Más de 18 millones de pesos en un año para aviones, pasajes y comidas fuera de BC Para mantener la Cámara de Diputados de Baja California, se necesitan muchos millones de pesos y 25 representantes. Claro, y un mundo de colaboradores, secretarios, ayudantes y demás empleados de confianza. El presupuesto 2012 para el Poder Legislativo, algo así como 511 millones 739 mil 912 pesos, incluyendo el gordo para los viajes que diputados y sus respectivos acompañantes, realizan a lo largo del año. En 2011 se asignaron 18 millones 235 mil 522 pesos para pagar los “servicios de traslado y viáticos” en el Congreso local, mayoritario por legisladores del Partido Revolucionario Institucional (PRI) desde 2010. El año pasado, el Poder Legislativo contó con una cifra superior a 411 millones 700 mil de pesos. Los más de 18 millones de pesos con los que contó el Poder Legislativo de Baja California únicamente para viajar en 2011, son casi la mitad de lo que gastó una Secretaría de Estado en su operatividad, por ejemplo, la de Medio Ambiente, que apenas rebasó los 40 millones de pesos el año anterior. Pero vale la pena. Los diputados justifican sus viajes exponiendo el “motivo”: “Reuniones de trabajo”, así, a secas. Otros dicen que salieron del país a “capacitaciones”, “cursos”, “cumbre”, “congreso”, “foro”, etcétera. Y es que no es necesario otro requisito para los diputados locales para hacer uso de la partida de viajes, más que la necesidad o voluntad de hacerlos. En 2011, 19 diputados viajaron en 83 ocasiones, reportando un total de 730 mil 683 pesos en distintos puntos del país y Estados Unidos. De excursión Pese a que por Ley, es una obligación que el Congreso publique en su página de Transparencia los viajes en comisiones de los diputados, tal información no existe. Al menos, no de manera pública. El artículo de la Ley de Transparencia y Acceso a la Información Pública para el Estado de Baja California establece que el Congreso deberá publicar periódicamente los “viajes en comisiones oficiales de diputados y titulares de los órganos técnicos administrativos”. El Congreso no cumple con ello, y el Instituto de Transparencia no lo ha obligado a hacerlo. ZETA llevó a cabo una solicitud a la Unidad de Transparencia del Congreso local para conocer los viajes que cada uno de los diputados realizó en 2011. La respuesta fue negativa. Tuvo que intervenir el Instituto de Transparencia y, meses después, el Congreso por fin respondió con inconsistencias la información. Aun así, se pudieron conocer algunas detallitos de los diputados viajeros. Por ejemplo, que en total fueron 166 pasajes de avión para los legisladores, con un costo de 731 mil 683 pesos, sin contar a ayudantes, secretarios, o simplemente acompañantes. “Paseadera” hasta en avioneta De los diputados locales, quien más empacó sus maletas para viajes todo pagado fue el actual presidente del Congreso, el priista Alfonso Garzón Zatarain, al menos en diez ocasiones entre 2011 y los dos primeros meses del año en curso. Sin embargo, fue de los pocos diputados que a pesar de la resolución del Instituto de Transparencia para responder con veracidad, no incluyó la relación de sus gastos. Únicamente señaló las fechas, destinos y motivo de sus viajes. Ciudad de México, Toluca e Isla de Cedros, figuran entre los lugares que visitó. Incluso para su comodidad, realiza sus viajes en avionetas privadas. Así lo hizo cerca del Día del Amor y la Amistad, el 17 de febrero, cuando una avioneta despegó de Ensenada para aterrizar en Isla de Cedros, con motivo de una “reunión de trabajo”. Al parecer fue tal agrado de hacer uso de avioneta que dos días después, el 19 de febrero, Garzón partió una vez más a la Ciudad de México, a otra “reunión de trabajo”. En esa ocasión -como las demás que visita la capital del país-, se hospedó en el hotel Lark de la calle Mariano Azuela. No fue posible saber los costos del hotel ni del vuelo privado, tampoco de las comidas o viáticos, ya que el diputado no incluyó esos datos. Pero sí se puede conocer, al menos en la imaginación, dónde descansó durante sus viajes al Distrito Federal. Según su portal de internet, el hotel Lark ofrece “habitaciones de estilo contemporáneo, con pisos alfombrados, plafones blancos, textiles de la más alta calidad, muebles con acabados en caoba y baños terminados en granito”. Los más “salidores” María del Rosario Rodríguez, del Partido Acción Nacional (PAN), es otra de los diputados que más derogó en aviones, hospedajes y comidas. En 2011 utilizó 105 mil pesos para tal menester, al viajar, cuando menos en ocho ocasiones, a la Ciudad de México. El motivo, “asuntos” de su comisión, reuniones y encuentros. La salida de Rodríguez del 22 de julio de 2011 (por un solo día) costó a los bajacalifornianos 16 mil pesos, según la misma respuesta emitida por Transparencia. Rubén Alanís también gusta de las reuniones lejos del estado. Fue de los legisladores, también del PAN, que más viajó el año pasado. En nueve ocasiones el Congreso pagó sus vuelos, hospedajes, peajes y comidas fuera de la entidad, así como las de su secretario técnico, Jorge Cortés, “en algunas ocasiones”. Alanís aseguró a ZETA que lo llevó a “capacitarse”. — ¿Qué beneficios pudieron haber traído al estado?, se le cuestionó al legislador ante tanta salida. “Yo soy coordinador de la fracción, tengo que estar yendo a reuniones constantes, donde revisamos las iniciativas que a nivel nacional, se establecen como prioridad”. Rubén Alanís gastó 86 mil 628 pesos en sus nueve travesías, todas al Distrito Federal. Se le identificó como operador en Baja California del ex precandidato de Acción Nacional, Ernesto Cordero, en su reciente aspiración presidencial. La mitad de sus salidas a la capital del país, el panista las hizo dentro del periodo del proceso de selección interna de su partido, entre octubre y noviembre. Pero en entrevista, el diputado negó que haya utilizado recursos del Congreso para atender asuntos partidistas. Turismo al 2×1 Lizbeth Mata, diputada plurinominal del PAN, es otra que usó más la partida de viajes. Seis ocasiones que salió de Baja California, implicaron 73 mil 357 pesos provenientes de recursos públicos. Por mencionar uno de los viajes, Mata se trasladó de Tijuana a Chiapas el 6 de julio de 2011, a un “foro” de juventud y deporte, hospedándose en el hotel Crowne Plaza. Facturó 10 mil 140 pesos. Ese mismo día partió rumbo al Distrito Federal a otro “foro” de deporte, Súmate a los Panamericanos. Durmió en el hotel Fiesta Americana y gastó 14 mil 006 pesos. En total, en una sola salida, la panista derogó 24 mil 146 pesos. Julio Felipe García, del PRI, es otro de los que conforman la lista de diputados que se desempeñan fuera de su entidad. Ha viajado en nueve ocasiones al Distrito Federal, costándole al presupuesto estatal 57 mil 934 pesos. Se aloja en hoteles de más de mil 450 pesos la noche, como el Sheraton María Isabel y el Sevilla Palace. En algunos viajes, como el del 3 al 5 de marzo de 2012, el lesgislador comprobó 6 mil 300 pesos de gastos que incluyen viáticos, y otros 6 mil 178 pesos de pasajes, más el hotel. En ocasiones, Julio Felipe hizo dos viajes en menos de tres días, hasta los fines de semana. Por ejemplo, el 26 de julio de 2011 asistió a una “reunión de trabajo” a la capital del país. Volvió al estado y, el 29 del mismo mes, un viernes, partió rumbo a la Ciudad de México. Esas dos vueltas costaron 11 mil 300 pesos. El priista Fausto Zárate se suma a la lista de los más gastadores, con 55 mil pesos en cuatro viajes; Virginia Noriega, también del PRI, ha usado 45 mil 250 pesos del presupuesto para volar en seis ocasiones distintas por motivos de “trabajo”; y a Máximo García le han reembolsado 38 mil 405 pesos por concepto de tres viajes. La estancia más cara la pagó el diputado Laurencio Dado, también del Revolucionario Institucional, quien dispuso de 49 mil pesos en solo dos salidas, una a Querétaro y otra a Mazatlán, Sinaloa, de donde es originario. En esta última, el Congreso desembolsó 4 mil 500 pesos para pagar dos noches en Hotel Cid (del 13 al 15 de octubre). El costo del avión fue de 9 mil pesos, y los gastos, incluyendo viáticos de 19 mil 500 pesos. Legisladores internacionales Pero también hay viajes internacionales. Elí Topete, Fausto Zárate del PRI, Marco Antonio Vizcarra -del Partido Estatal de Baja California- y Max García del PAN, visitaron Washington, la capital de Estados Unidos, para atender conferencias y cumbres internacionales. García, Zárate y Topete se fueron al país vecino en febrero de 2011 a una conferencia legislativa fronteriza. Los costos fueron de 18 mil 902, 16 mil 750 y 6 mil 900 pesos, respectivamente, incluyendo viáticos y traslado. Los tres se hospedaron en el St. Gregory Luxury (hotel de lujo), con precios de hasta 6 mil pesos por dos noches. Por su parte, Vizcarra ha salido del país a giras de trabajo, y de igual manera, se le reembolsa lo gastado. Incluso sus salidas a San Diego. El 7 abril visitó California, por un “foro legislativo”, solo que en vez de hacer fila en el cruce, como miles de bajacalifornianos, prefirió irse en avión. Al menos así lo indica su reporte en gastos de “pasajes aéreos y terrestre”, por la cantidad de 890 pesos. La misma cantidad en gastos que incluyen viáticos. El último viaje internacional de este diputado fue el 19 octubre de 2011 a Washington, D.C., con motivo de la Conferencia Nacional CSG. Se instaló en el hotel Hyatt Regency, y los gastos incluyeron viáticos por 2 mil 660 pesos. Solo cinco diputados locales no viajaron a costa del presupuesto oficial, o al menos eso fue lo que reportaron a la petición de Transparencia: Carlos Murguía Mejía, por cierto, presidente de la Comisión de Turismo del Congreso; Juan Bautista Montejano, Víctor Hugo Navarro y Gregorio Barreto (que en paz descanse). Rubén Fernández, quien suplió a Nancy Sánchez cuando ésta se fue de candidata al Senado por el PRI, no contestó, justificando que tomó posesión en enero de este año. Es decir, envió la información que correspondía a la titular del curul. Sueldos y presupuestos “por los cielos” Lo extraño es que a los diputados se les pague los viajes cuando gozan de un sueldo muy jugoso: 110 mil 554 pesos cada mes. Además, reciben 40 mil pesos mensuales para mantener un módulo de atención ciudadana que muchas veces terminan siendo oficinas de campaña y dispensarios electorales. Por si fuera poco, a los 25 diputados se les proporcionan otros 40 mil pesos para “viáticos” cada mes. Supuestamente está destinado a los traslados, comidas y demás gastos para el desempeño de sus labores. Nada de eso son gastos por comprobar. Pueden o no usarlos para lo que son entregados. En total, son 190 mil 554 pesos lo que cada diputado cobra de manera mensual, sin contar viajes y otros “apoyos”, en el caso de quienes dirigen alguna comisión legislativa. Cada mes, se desembolsan 4 millones 763 mil 874 pesos por los 25 diputados. En 2011 se presupuestaron 216 millones para pagar “servicios personales” del personal del Congreso, que incluye sueldos, prestaciones, aguinaldos, y 14 millones 850 mil pesos para el pago de “dieta” de los diputados. En otra partida aparecen los 18 millones 235 mil 522 pesos para “servicios de traslados y viáticos” en la Cámara de Diputados. De esa cantidad, 15 millones 405 mil pesos fueron únicamente para cubrir los “viáticos”.