Estacionamientos públicos, caros e inseguros

Con la excusa de que la Ley de Edificaciones del Gobierno del Estado, así como el Reglamento de Construcciones del Ayuntamiento de Tijuana son ambiguos, dependencias municipales, estatales e instancias federales carecen de un estacionamiento público gratuito para que el ciudadano resguarde su automóvil mientras realiza un trámite. Aprovechando los oscuros de los reglamentos, las instancias gubernamentales sacan ventaja y lucran con estacionamientos  privados que cobran entre 10 y 100 pesos; ya sea por hora, día o evento. De acuerdo al ex presidente del Colegio de Ingenieros, Filiberto Enríquez, cualquier instancia pública o privada debe seguir las normas y cumplir con los requisitos que le son solicitados a cualquier empresa que desea aperturar un negocio en la ciudad. Las autoridades gubernamentales no deben ser la excepción. “Cuando un comercio pretende arrancar, la Ley le exige que por tantos metros cuadros debe tener ciertos cajones de estacionamiento, y estas mismas normas y requisitos deben ser acatados por las instancias de gobierno que tienen mucha demanda de ciudadanía, por lo que deben de ofrecer  un espacio digno. Pero vemos que no lo hacen, al contrario, concesionan los espacios a empresas particulares”, señaló. Por su parte, el secretario de Desarrollo Urbano, David Navarro Herrera, mencionó que las instancias públicas no están obligadas a brindar un estacionamiento gratuito al ciudadano, aunado a que el Ayuntamiento de Tijuana no cuenta con un argumento jurídico para exigir que así sea. “Lo que sí se exige a las empresas o dependencias es que, dependiendo de los metros de construcción, debe haber un cierto número de cajones, pero de que sean gratuitos pues ya no nos corresponde, muchas veces los vuelven privados únicamente porque ponen una caseta de control con el argumento que es por seguridad”, estableció el arquitecto, para complementar que la mayoría de las personas acepta el cobro de estacionamiento por no dejar sus vehículos estacionados en calles aledañas. “Lo que tienen que hacer los regidores, decir si es obligatorio que las dependencias cobren o no. Mucha gente está a favor de que le cuiden su carro, porque les da más certeza, pero hay quienes dos pesos los pelean”. El funcionario recalcó la ambigüedad en el Reglamento del Ayuntamiento, al no haber regulación para el cobro de tarifa en los estacionamientos. “El cobro es libre comercio, no está regulado; hay algunos estacionamientos que son muy abusivos y cobran de entrada una tarifa muy alta, y no hay certeza con tu vehículo”, opinó. Las principales quejas sobre estacionamientos públicos ante la Procuraduría Federal del Consumidor, son por no tener la tarifa a la vista, seguro contra robo y daños, e irregularidades en el reloj checador.   “PROFECO no regula precios, pero sí verifica que el negocio brinde el mejor servicio, y constantemente hay supervisiones en los estacionamientos públicos y privados”, argumentó un empleado de la dependencia federal. Mientras no haya una regulación sobre los estacionamientos públicos, los más perjudicados son los ciudadanos, pues los primeros hacen su agosto con cada usuario que ingresa a sus instalaciones.