Ayuntamiento le exige otorgue el perdón a cambio de atención médica

Por más de 25 años, Doña Conchita Ávila se ha dedicado a la venta de periódicos y revistas, es ampliamente conocida por el área del Hipódromo, pues desde hace más dos décadas, su puesto permanece sobre la avenida del mismo nombre. Escasas veces  ha faltado a su empleo, ni siquiera cuando atravesó la etapa más dolorosa del cáncer de mama que está por librar; alegre y platicadora, es recordada por sus clientes de antaño. El jueves 16 de mayo del año en curso, Doña Conchita salió de su puesto para ir a comprar comida a un supermercado cercano, su nuera Beatriz se quedó a cargo del estanquillo, pero al cruzar la Avenida Hipódromo, una pick-up propiedad del Ayuntamiento de Tijuana, conducida por Yves Omar Ruiz Flores, la arrolló, provocándole golpes en varias partes del cuerpo y una herida contusa en la cabeza. Han pasado 29 días del accidente y la voceadora no ha recibido atención médica, y menos aún, el gobierno de Carlos Bustamante se ha hecho responsable del daño. La señora de 67 años relató a ZETA que el día del accidente, el imprudente conductor  llamó a la aseguradora Qualitas, compañía que brinda el servicio al Ayuntamiento de Tijuana, pero de quienes no ha recibido hasta la fecha algún apoyo; de no ser porque cuenta con Seguro Social, la afectada hubiera quedado a la deriva. “Como tenía Seguro Social me llevaron a emergencias , me revisaron y cosieron la cabeza, me dieron alrededor de 18 puntadas, mientras mi hijo se fue a levantar la denuncia ante el Ministerio Público, donde fue tratado de una manera muy grosera”, dijo. La voceadora señaló que un agente de seguros y una persona del MP le exigieron firmara el perdón; a cambio la indemnizarían con mil 500 pesos y revisión médica. “Yo les dije que no quería dinero, que lo que quería era que me revisara un médico, porque aunque internamente no me pasó nada, no pudiera saber si tendría secuelas; pero de una manera prepotente me dijeron que firmara el perdón y luego me revisaban. Como lo rechacé, la denuncia sigue en pie”. Doña Conchita señaló que el miércoles 12 de junio fue recibida por la  síndico municipal Yolanda Enríquez quien le ofreció una “disculpa” por lo ocurrido. “Creen que con disculpas voy a curarme. Mi denuncia sigue en pie, porque no he recibido atención médica desde el 17 de mayo, me duelen algunos golpes en el cuerpo, me siento mareada, la cabeza me sigue supurando. No voy a hablar bien del Ayuntamiento hasta que reciba el apoyo médico;  aunque también he tenido pérdidas en mi ingreso por todos los días de trabajo que he perdido”, mencionó Doña Conchita, quien el mismo día que habló con la funcionaria municipal, rechazó la “oferta” de la compañía de seguros por 6 mil pesos. “Yo no estoy de oferta, si no soy mercancía, un mueble; tengo dignidad, soy humano y quiero que el Ayuntamiento responda  por el daño que me hizo un empleado”, enfatizó la voceadora, quien ahora goza de un nuevo puesto de periódicos donado por Farmacias Roma. Por su parte, la compañía de seguros Qualitas negó a ZETA el ofrecimiento monetario a Doña Conchita y atención médica a cambio de que se firme el perdón, asegurando que están en la mejor disposición de canalizar a la paciente a alguno de los hospitales con los que la aseguradora tiene convenio. “Nosotros no podemos dar dinero, al contrario, queremos canalizarla con algún médico para que la valore y tome su tratamiento. Las puertas de la empresa están abiertas”, dijo el director de la aseguradora.