César Mariano González Castro de 31 años y Miriam Elena Uriarte Delgado de 29, fueron las dos personas que tras una explosión en su casa dejaron más de millón y medio de dólares –extraoficialmente se dice que eran dos– en el fraccionamiento El Lago de Tijuana. Los dos murieron, con días de diferencia, a causa de las quemaduras en su cuerpo. Eran los únicos detenidos para la investigación sobre el origen del dinero ilícito. Hombre y mujer fueron tratados en el Hospital General, él falleció el domingo y el estado de ella se agravó. Sin una unidad para quemados, los médicos del General creyeron conveniente trasladar a Miriam Uriarte al Hospital Ángeles, pero debido a que era un caso médico legal y en el nosocomio privado se encontraba internada la hija del gobernador del estado, Dania Osuna, los galenos no lo creyeron conveniente, por la movilización policiaca que se generaría. Otra razón para el no traslado: el sector salud no tiene un vehículo equipado con ventilación para la trasferencia de pacientes quemados.