguna autorización donde ellos participan”. Así lo explicó en un correo electrónico dirigido a Martha Mora Galeana. Pero entre los meses de junio y julio de 2013, Guevara cambió de opinión, y a quienes denunciaron a Gualajara, les están negando permisos y préstamos, como si éstos fueran derechos sindicales. Situación ante la cual los trabajadores ya advirtieron, también se defenderán legalmente.