De acuerdo con la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico, Alemania comenzará a sufrir una recesión en el segundo semestre de 2012. Concretamente, según su más reciente informe, la OCDE estima que el PIB alemán se contraerá el 0.1 por ciento en el tercer trimestre de 2012 y 0.2 por ciento durante el último trimestre. El dato es preocupante porque se sabe que la Eurozona en parte depende de la estabilidad financiera de Alemania y Francia. La OCDE también recalcó que “la economía global registra una desaceleración, dado que importantes economías de Europa están al margen de la recesión”.