Ésta es la historia de una despampanante rubia que volaba en un pequeño avión de dos pasajeros, sentada junto al piloto. Éste tiene un ataque al corazón y muere. La rubia toma el radio y lanza una llamada de auxilio: — ¡May Day! ¡May Day! ¡Ayúdenme, ayúdenme! ¡El piloto tuvo un ataque al corazón, está muerto y yo no sé volar! ¡Por favor, ayúdenme! Enseguida escucha una calmada voz en el radio: “Éste es el Controlador de Tráfico Aéreo, la escucho fuerte y claro. Yo la guiaré a través de esto y le ayudaré a regresar a tierra. Tengo ya mucha experiencia en este tipo de problemas, ahora, respire profundo… todo estará bien… solo necesito que me dé su altura y posición. Acomodándose su frondosa cabellera, la rubia dama replica: — Mido 1.72 centímetros y estoy sentada… Luego de una breve pausa, se escucha de nuevo la voz en el radio: “Oookeeey… Repita después de mí: Padre Nuestro que estás en el Cielo…”. Autor: Una morenaza bien ardilla.
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