Abogados señalan retrasos en la PGJE

Sobre la gestión del Procurador General de Justicia del Estado (PGJE), Rommel Moreno Manjarrez, la impresión manifiesta de la mayoría de los abogados bajacalifornianos organizados, es de despilfarro, descoordinación, lentitud y desinterés. Los problemas de funcionamiento de la procuraduría fueron analizados y señalados por los especialistas y practicantes del derecho integrados a la Federación Estatal de Colegios, Barras y Asociaciones de Abogados de Baja California  (Fedabo), que representa a 16 colegios de abogados de Baja California, más del 85 por ciento del total existente, desde el 5 de mayo de 2012, durante su sesión de trabajo. Después de compartir experiencias, uno de los temas que decidieron fue que oficialmente, solicitarían información concreta de los avances en las acciones de la procuraduría estatal. Acordaron plantear, públicamente, 18 preguntas al actual Procurador, mismas que el fiscal ha decidido ignorar durante tres meses, tiempo en el que los abogados han reiterado permanentemente su petición. Los abogados integrados a la Fedabo refieren y se quejan de una serie de deficiencias: la lentitud en la integración de las averiguaciones previas; falta de personal en la agencias del ministerio público, lo que conlleva una sobrecarga de trabajo a los empleados de la procuraduría; como consecuencia el rezago; la falta de unificación de criterios para desahogar las Averiguaciones Previas (AP), pues aseguran se atienden aparentemente a conveniencia; y la mala atención de parte de algunos agentes del Ministerio Público. Y de mayo a julio de 2012, se han manifestado decepcionados por el incumplimiento de las expectativas de los abogados en el desempeño de la PGJE y del Procurador Rommel, a la vez que reclamaron el derroche de gastos en viajes, hospedajes, comidas y renta de salones para eventos que organiza la PGJE, distrayendo además, a los funcionarios de su labor. Las preguntas que le han remitido una y otra vez, por medio de cartas públicas a Moreno Manjarrez, giran en torno a lo siguiente: información detallada sobre los convenios firmados durante su gestión; gastos y justificación de sus viajes; gastos en hoteles, en salones sociales o restaurantes y la justificación de por qué realizar actividades en esos sitios; información sobre nuevas plazas en la PGJE; tiempos en la determinación de las AP; ubicación y distribución de las tareas de los agentes del ministerio público en los distintos municipios, con sus respectivos resultados; rezagos en las AP; porcentaje de resoluciones de los ministerios públicos confirmadas y no confirmadas por resoluciones de jueces penales. La postura de los litigantes, aseguró Miguel Arregui Ibarra, Presidente de la Fedabo, es de manera unánime, “las quejas por las deficiencias en la labor de la PGJE es generalizada en Baja California. “Es un órgano que no resuelve los problemas, que tarda mucho en determinar las integraciones de las averiguaciones previas, que genera un problema tanto para la sociedad en general como para los litigantes, porque no está haciendo su trabajo correctamente”, detalló Arregui, “…también hay gente que sí hace bien su trabajo dentro de la Procuraduría, pero pues son los menos, desgraciadamente”. Para el abogado ensenadense, la parte central de los problemas en la PGJE está en la integración de las AP, “El ministerio público es el representante social y es el que debe de determinar la averiguación, y entonces te da a veces unos contrastes de que un día la determina muy rápido, cuando ‘alguien’ está ahí…y cuando es una persona normal pues se tarda hasta años en determinarla, entonces…no hay una dinámica de seguimiento”, afirmó. Angélica María Laborín Navarro, representante del Colegio de Mujeres Profesionales del Derecho de Ensenada A.C. fue más condescendiente con los funcionarios, pero respaldó la versión del rezago y la inconformidad por la forma en que se están administrando los recursos en la PGJE: “Los retrasos en las integraciones de las averiguaciones previas derivan de falta de personal y de recursos mal destinados” Un destino de recursos que reclamó, ha sido mal aplicado por la PGJE, al enfocarse en exceso en el tema del Nuevo Sistema de Justicia, descuidando el sistema vigente. “No hay problema que se destine presupuesto a lo nuevo, pero que no se descuide lo que hay…en Ensenada se siguen organizando eventos muy fastuosos, por ejemplo en el Hotel Coral (Coral y Marina), a cada rato se hacen conferencias, capacitaciones, cursos, etcétera, pero está el descuido del área del ministerio público”, recordó Laborín, mientras hizo hincapié en que la renta en dicho hotel es elevada, en particular si se considera que la mayoría de esos actos oficiales podrían realizarse en oficinas de gobierno sin tanto costo. El vicepresidente de la Fedabo en Ensenada, Guillermo Hurtado Aviña, explicó que el dinero es uno de los temas importantes abordados por los abogados: “…se está gastando mucho dinero, en cosas que no benefician, por lo menos directamente, a la procuración de justicia. Desde el 5 de mayo, se habló del edificio de Mexicali donde están los tribunales de juicios orales, y de otros gastos, de comidas y fiestas y esto (organizadas por la PGJE) para mostrarle a gente que no tiene nada que ver en esto, los resultados o los avances”, explicó. Al observar los grupos de personas con quien se reúne el Procurador, explicó Hurtado, los abogados de la Fedabo tienen la visión de que sus actividades son más “de lucimiento” que de búsqueda de efectividad. Los abogados consideran que el dinero que se gasta para proyectar la imagen o publicitar programas o inauguraciones, debe destinarse a contratación de personal, el cual en lugar de aumentar se ha reducido en los últimos 18 meses en Ensenada. Laborín ejemplificó: “Desde hace un año y medio en lo que respecta a robos, hay solamente un agente del ministerio público asignado y que trabaja jornadas que superan las 12 horas diarias, antes había dos ministerios públicos, que se dividían los horarios… no se quedaba sola la agencia nunca”. La agudización del creciente rezago en la PGJE advertido por los abogados litigantes, aseguró Hurtado, vino luego de la implementación del nuevo sistema de juicios orales, “… que ha sido uno de los juguetitos del Gobernador. Juguetito nuevo que es a nivel nacional, pero que el Gobernador le ha dado mucho impulso en lo público, aunque en la realidad no lo suficiente, porque hasta ahí están rezagados. Tan cierto, que este mayo debió haber funcionado aquí y no funcionó, entonces, han gastado mucho dinero y no ha habido avances”, dijo. Aunado a ello, Hurtado menciona que la PGJE está invirtiendo recursos en capacitación de los funcionarios gubernamentales sin ofrecer apoyo o guía a los abogados, lo que dejará en la indefensión a los detenidos. “Pero ésa ya es responsabilidad de nosotros, de acercarnos y de exigir, ya no tanto pedir, capacitación a la Procuraduría”, dijo. En relación a las 18 preguntas dirigidas a Rommel, Hurtado mencionó que será en la siguiente reunión de la Fedabo, cuando decidirán qué otras medidas tomar. Arregui Ibarra dijo que de no recibirlas sería quizá a través de algún diputado en el Congreso del Estado, como le harían llegar sus dudas, dada la obligación de informar ante los legisladores sobre su trabajo. “La PGJE es un elefante blanco que es muy difícil atender, sin embargo, bueno, creemos que se pueden dar mecanismos que modernicen, que se le den más cambios… sabemos que existen muchas denuncias y es un cúmulo de trabajo muy pesado, pero eso no es óbice para no dar respuesta. La Procuraduría tiene un presupuesto muy grande comparado con el Poder Judicial del Estado”, aseguró Arregui. El abogado remató asegurando que el dinero se ve, pero los resultados no.   Procurador no respondió   El viernes 13 de julio de 2012 a través de Comunicación Social de la Procuraduría se solicitó una cita con su titular, Rommel Moreno, se explicó que el motivo era buscar las respuestas a las interrogantes planteadas por la Fedabo, se prometió una respuesta, que no llegó, razón por la cual se insistió en el mismo sentido el lunes 16 y el martes 17, cuando dijeron que se concedería la entrevista, aunque fuera telefónica dado que el fiscal tenía una agenda muy ocupada toda la semana. Extraoficialmente, de la PGJE informaron que conocía el caso y le restaron importancia indicando que se trataba de una venganza del abogado Arregui, quien tres meses atrás intentó que personal de la procuraduría local lo favoreciera en un asunto de tierras que está litigando, y al serle negado el apoyo, aseguraron, advirtió que haría algo al respecto, y según los funcionarios y el Procurador, la carta de la Fedabo fue su revancha, por eso no han respondido. Si ésa es la respuesta oficial que lo declare el Procurador, solicitó ZETA. Las llamadas telefónicas y las peticiones de este semanario continuaron los días 18 y 19. El miércoles por la noche dijeron que Moreno estaba con el Gobernador, pero hablaría después, y el jueves de plano que lo más factible es que pudiera responder hasta la siguiente semana. Con el agregado de que la información que estaba requiriendo a través de publicaciones en la prensa la Fedabo estaba en la página de transparencia. Acorde a esta versión, ZETA buscó los datos requeridos por la federación de abogados y sólo encontró respuesta a uno de los cuestionamientos. Respecto a las averiguaciones previas en curso en el Estado, la PGJE mantiene una cifra de 163 mil 919. Ensenada, cuenta con 35 mil 434; Tijuana 62 mil 512; Mexicali bajo el nuevo sistema 24 mil 10; Mexicali con el sistema tradicional, 26 mil 569; Playas de Rosarito 4 mil 838; y Tecate 10 mil 556 La postura de los abogados, aseguran los integrantes de la Fedabo, podría endurecerse luego de su próxima sesión ante la falta de atención a su gremio. De las repuestas a las otras 15 preguntas no se encontró nada. Consultados, abogados de la federación indicaron que ellos desconocen si su coordinador y el procurador u otro funcionario de la PGJE tuvieron algún problema, lo que saben es que los problemas y las dudas respecto al funcionamiento de la procuraduría plantadas en el desplegado son reales y merecen una respuesta.