Un atractivo cartel ofrece este domingo 15 de julio la empresa de la Plaza México. Es la tercera corrida de la temporada en la Monumental Playas de Tijuana, con toros de San Marcos para Manolo Mejía y Fermín Spínola, y la presentación de Angelino de Arriaga. El ganado goza de sólido prestigio, proviene de la familia García Villaseñor y su divisa es rey, blanco y amarillo. El rancho se localiza en Valle de Guadalupe, Jalisco, y se fundó en 1944 con pie de simiente de San Mateo, Piedras Negras y Torrecilla. Debutó en México en 1961, con seis de la Viuda de Franco. En 1966, la ganadería se vendió a Heriberto Sánchez Franco, quien le cambió el nombre a San Marcos, agregando ejemplares de Valparaíso y vacas de Lucas González Rubio. Con añeja alternativa, a Manolo Mejía se le ha cuestionado bastante sobre su retiro. Tiene tardes buenas y otras malas, lo innegable es una sólida trayectoria y depurada técnica. Fermín Spínola, en verdadero resurgimiento, triunfó en el serial anterior en la Plaza México, recientemente a 12 años de doctorado. Spínola confirmó en Madrid. Angelino de Arriaga se desmonterará en Tijuana a un año de obtener los trastos. Primer Aviso. En la Villa Charra del Gato Bronco en Tijuana, desde el 29 de abril de 2012 opera todos los sábados, de diez de la mañana a cuatro de la tarde, la Escuela Taurina “Teresa Miret”. El maestro, matador, Eliseo Gómez “El Charro”. Las clases son gratuitas, no importa la edad ni los conocimientos. Se ingresa por la puerta de atrás, hay que atravesar el ruedo. La asignatura se imparte en el palenque. Existe vigilancia dentro y fuera. El único requisito es respetar y estudiar. Los alumnos agradecen a su propietario, Manuel Bowser, el noble gesto e invaluable tributo a la Fiesta. Las escuelas del Toreo son importantísimas, quien toma un capote o muleta de manera profesional, forzosamente estuvo en alguna. Un ejemplo de ello es la figura mundial Julián López “El Juli”, quien por cierto dio cátedra hace algunas horas en la Plaza de Pamplona, al torear de salón ante niños y jóvenes de una institución denominada “Casa Misericordia”, donde “El Juli” reconoció las creaciones del maestro Eliseo Gómez “El Charro”, las cuales ha incorporado a su repertorio. Es menester enfatizar que “El Charro”, sobrino de “Carnicerito de México”, la tarde del 28 de junio de 1953, ejecutó “La Crinolina”, vestido de malva y oro, alternando con Alfredo Lezama y Manolo Barbosa. “El Charro”, campeón de floreo con lazo vaquero en el jaripeo, acudió al día siguiente de esa importante tarde al programa televisivo de Paco Malgesto y Pepe Alameda. Ahí decidieron bautizar al nuevo quite de Eliseo Gómez con el nombre de una suerte charra. Se mencionaron como probables: El Espejo, Resorte, Canasta y Crinolina, naturalmente ganó la famosa “Crinolina”. Segundo Aviso. Fernando Ochoa triunfa en el extranjero. Falleció la madre de Alfredo Sahagún. El hijo de Antonio Lomelín viene dando sorpresas, el domingo 8 de julio cortó la única oreja en la Plaza México, lo que le permitirá repetir el domingo 15 en el embudo de Insurgentes, al lado de César Ibelles y Ricardo Frausto, con novillos de La Guadalupana, de Juan Flores Chávez, dehesa localizada en Villa de Coss, Zacatecas, de divisa tabaco y celeste. Tercer Aviso. Durante las décadas de los 30s y 40s, la sangre española de Murube ocupó un espacio especial en la ganadería mexicana con la importación de varios sementales. En 1938 y 1945, significaron clamorosos triunfos para las ganaderías de Pastejé y Rancho Seco, en cada una la sangre “Murubeña” dio un toque de distinción al encaste Saltillo. Aunque nació en Cantón, Vicente Hong se aficionó a los toros. En 1930 se hizo torero, el torero chino, hizo el paseíllo en Gerona, Zaragoza, Palma de Mallorca, San Sebastián, Cuenca, Barcelona, Carabanchel, Segovia, Burgos y Zamora. Desafortunadamente no tuvo éxito. A “Amistoso”, de Mimiahuapam, número 33 y 563 kilos, se le dio una vuelta en Las Ventas. Fue corrido en cuarto lugar el 22 de mayo de 1971. En el cartel: Victoriano Valencia, Antonio Lomelín (oreja) y José Luis Parada. Aunque tiene años de publicado, se sigue recomendando el libro “Sin Pañuelo Verde”, de Paco Delgado. arruzina@hotmail.com