Raúl Pompa Victoria ya estaba en Mexicali el miércoles 23 de enero. Desde temprano agarró carretera desde Tijuana para presenciar los actos del PRI a propósito de la visita de su líder nacional, César Camacho Quiroz. Pero una repentina llamada telefónica lo hizo regresar a su ciudad de residencia. El interlocutor fue Emilio Chuayffet Chemor, Secretario de Educación y quien conoce a Pompa porque ambos fueron diputados federales en la misma legislatura. La petición, dicen quienes estaban cerca del tijuanense cuando la llamada sucedió, fue que debía salir a la Ciudad de México, pues la delegación de la Secretaría de Educación Pública en Baja California podría ser su nueva encomienda. Y presto, don Raúl se olvidó de Camacho y se concentró en Chuayffet. Lo dicho, donde manda chamba no gobierna dirigente.