Algarabía, fiesta y diversión para los seleccionados; tristeza, rabia y frustración para los no favorecidos, al igual que la representación teatral de la comedia y la tragedia, así se observa el inicio del proceso de selección de candidatos; una mascarada o fiesta de disfraces. Para muchos aspirantes el proceso electoral 2013 en Baja California, se inició después de las elecciones federales del 2012. Casi simultáneamente se iniciaron los preparativos del Carnaval de Ensenada “Festejemos México 2013”, que acaba de concluir después de elegir a sus “majestades” los reyes del Carnaval en un proceso de selección donde “poderoso don dinero” los llevó al trono. Mucho antes de que los partidos políticos lanzaran sus respectivas convocatorias, los “suspirantes” a la gubernatura del Estado, ya habían acaparado las enormes carteleras de anuncios para estampar su enorme fotografía y mensaje subliminal que enfocara su vehemente aspiración y derroche de recursos para costear sus propias campañas “llenando de basura a la ciudad entera”. Óscar Vega Marín por el PAN y Fernando Castro Trenti por el PRI, los más ostentosos. Mientras esto se observaba en el Estado, los dirigentes nacionales de los partidos políticos participantes, después de darse hasta con la cubeta en el proceso federal, “los sentaron” para firmar “El Pacto por México” y luego amarrar las alianzas sin consultar a las bases, ni a los suspirantes, dejando de lado sus ideologías, sus convicciones, su origen, todo en aras de su propia sobrevivencia, violentando sus estatutos y traicionando sus conciencias ¡firmaron las alianzas! Y empezaron a cavar sus tumbas, se fusionaron los reaccionarios con los revolucionarios, los otrora de izquierda se aliaron con sus enemigos de la ultraderecha y se convirtieron en comparsa en un proceso carnavalesco en un “¡fuera máscaras!” pan-prd-panal (con minúsculas) “nacidos para perder”. Quienes se frotan las manos y “gritan de contentos” son los del panal, muy agradecidos con el primer panista del estado el “no meteré las manos”….esta vez, por ser el principal impulsor de las alianzas y responsable único de las derrotas sufridas por su partido, precisamente por “meter las manos”, le debe aterrar la idea de entregar la gubernatura al PRI, por eso les envió la “Osuna-señal”. Por los rumbos del PRI también hay alianzas y barruntos divisionistas por la supuesta imposición de Fernando Castro Trenti, dejando en el camino a otros “disciplinados” aspirantes que se retiraron de la contienda, solo uno que declaró ¡no me rajo! Parece dispuesto a continuar en la disputa, el Ing. Jorge Hank Rhon, “por el bien de todos” más les vale a los priistas permitir la libre participación en la elección interna y que sean los delegados quienes decidan y no el CEN del PRI. Juan Ríos Pérez Tijuana, B.C.
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