Haber sido el Presidente de la Comisión Permanente del Congreso de la Unión, le causó un grave daño político a Óscar Arce Paniagua. El panista se quedó en el cargo y actúa en consecuencia. Dice a quienes después de regalarles una Constitución Mexicana le quieren seguir escuchando, que lo que Baja California necesita es un gobernador de altos vuelos con conexiones nacionales e internacionales, y que esa persona es nada menos que él, dado que cuando presidió la Cámara, se hizo –literalmente eso dijo– amigo del Rey (de España), del Primer Ministro de Inglaterra, íntimo de la Procuradora Marisela Morales, y en paz con los priistas que entrarán a la Presidencia de la República en diciembre de este año. Lo perdimos, definitivamente.