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lunes, septiembre 30, 2024
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Impunidad para Caliente

No era un secreto y finalmente sucedió lo que ZETA había previsto. Errores garrafales en las averiguaciones previas iniciadas por casos de delincuencia organizada, siguen abriendo las puertas de la impunidad a criminales que no desaprovechan la bondad de fiscales y jueces que, en ese perverso juego de la “justicia”, optan por exonerar a quienes en un principio inculparon. Esta vez, el turno fue para Jerónimo Javier Vera Ayala, hijo de Antonio Vera Palestina, asesino del periodista Héctor “El Gato” Félix. El gemelo de Jorge Mario y ahijado del político y empresario Jorge Hank Rhon, obtuvo su libertad del penal de máxima seguridad de Puente Grande, donde estaba preso por su probable responsabilidad en la comisión del delito de delincuencia organizada, con la finalidad de cometer delitos contra la salud. En ZETA informamos del amparo que el Tercer Tribunal Unitario de Jalisco concedió, así como de la confirmación que el Segundo Tribunal Colegiado en Materia Penal, hizo para ordenar la anulación del auto de formal prisión que existía contra Jerónimo. El auto que dio inicio al proceso penal, había sido dictado por el Juez Primero de Distrito en Materia de Procesos Penales Federales de Guadalajara, y ratificado por el Segundo Tribunal Unitario durante 2012. El fallo del amparo también ordenó que el impartidor de justicia de apelación, analizara bien las pruebas y dictara una nueva resolución, quedando a su libre arbitrio el sentido de la misma. Sin embargo, los magistrados del Colegiado dejaron claro que había múltiples vicios, desde la etapa de averiguación previa, con los dichos de testigos protegidos y en la resolución del término constitucional por parte del juez de origen. Entre los yerros encontrados en la averiguación previa PGR/SIEDO/UEITA/117/2011 y la causa penal, se señala la presunta pertenencia de Jerónimo Vera a la organización criminal Cártel Arellano Félix (CAF); sin embargo, testigos protegidos lo vincularon al grupo “Alto Impacto”, formado por escoltas de Hank Rhon y que, según su dicho, también realizaban acciones de delincuencia organizada, como homicidios, privaciones ilegales de la libertad y trasiego de droga. Los testigos protegidos o colaboradores, con claves “Angélica” (Pedro Ignacio Zazueta “El Pit”), “Guadalupe” (Luis Felipe Ramírez Vázquez “El Güero Camarón”) y “Carolina” (Carlos Fernando Vázquez Figueroa) pertenecieron, los dos primeros, en alguna época al CAF; el segundo formó parte del equipo de seguridad de Hank Rhon en Tijuana. Sus testimonios fueron recabados por la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (SEIDO), tras la irrupción de fuerzas militares en el Hipódromo Agua Caliente en junio de 2011, donde se descubrió un impresionante arsenal y se registró la detención del ex alcalde de Tijuana, a los días exonerado por esos hechos. Entre los testimonios había desde quienes señalaron que los sicarios del cártel arellanista permitían el libre tránsito a los escoltas del político, a quienes conocían como “el de los perros”, hasta quienes aseguran que en la gestión de Hank como presidente municipal de Tijuana se brindaron facilidades a sicarios para no detenerlos y realizar “levantones”, traslado de armamento y otros ilícitos. Uno de los declarantes, quien militó en el CAF desde 2001, confesó que su trabajo consistía en transportar cargamentos de marihuana y cocaína a Estados Unidos, droga que era llevada de un lugar a otro, incluyendo las instalaciones del Hipódromo Agua Caliente, a donde acudió unas 15 veces a recoger estupefacientes. Este testigo, como otros más, señaló como importante conexión entre el CAF y el grupo “Alto Impacto” a Jorge Mario Vera Ayala, también ahijado y jefe de seguridad de Hank Rhon. Jorge realizaba reuniones en el Hotel Pueblo Amigo, donde se giraban las instrucciones para cometer homicidios presuntamente ordenados por el político. En dichas reuniones también era visto Jerónimo, quien asegundaba las decisiones de su hermano y participaba de la materialización de los hechos. Las actividades delictivas ocurrieron durante la gestión del referido personaje como alcalde y, posterior a ese ejercicio, cuando continuó la coordinación entre ambos grupos criminales para participar en la recepción, resguardo y transporte de droga en el Hipódromo, de acuerdo a las declaraciones de los colaboradores de la justicia. Una de las revelaciones la hizo Carlos Vázquez Figueroa, testigo con clave “Carolina”, a quien el 3 de junio de 2011 intentaron matar, pero los sicarios fueron detenidos por elementos del Ejército Mexicano. Versión confirmada por otro protegido, señaló que Jerónimo Vera Ayala fue quien les proporcionó las armas y prometió pagarles 10 mil dólares por la ejecución, presuntamente por el robo de un cargamento de droga a Jorge Hank. En otra declaración, un testigo aseguró que Jerónimo Javier “dice ser administrador del Grupo Caliente, pero tiene una relación cercana con un integrante del Cártel Arellano Félix”. Y en efecto, como parte de las pruebas ofrecidas por el gemelo, consta en el expediente un documento notarial, en el que el Club Tijuana Xoloitzcuintles de Caliente afirma que Vera Ayala laboró como gerente de operaciones del 12 de noviembre de 2003 al 3 de marzo de 2012, días antes de ser detenido en un centro comercial de Zapopan, Jalisco. Documento de dudosa procedencia, considerando que Club Xoloitzcuintles de Caliente no existió como tal hasta 2007. De hecho, a la constitución del club de futbol, Jorge Alberto Hank Inzunza, hijo del ex reo del penal de “El Hongo”, decía que los dueños del deportivo eran su padre y su padrino, que a él lo podían despedir cuando quisieran. Sin embargo, cuando el ingeniero fue detenido en junio de 2011, en un comunicado y para salvaguardar al equipo, declararon que el dueño no era el patriarca de los Hank en Tijuana, sino su hijo. El documento que los abogados presentaron para sustentar un modo honesto de vida de Jerónimo Vera Ayala, es por lo tanto de dudosa credibilidad, si se toma en cuenta la fecha de adquisición del equipo en el año 2007. Las declaraciones ubicaron a Jerónimo en los entornos criminales del grupo “Alto Impacto”, sin embargo, el Ministerio Público Federal lo ubicó también dentro de la estructura del Cártel Arellano Félix creando incertidumbre entre los impartidores de justicia, quienes ante la duda, prefieren exonerar al hijo de Antonio Vera Palestina. Un caso más de los del sexenio del ex Presidente Felipe Calderón que queda en la impunidad, de acuerdo a las valoraciones jurisdiccionales que ocurren en la actual administración de Enrique Peña Nieto. Luis Javier Algorri Franco, ex secretario de Seguridad Pública de Tijuana, en contra de quien existe una orden de aprehensión por el mismo caso y señalado de proteger al CAF, también recibió el amparo de la justicia de la unión, y está a unos días de ser confirmado en un Tribunal Colegiado de Baja California.

Autor(a)

Redacción Zeta
Redacción Zeta
Redacción de www.zetatijuana.com
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