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miércoles, octubre 2, 2024
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Más producción en México, más decomisos en la frontera

En garitas de Sonora los decomisos del CBP Hombres sexagenarios, menores de edad, jóvenes californianas y familias mexicanas, la mayoría en vehículos, con visa y documentos vigentes para cruzar la frontera hacia Estados Unidos; algunos incluso con permiso Sentri, todos traficantes de drogas. De octubre de 2011 a junio del presente año, oficiales de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés) del sector San Diego han decomisado 66.2 toneladas de droga, entre marihuana, cocaína, metanfetaminas y heroína. En el estado colindante de Arizona, tan solo del 23 de julio al 5 de agosto de 2012 se han decomisado 948.5 kilogramos de distintas drogas en las garitas. Entre junio y julio, más de seis toneladas retiradas de las manos de narcotraficantes. A pesar de que la tarea fundamental del CBP es impedir la entrada de terroristas e inmigrantes indocumentados, gran parte de su esfuerzo y trabajo lo dedican a detectar el ingreso ilegal de narcóticos a su país. Actualmente hay 21 mil oficiales de Aduanas y Protección Fronteriza, algunos de estos agentes -la mayoría de quienes trabajan en las garitas- pueden alcanzar salarios y beneficios que ascienden a 180 mil dólares al año, según estimaciones de la Coalición de la Frontera Inteligente. Por su parte, entre el 1 de octubre de 2011 y el 30 de junio de 2012, oficiales de la Patrulla Fronteriza decomisaron 18 toneladas de narcóticos en el sector San Diego, y en El Centro (Valle Imperial y Calexico), alrededor de seis toneladas. En todos los casos, la marihuana ocupa el primer lugar en cantidades, y representa para el CBP el 89 por ciento de los decomisos realizados. Muy por debajo se encuentra el retiro de heroína, con un 0.5 por ciento. Los esfuerzos por impedir el ingreso El plan estratégico 2012-2016 de la Patrulla Fronteriza tiene como meta principal “asegurar las fronteras de Estados Unidos”, dentro de ésta, el punto número tres es descrito como “interrumpir y degradar las Organizaciones Criminales Transnacionales”, término que se le da a los cárteles de la droga, uno de los principales enemigos del gobierno estadounidense, y también uno de los más difíciles de combatir, siempre presente en los reportes presentados ante el Congreso para justificar los presupuestos destinados. En 2012, el presupuesto de CBP es de 11.84 billones de dólares. A pesar del aumento de trasiego de narcóticos vía marítima, las garitas y zonas vigiladas por la Patrulla Fronteriza continúan siendo los principales medios de tráfico de droga, por lo que el gobierno estadounidense tiene clara la importante tarea de los agentes por detener el ingreso de droga a su país. En un día promedio, CBP decomisa más de cinco toneladas de drogas en garitas, aeropuertos y puertos de todo el país. Por supuesto, el principal punto de entrada de cocaína, heroína, marihuana y metanfetaminas es la frontera con México. Entre 2009 y 2011, el Departamento de Seguridad Nacional confiscó en la frontera con México, 41 por ciento más droga que en el ciclo fiscal 2006-2008, resultados que demuestran la efectividad de los programas, estrategias y agentes de esa demarcación. Para la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA, por sus siglas en inglés), es un indicativo de la mayor producción de droga en México que intenta cruzar la línea fronteriza para su venta en el norte. Según información disponible en su portal de internet, el Departamento de Seguridad Nacional describe así la tarea de la Oficina de Coordinación de Inteligencia y Operaciones: “… monitorear, analizar y producir reportes sobres las tácticas de trasiego de droga, así como sus técnicas y procedimientos”. También explica la amplia variedad en tecnología de inspección no intrusiva, por ejemplo, las máquinas de Rayos X y Rayos Gamma para vehículos y personas. Algunos de los exámenes practicados son de manera aleatoria a quienes intentan cruzar la frontera, con la intención de ubicar a aquellos que sin contar con antecedentes penales o un perfil sospechoso delictivo, pudiesen intentar el ingreso ilegal de narcóticos. Además de esto, por medio de videoconferencias semanales, autoridades de CBP se comunican con agencias federales, estatales y locales, e instancias mexicanas para compartir información que les permita “atacar el problema de tráfico de droga en la frontera sur para así combatir amenazas trasnacionales”. La preocupación norteamericana por la permeabilidad de sus fronteras se ilustra en el informe titulado Explorando las Siempre Evolutivas Tácticas de los Cárteles de Droga para Penetrar la Frontera y los Esfuerzos del Gobierno Federal para Detenerlos, publicado en 2011, en el cual un representante de CBP explica que los corredores de Arizona son la principal vía de acceso para drogas hacia Estados Unidos. “Un ejemplo de nuestros esfuerzos colaborativos a lo largo de la frontera sur es la Alianza para Combatir Amenazas Transnacionales en Arizona (ACTT, por sus siglas en inglés), establecida en 2009, la cual fortalece la capacidad y recursos de más de 70 agencias locales, estatales y federales”. Hasta 2011, la ACTT logró el decomiso de más de 725 toneladas de marihuana, cerca de dos toneladas de cocaína y 453 kilogramos de metanfetaminas. Por su parte, la Patrulla Fronteriza, que si bien, opera bajo el marco de actividades de CBP, está encargada de detectar los ingresos de drogas fuera de las garitas y de ubicar retenes en puntos clave en carreteras. En diciembre del año pasado, la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza anunció que el incremento en el decomiso de drogas y el decremento de ilegales aprehendidos tenían la misma causa: una frontera más segura gracias a los aumentos de recursos y la contratación de mayor personal. En el mismo año, la CBP agregó 866 agentes de la Patrulla Fronteriza, la gran mayoría trabajan en la frontera con México, precisamente en un esfuerzo para amedrentar el tráfico humano y el trasiego ilícito de drogas, armas y dinero en efectivo. De acuerdo a las políticas de la CBP, los especialistas paralegales son los encargados de expedir las formas de destrucción de las drogas después de 60 días del decomiso realizado, dependiendo del peso. Una vez que se consigna la orden, el tiempo máximo para que se destruya la mercancía es de 30 días. En un reporte entregado en 2011, el Departamento de Seguridad Nacional confesó que la CBP no cumplió con los tiempos establecidos, debido a las múltiples vacantes de personal. En sandías, sillas de ruedas y garrafones A partir de comunicados enviados por la CBP en Arizona, de abril a agosto se documentaron 33 casos individuales de decomisos; 25 de estos trasiegos se descubrieron gracias al trabajo de las unidades caninas entrenadas. Los resultados, 49 kilogramos de metanfetaminas, 48 de heroína, 152 de cocaína, 2.7 toneladas de marihuana. Solamente tres personas, de las 34 arrestadas, intentaron ingresar a los Estados Unidos por la vía peatonal. En el resto de los casos, los individuos conducían en su mayoría pick-ups Ford, camionetas Chevrolet y vehículos tipo sedán, Nissan y Pontiac. Veintisiete fueron hombres, la mayoría alrededor de los 30 años; 19 de ellos identificados como ciudadanos mexicanos. Precisamente un ciudadano mexicano de 30 años intentó cruzar 17 kilogramos de metanfetaminas con valor de 600 mil 500 dólares. Viajaba en una camioneta Ford, y a pesar de que lo acompañaban su esposa e hijo pequeño – un perfil no común para traficantes-, fue un agente canino el que olfateó la droga escondida. En general, casi todos los paquetes fueron encontrados en compartimentos de vehículos, hubo quienes introdujeron 2.2 toneladas de marihuana en un cargamento de sandías o 3.2 kilogramos de cocaína en el asiento de una silla de ruedas. También se identificó a tres jóvenes, en sus veintes, en dos casos por separado, intentando introducir a territorio norteamericano casi 16 kilogramos de cocaína líquida. Las tres féminas vivían en Silicon Valley, California, sitio donde se ha vuelto una droga muy común. Entre las mujeres arrestadas destaca una joven de 15 años, residente de Arizona, quien tenía en su posesión paquetes de heroína con valor de 10 mil dólares. El reporte oficial, proporcionado por la CBP de Arizona, registra de junio a julio de este año decomisos por 2.5 toneladas de marihuana, 100 kilogramos de cocaína, 50 de metanfetaminas y 18 de heroína. En comparación al mismo periodo en 2011, los decomisos de marihuana, cocaína y metanfetaminas disminuyeron en 21, 58 y 18 por ciento; mientras que en el caso de la heroína, aumentó en un 39 por ciento. Específicamente, entre el 23 de julio y el 5 de agosto, el retiro de marihuana, cocaína y heroína disminuyó en un 12, 70 y 5 por ciento, respectivamente; pero fue el decomiso de metanfetaminas el que aumentó en un 107 por ciento respecto al año anterior. Entre los casos específicos de California, en febrero, alrededor de 175 kilogramos de marihuana fueron encontrados dentro de barreras de concreto transportadas por un ciudadano mexicano, cuando intentaba cruzar por la Garita de Otay. El valor estimado del decomiso se posicionó en 230 mil dólares. Asimismo, del 20 al 22 de julio, oficiales de la CBP decomisaron más de 430 kilogramos de narcóticos en las garitas de California, con valor aproximado en el mercado negro de 1.74 millones de dólares. La droga fue escondida en paquetes colocados dentro de tableros, tanques de gasolina, compartimentos secretos, llantas de repuesto y hasta debajo del piso de vehículos. “Sabemos que los traficantes intentarán esconder narcóticos en cualquier lugar que creen oculto y que es inaccesible” declaró Chris Maston, director de Operaciones de Campo de la CBP. Recientemente, el 1 de agosto, agentes de la Patrulla Fronteriza realizaron dos decomisos de más de 50 kilogramos de metanfetaminas y anfetaminas, con valor de 2.1 millones de dólares. En un puesto de control de la Carretera Interestatal 5, un ciudadano estadounidense a bordo de una camioneta Chevrolet fue encontrado con cinco garrafones que contenían metanfetamina líquida, 24 kilogramos aproximadamente, y un valor estimado en 952 mil dólares. Mientras que en la Garita de San Ysidro fueron localizados 25 kilogramos de metanfetaminas ocultos en los paneles de un vehículo Suzuki, con valor de un millón 157 mil dólares. De octubre a junio, la CBP del área de San Diego, que incluye las garitas de San Ysidro, Otay Mesa, Tecate, Calexico y Andrade, así como los puertos marítimos y aeropuertos del área, realizó 2 mil 400 decomisos, de los cuales mil 408 fueron de marihuana, 597 de metanfetaminas, 270 de cocaína y 128 de heroína. Las cantidades recogidas fueron 59 toneladas de marihuana, 3 de cocaína, 3 de metanfetaminas y 376 kilogramos de heroína. Las estadísticas demuestran el aumento de decomisos año tras año, de 2010 a  2011, se captaron seis toneladas más. A pesar de que las cantidades de marihuana no registraron un significativo crecimiento proporcional -de 74 a 77 toneladas-, las cantidades confiscadas de heroína aumentaron casi el doble, de 258 kilogramos a 460. En el ciclo fiscal 2010, 81 toneladas fueron decomisadas, con 3 mil 185 decomisos realizados. Una vez más, el principal tipo de droga confiscada fue la marihuana, con 74 toneladas. En el ciclo fiscal 2011 se decomisaron 87.3 toneladas de narcóticos, 77 de marihuana, 6 de cocaína, 3 de metanfetaminas y 460 kilogramos de heroína. Un total de 3 mil 569 decomisos permitieron estos resultados. La Patrulla Fronteriza del área de San Diego tiene a su cargo 60 millas lineales, con seis estaciones de servicio, y en el ciclo fiscal 2010, logró incautar 10 toneladas de los principales narcóticos: marihuana, cocaína, heroína y metanfetaminas. Para el siguiente ciclo fiscal, la cantidad aumentó 9 toneladas, sin embargo, en el actual periodo apenas se han incautado 18 toneladas, con resultados muy parecidos a 2010. Por su parte, la Patrulla Fronteriza del sector El Centro vio un importante incremento de 2010 a 2011 en los decomisos de drogas. De incautar alrededor de 5 toneladas en 2010, en 2011 registró 23 toneladas, de las cuales más de 17 corresponden a marihuana. En lo que va del ciclo fiscal 2012, los números tienen una tendencia a la baja, ya que hasta el momento se han logrado retirar 6 toneladas de narcóticos, tan sólo el 26 por ciento de lo registrado el ciclo anterior, a tres meses de que concluya el periodo. En entrevista con ZETA, Pete Flores, agente de la CBP en San Diego, explicó que la mayoría de los detenidos en las garitas de esa área son ciudadanos mexicanos, con documentos legales para el cruce, y casi todos utilizan vehículos para transportar la droga. “Todos los días hacemos decomisos, las cantidades varían, pero es una tarea diaria”, aseguró el agente, quien confesó que cada día, los traficantes se vuelven más creativos en las técnicas para esconder los narcóticos. A pesar de que la CBP utiliza tecnología de alta punta para la detección de estas actividades, como el sistema autónomo de imagen móvil, diseñado para inspeccionar los vehículos de manera más rápida y flexible, que produce una imagen con un ámbito de aplicación térmica, los caninos que acompañan a los policías en los recorridos por los vehículos, continúan siendo el principal medio para realizar decomisos. “Mientras que los perros suelen tener la mayor parte del crédito por un hallazgo (de droga), en realidad es un esfuerzo de equipo. Un buen perro también necesita un controlador bueno para dirigir la búsqueda e interpretar la reacción de los perros a los olores entrenados”, destacó Blanca Guerra, portavoz de la Patrulla Fronteriza. La mira en Arizona A partir de los comunicados enviados por la CBP de Arizona, desde abril hasta julio, los cárteles de la droga han perdido más de 9 millones de dólares, monto aproximado de los principales decomisos realizados en cuatro meses. Para el ciclo fiscal 2012, la CBP solicitó 242 millones de dólares para el programa Nueva Tecnología para la Frontera Suroeste, con la intención de distribuir tecnología de vigilancia en los sectores claves de los limítrofes con México. Gran parte del equipo adquirido se distribuyó en las cinco estaciones principales en Arizona. Según la DEA, en Arizona se decomisaron 300 kilogramos de heroína, 2.8 toneladas de cocaína y 1.5 toneladas de metanfetaminas en 2011; mientras que en 2010 las cantidades fueron, respectivamente, 198 kilogramos, 2.4 toneladas y 710 kilogramos. Las drogas sintéticas como las metanfetaminas representan el principal incremento. A decir de Ramona Sánchez, portavoz de la DEA en Arizona, las drogas sintéticas como las metanfetaminas representan el principal incremento. Asimismo, precisó que la principal teoría sostenida por la agencia se relaciona con los recientes descubrimientos de laboratorio y químicos utilizados para la manufacturación de esa droga en Sinaloa. Respecto a los decomisos de heroína y cocaína, comentó que México es el segundo productor de opio a nivel mundial, solo por debajo de Afganistán. La portavoz aseguró que la facilidad de cosechar opio en nuestro país es una ventaja para el Cártel de Sinaloa, ya que le permite ampliar su producción de la planta de opio en México, y no solamente dedicarse a la producción de marihuana. Entre otros detalles, dio a conocer que el aumento de demanda de heroína es debido a que en la Costa Este de Estados Unidos, se ha vuelto una favorita del mercado. Es así como Arizona se ha convertido en una bodega para los cárteles mexicanos, ya que se ha detectado que ciudades como Tucson y Phoenix reciben la droga desde México para de ahí transportarla a otros estados de Unión Americana. De acuerdo a la agente, un kilogramo de heroína puede alcanzar un valor de 28 mil o 30 mil dólares en Arizona, mientras que en otros estados aumenta más del doble. Según información proporcionada por la Patrulla Fronteriza, en el primer semestre de 2012 el número de ataques de los cárteles mexicanos contra sus agentes aumentó en la zona de Río Grande, Texas, así como en Arizona, California y Nuevo México, rutas clave para el trasiego. Datos oficiales del Departamento de Seguridad Nacional registran que entre 2008 y 2010 hubo un promedio de mil 077 agresiones a agentes de Aduanas y Migración. Las autoridades estadounidenses interpretan este golpe como una respuesta de los narcotraficantes para evitar que sus cargamentos de droga sean interceptados en las garitas, ya que las pérdidas que estos tropiezos representan en la llegada de la droga a los consumidores estadounidenses, ascienden a millones de dólares.

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Redacción Zeta
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Redacción de www.zetatijuana.com
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