Dos ancianitas tienen rato sentadas en la iglesia, y de pronto una dice: — ¡Tengo el trasero dormido! La otra responde: “Sí, ¡ya lo he oído roncar tres veces!”. Autor: Un monaguillo.
Dos ancianitas tienen rato sentadas en la iglesia, y de pronto una dice: — ¡Tengo el trasero dormido! La otra responde: “Sí, ¡ya lo he oído roncar tres veces!”. Autor: Un monaguillo.