La mente es una herramienta muy importante , es nuestro puente entre el espíritu y el cuerpo físico al empezar a comprender que mi cuerpo y mi mente únicamente son herramientas de expresión de mi espíritu, o sea, nosotros no somos ni cuerpo ni mente, somos espíritus y nos valemos de esos dos medios para expresarnos en el plano material, entonces sin tener una verdadera cultura espiritual ando a la deriva y seré fácil víctima de las bajas pasiones, por eso es importante ubicarnos espiritualmente para comprender que debo tener sano mi cuerpo y mi mente para gozar de una verdadera salud espiritual. Para tener un cuerpo sano la respiración y la alimentación correctas son básicas y para una mente sana, no contaminarla con pensamientos chatarra, que como ya dijimos son toda clase de pensamientos negativos de cualquier tipo. El único mandamiento dice. Amarás a Dios por sobre todas las cosas y a tu prójimo como a ti mismo y si comprendemos a plenitud este único mandamiento, ya no serán necesarios los demás, como: no mentirás, no robarás, no matarás, etcétera. Entonces, es necesario practicar este único mandamiento y todo se simplificará. El día que yo decida ser una persona sana, útil y feliz y lo practique, inevitablemente voy a lograrlo. La eficacia de la oración está en la sinceridad del pensamiento no en la abundancia de palabras, así como dijo Jesús: No vengo a destruir la Ley sino a cumplirla; Gran Fraternidad también dice: No venimos a destruir la ley sino a cumplirla, la fraternidad espiritual no enseña nada contrario a lo que enseñó Cristo, pero explica en términos claros para todo el mundo lo que se dijo bajo al forma alegórica. Viene a cumplir en los tiempos predichos lo que Cristo anunció y a preparar el cumplimiento de las cosas futuras. Es, pues, obra de Cristo, que Él mismo preside como la regeneración que opera y prepara en el reino de Dios en la tierra como igualmente lo anunció. Ciencia y espiritualidad son las palancas de la inteligencia humana, una revela las leyes del mundo y la otra las del mundo moral, Cristo fue el iniciador de la más pura moral, la más sublime de la moral evangélica espiritual que debe renovar el mundo, reunir a los hombres y hacerlos hermanos; que debe hacer brotar de todos los corazones humanos la caridad y amor al prójimo y crear entre todos los hombres una solidaridad común, en fin, de una moral que debe transformar y hacer de la tierra una nueva morada para espíritus superiores. Es así queridos hermanas y hermanos que los invito a lograr la salud espiritual. Dios los bendice. Atentamente. Rafael Germán Elías Calles Guadalajara, Jalisco Teléf. 33 1362-51 34