En un país donde cada vez se cultiva menos alimento en el campo y desde hace muchos años se cosechan enervantes, ahora se “siembran” cadáveres y retoña la violencia. Hoy la tierra huele a muerte en muchos lugares del país por las tumbas clandestinas que el crimen organizado y algunos representantes de autoridad llenan silenciosamente. Una investigación de ZETA, basada en fuentes eminentemente periodísticas y que a su vez recabaron la información de corporaciones policiales, los servicios de medicina forense de distintas entidades y confirmaciones de funcionarios, revela que en el sexenio de Enrique Peña Nieto son más de 125 las fosas clandestinas descubiertas y más de 560 las víctimas. La última fosa clandestina descubierta fue en los primeros días de enero de 2015, y en el estado con la mayor convulsión social por el tema precisamente de la inseguridad y los homicidios dolosos, cuanto más violentos en el contexto del crimen organizado y el narcotráfico. En plena manifestación de búsqueda de 42 de los 43 normalistas desaparecidos de Ayotzinapa, Iguala, en Guerrero -dado que de uno de ellos se encontró el resto de un hueso y de una pieza dental-, se localizó una fosa en Chilapa, Guerrero, con la escalofriante suma de 10 cuerpos y 11 cabezas humanas. En tiempos de la presidencia de la República encabezada por el priista Enrique Peña Nieto, las estadísticas oficiales no son confiables. Vamos, ni siquiera están disponibles. Las autoridades las ocultan y las matizan. La información de este fenómeno criminal está fragmentada por las narcofosas que cada dependencia toma conocimiento. Los recuentos abarcan solo meses, periodos que muerden parte de un año y otro, o una fase del sexenio anterior sumada al actual. Nada certero. La tarea de contar los cadáveres que había en esas sepulturas secretas tampoco es sencilla, porque a veces lo que se encuentra en esos sitios, son solo huesos o fragmentos de ellos, cenizas, piezas dentales, partes de cuerpos, restos amorfos o grasa humana. Una total putrefacción. Algunas prendas de vestir, hebillas, accesorios y calzado. En algunos casos, los policías anotan “un barril con restos humanos” o “mil 800 huesos, 20 prótesis y 15 tornillos quirúrgicos”. Escalofriante. Escenarios que horrorizan. Crímenes cometidos con saña inaudita y sin el menor respeto a la vida de los semejantes. Víctimas maniatadas, torturadas, con amputaciones o decapitación. Asfixiadas, macheteadas o con impactos de bala en el cuerpo y el clásico tiro de gracia en la cabeza. Así fueron localizados el martes 6 de enero de 2015, los más recientes cadáveres en Guerrero, los restos humanos estaban baleados, con las manos amarradas y con huellas de terribles tormentos. En un paraje de Chilapa de Álvarez, en seis fosas yacían enterradas 11 cabezas humanas y 10 cuerpos completos. Increíble que ocurriera en una entidad que tiene “marca personal” del Gobierno de la República, después de la desaparición de los 43 estudiantes de la Normal de Ayotzinapa. Peor aún que ocurra en el Estado que los ojos del mundo ven en estos momentos como “México”, y que motivó que el 27 de noviembre de 2014, Peña Nieto anunciara 14 medidas en seguridad, justicia y desarrollo económico “para evitar que crímenes así se repitan”, donde el Ejército, la Gendarmería y otras corporaciones federales, supuestamente se encargan de la seguridad como parte de esas medidas. En ese acto, el primer mandatario declaró: “Después de Iguala, México debe cambiar (…) Asumo la responsabilidad de encabezar todos los esfuerzos necesarios para liberar a México de la criminalidad, para combatir la corrupción y la impunidad. En suma, construir un pleno Estado de Derecho”. Horas más tarde del compromiso presidencial fueron localizados los cuerpos de 11 personas decapitadas en la comunidad de Ayahualulco, municipio de Chilapa, al parecer, los mismos 11 cuerpos a los que pertenecen las 11 cabezas encontradas en las fosas del Día de Reyes. Antes de la agresión de la Policía Municipal de Iguala y posterior desaparición de los estudiantes los días 26 y 27 de septiembre de 2014, en el Estado de Guerrero ya se registraban misteriosas desapariciones, y su territorio, en un cementerio que ha recibido a quienes ahora abonan la tierra. Por lo menos 160 cuerpos han sido exhumados desde diciembre de 2012 a la fecha. El peregrinar para cientos de familias por las delegaciones de Policía, centros penitenciarios y la morgue de distintas entidades federativas es penoso. No desisten en buscar a sus familiares desaparecidos, como no renuncian los padres y hermanos de los 43 alumnos ausentes de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa y no piensan descansar hasta que los encuentren. “Vivos se los llevaron y vivos los queremos”, es su grito de guerra. Las autoridades de cada entidad y las federales realizan tareas de búsqueda y localización, pero los resultados no satisfacen a las familias en desgracia. Ni siquiera para identificar las osamentas o restos mortuorios. Con la Antropología Forense en pañales, instancias como la Procuraduría General de la República y los servicios periciales de las fiscalías locales fueron rebasadas y se ha tenido que echar mano de expertos de otras naciones. De entrada, se desconoce la ubicación de las 22 mil 300 personas (vivas o muertas) reportadas como desaparecidas en el país, según el registro oficial dado a conocer en agosto de 2014 por la PGR. La subprocuradora de Asuntos Jurídicos, Mariana Benítez, lo dijo: del sexenio anterior -2006 a 2012- están pendientes de localizar 12 mil 532 desaparecidos, y de la administración peñanietista, 9 mil 790. Ese fue el último ajuste, aunque en esto de las estadísticas gubernamentales las operaciones aritméticas casi nunca salen bien. En mayo de 2014, el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, informó que el número de desaparecidos se había reducido a solo ocho mil personas. ¿Cómo es que para la funcionaria de la PGR, las cifras de desaparecidos del sexenio calderonista volvieron a aumentar tres meses después del anuncio de Osorio? Después del escenario registrado en el Estado de Jalisco, en la recta final de 2013 e inicios de 2014, donde florecieron las fosas clandestinas con más de 134 cadáveres, las más significativas en el municipio de La Barca, en los límites con Briseñas, Michoacán, las autoridades federales estaban conscientes de lo que estaba por ocurrir. En enero de 2014 se exhumaron los últimos cuerpos de los 76 encontrados en márgenes del Río Lerma, en Jalisco. En febrero siguiente fueron al menos 20 cadáveres en tumbas anónimas de Tingüindín en Michoacán, 32 personas exhumadas de fosas de Guerrero y otras 19, nuevamente en Jalisco, en el municipio de Tlajomulco de Zúñiga. El fenómeno de las narcofosas se incrementaba y, en marzo de 2014, la PGR anunció que se estaba capacitando al personal para actuar con eficiencia y ética ante los enterramientos humanos. El subprocurador de Delitos Federales, Cleodomiro Zoreda, señaló que la detección de una fosa o sitio donde se encuentren restos humanos “obliga al personal pericial a actuar con ética, humanidad y profesionalismo, ya que los resultados derivan en la efectiva procuración de justicia”. De marzo a junio de 2014, las fosas clandestinas en Guerrero, Michoacán y Veracruz brotaron como hongos. En Guerrero fueron Iguala, Acapulco y Chilpancingo, con múltiples seres desmembrados. En Veracruz, desde 31 hasta 41 personas exhumadas en una ranchería de Cosamaloapan. Para el 14 de julio del año anterior, la PGR informó que 300 forenses fueron adiestrados en el curso “Trabajo Multidisciplinario en Fosas Clandestinas”, con el que se proyectó que los especialistas conocieran aspectos jurídicos, así como práctica de la exhumación de cadáveres. Rodrigo Archundia Barrientos, titular de la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (SEIDO), sentenció que la capacitación es una de las mejores herramientas con las que cuenta la dependencia federal para combatir la delincuencia y los efectos que esto implica en la sociedad. En Iguala, las desapariciones y las fosas clandestinas continuaron hasta que aconteció el caso que hoy el mundo conoce. El levantón de los normalistas, la localización interminable de tumbas no autorizadas y el hallazgo de personas muertas, que no son los estudiantes que tanto buscan los mexicanos. Solo uno de ellos habría sido localizado sin vida en una fosa e identificado por medio de estudios de ADN: Alexander Mora Venancio, aunque su familia se niega a aceptar la versión oficial como verdad. En la mayoría de las más de 125 fosas de la zona, se conoce la ubicación gracias a denuncias anónimas; la desaparición de mujeres y de niños por igual; la falta de resultados por parte de las autoridades de los diversos niveles de gobierno; pocos responsables han sido detenidos y en varias entidades, policías municipales han colaborado o son autores directos de las desapariciones, muerte e inhumación clandestina de las víctimas. 14 fosas descubiertas en Guerrero de 2013 a 2015 A continuación, los casos reportados durante la presente administración federal: * BAJA CALIFORNIA Diciembre 2012 a abril de 2013 Continúan las investigaciones en una serie de fosas descubiertas en los terrenos donde vivió Santiago Meza López “El Pozolero” (detenido en 2009), en “La Gallera”, ex Ejido Maclovio Rojas, municipio de Tijuana, donde presuntamente disolvió cientos de cuerpos en sosa cáustica. 23 de noviembre de 2013 En Tijuana localizan cuatro fosas clandestinas con restos de cadáveres calcinados. 13 de marzo de 2014 Se localizó fosa clandestina en una cañada de la colonia Loma Dorada, en Tijuana. * BAJA CALIFORNIA SUR 10 de junio de 2013 Los cuerpos de cinco varones y dos mujeres fueron localizados en una fosa hecha dentro de un terreno de la colonia Tabachines de La Paz, municipio de La Paz. Los asesinatos se atribuyeron a Simón Guillermo Hernández Peña “Simón” o “El Sepulturero”. * CHIHUAHUA 6 de junio de 2013 Cuatro tumbas clandestinas con seis osamentas fueron ubicadas a dos kilómetros del Panteón Rosales. * COAHUILA 30 de enero de 2014 Restos humanos, desechos biológicos y ropa agujerada se localizaron en una fosa en el interior de una bodega en la zona de Cinco Manantiales. En los días siguientes se recuperaron unos 500 restos humanos en predios de 10 municipios coahuilenses. 23 de diciembre de 2014 Elementos de la Secretaría de Marina Armada de México atendieron una llamada anónima y en una colonia popular, al oriente de la ciudad de Saltillo, descubrieron una fosa clandestina donde había restos calcinados de cinco personas, entre ellos una mujer. * ESTADO DE MÉXICO 22 de agosto de 2013 En Tlalmanalco ubicaron una fosa clandestina con 12 cadáveres, correspondientes a los jóvenes que el 26 de mayo del mismo año fueron privados de su libertad en el bar Heaven, en la Ciudad de México. 22 de agosto de 2014 En un sitio oculto, entre árboles y cerca de predios de cultivo, en la zona boscosa del paraje La Mesa, cerca de la colonia 21 de Marzo, en San Juan Atzacualoya, agentes federales encontraron una fosa clandestina con cinco cadáveres, algunos de ellos de mujeres. * GUANAJUATO 2 de agosto de 2014 En una fosa séptica dentro de una casa en construcción, en la comunidad de Rancho Nuevo, en Santa Ana del Conde, municipio de León, fueron localizados cuatro cuerpos en avanzado estado de descomposición. Se trataba de cuatro mujeres. 27 de noviembre de 2014 Autoridades ministeriales localizaron una fosa clandestina en un taller mecánico de la comunidad de Santa Ana Pacueco, con cuatro cuerpos en estado de descomposición en su interior. * GUERRERO 28 de marzo de 2013 En Tepecoacuilco, cerca de la carretera Iguala-Chilpanchingo, encontraron cuatro fosas con cuatro cuerpos. 14 de noviembre de 2013 Siete cuerpos fueron localizados en cinco fosas encontradas en una huerta del Ejido El Cayaco, en Acapulco. 9 de febrero de 2014 Dos fosas conteniendo 12 cuerpos fueron descubiertas en un terreno del municipio de Taxco, entre las comunidades de Mezcaltepec y Puente Campuzano, al 18 de Marzo. El saldo fue de 32 cadáveres rescatados. 6 de marzo de 2014 Diez cadáveres en cuatro fosas se localizaron en la zona de “La Antena”, en el Valle del Ocotito. 16 de abril de 2014 En un predio de Lomas del Zapatero, en Iguala de la Independencia, un reporte anónimo llevó a la Policía a escarbar en una fosa clandestina en la que había nueve cuerpos sepultados. En investigaciones realizadas en las siguientes semanas y que culminaron en mayo, en la misma zona otras siete tumbas con 19 cadáveres más. Vecinos de las colonias San Marcos y San Juan señalaron a las autoridades que esos rumbos eran usados como “cementerio”. 19 de abril de 2014 En la colonia Amelitos 1, a las afueras de Chilpancingo, rumbo al camino viejo que conduce al serrano poblado de Amojileca, policías estatales atendieron una llamada anónima y localizaron un agujero donde había restos humanos. No se conoció el número de cuerpos. 30 de abril de 2014 En dos fosas clandestinas en la comunidad de El Cayaco, municipio de Acapulco, militares y agentes federales encontraron cuatro cadáveres, entre ellos el de una mujer. 3 de junio de 2014 En una en la fosa en la comunidad de El Ranchito, en Coyuca de Benítez, fueron exhumados los cadáveres de Héctor López Torres, Gustavo Abarca Radilla y Carlos López Sánchez, quienes trabajaban para Diconsa y la empresa Prospecta, realizando labores de la Cruzada Nacional contra el Hambre. Los empleados de la Secretaría de Desarrollo Social (SEDESOL) desaparecieron unos días antes. Fueron identificados mediante pruebas genéticas 20 días después. Familiares denunciaron inconsistencias ante la Comisión Nacional de los Derechos Humanos. 7 de junio de 2014 En una zona conocida como “Las Tabiqueras”, en Zumpango, a 20 minutos de Chilpancingo y a unos metros de la Autopista del Sol, se conoció el hallazgo de 10 cadáveres en cinco fosas clandestinas. 24 de julio de 2014 Autoridades exhumaron dos cadáveres de una fosa clandestina encontrada en la colonia Llano Largo, en la periferia del puerto de Acapulco, a espaldas de Plaza Sendero. Agentes adscritos a la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SEIDO) realizaron el hallazgo. 4 de octubre de 2014 Inicia el hallazgo de las primeras fosas clandestinas tras la desaparición de 43 estudiantes normalistas de Ayotzinapa. En Pueblo Viejo y Loma de Coyote, municipio de Iguala de la Independencia, se localizaron seis fosas con 28 cadáveres. Cinco días después, el número de fosas fue de nueve y 30 cadáveres. 17 de octubre de 2014 El procurador general de la República, Jesús Murillo Karam, confirma que se localizaron tres fosas más en el municipio de Iguala, aunque por el momento no señaló la existencia de cadáveres o restos humanos. Una semana después se anuncia que el total de fosas es de 11 y de 38 cuerpos, desde la desaparición de los estudiantes. 29 de octubre de 2014 Las investigaciones de búsqueda y localización de los 43 normalistas de Ayotzinapa desaparecidos se extendieron al basurero y a las márgenes del Río San Juan, en el municipio de Cocula, donde en días subsecuentes localizaron bolsas con cenizas y restos humanos calcinados, entre ellos algunos fragmentos de hueso y piezas dentarias. 6 de enero de 2015 En el punto denominado El Huizache, en la comunidad de Tepehuixco, municipio de Chilapa de Álvarez, personal de la Fiscalía General del Estado localizó seis fosas clandestinas con 11 cabezas humanas y 10 cadáveres completos. Al parecer las cabezas corresponden a los cuerpos de 11 personas decapitadas que se encontraron el 27 de noviembre de 2014 en la comunidad de Ayahualulco. Los nuevos 10 cadáveres estaban maniatados y con huellas de tortura. * JALISCO 10 de abril de 2013 En un predio cercano al rancho El Martín, sobre la carretera Guadalajara-Tala, dentro de una fosa se localizaron los tres cadáveres de tres personas que habían sido secuestradas. Mayo de 2013 Una fosa con tres cuerpos fue localizada a tres kilómetros del fraccionamiento Arvento, en Tlajomulco de Zúñiga. 30 de junio de 2013 Siete cuerpos fueron rescatados de una fosa en el rancho La Estancia, municipio de Ejutla. 22 de agosto de 2013 Los cadáveres de una mujer y sus dos hijos menores se encontraron en una fosa clandestina de un terreno de la delegación de San Gaspar, en Tonalá. 7 de noviembre de 2013 Inició la localización de una veintena de fosas clandestinas y al menos 76 cadáveres o restos de los mismos en un predio ubicado en los márgenes del Río Lerma, en el municipio de La Barca, Jalisco. Más de veinte policías michoacanos fueron detenidos por este caso. 26 de diciembre de 2013 En Zapopan, en la zona de La Cumbre, descubrieron una serie de fosas con los cadáveres de 17 personas. Capturaron a cuatro presuntos homicidas. 20 de febrero de 2014 En un terreno de La Calera, en el municipio de Tlajomulco de Zúñiga, se localizaron 19 cadáveres en una fosa clandestina descubierta por las declaraciones del narcotraficante Jerónimo Ibarra Alcaraz. 2 de marzo de 2014 En el cerro de “El Gato”, entre los municipios de Tonalá y Tlaquepaque, se exhumaron los cuerpos de seis varones. * MICHOACÁN 4 de mayo de 2013 En el rancho Parangüitiro, en el municipio de Tingambato, se encontraron los cuerpos amarrados y mutilados de tres hombres e igual número de mujeres en una fosa clandestina. 13 de diciembre de 2013 En una fosa, en un lote baldío de Apatzingán, localizaron tres cadáveres inhumados. 5 de febrero de 2014 Denuncia anónima alertó a la Policía de que en el lugar había fosas clandestinas en el Rancho Tres Coronas, en el municipio de Tingüindín. 5 de marzo de 2014 En el poblado de El Alcalde, municipio de Apatzingán, encontraron los cadáveres de seis varones adultos, cinco mujeres y dos menores de edad en una fosa. 25 de junio de 2014 En el predio La Fábrica, en las inmediaciones de Las Ventas, municipio de Ciudad Hidalgo, se reportaron dos fosas en las que había 11 cuerpos. En el lugar se detectó un campamento en el que se procesaba resina extraída de los bosques de la región. Se investigó al menos a 22 policías de diferentes municipios de la Región Oriente de Michoacán y cinco civiles. No se informó de los resultados. 22 de agosto de 2014 La Policía encontró 11 cadáveres en fosas clandestinas de los municipios de Lázaro Cárdenas y Tumbiscatío. En el primer hallazgo se localizaron dos cuerpos en el puerto michoacano, mientras que en el segundo hecho, en la comunidad de Playitas, había nueve cuerpos enterrados en un predio, a los cuales se les apreciaron impactos de bala. * MORELOS 9 de diciembre de 2013 En tres fosas clandestinas ubicadas en los municipios de Emiliano Zapata, Xochitepec y Amacuzac, se localizaron 23 cuerpos. 6 de febrero de 2014 Otras dos fosas con cuatro cuerpos se hallaron en el paraje Cajigal, en la comunidad de Huajintlán, municipio de Amacuzac. 25 de febrero de 2014 En un terreno del Cerro del Venado, municipio de Zacatepec, fue localizada una fosa con tres cadáveres. 4 de abril de 2014 En un domicilio de la colonia El Paraíso, en el municipio de Jojutla, se localizaron cuatro cadáveres bajo tierra. Se trataba de dos ganaderos de la zona sur que fueron plagiados y otras dos personas. Fueron detenidos nueve individuos, entre ellos dos menores de edad. * SINALOA 18 de noviembre de 2013 Encontraron tres cadáveres en una fosa en el monte, cerca del poblado de Tecomate de la Noria, en la sierra de Mazatlán. 5 de marzo de 2014 En la comunidad de El Playón, municipio de Angostura, se localizaron dos fosas con tres cuerpos. 21 de julio de 2014 En una zona boscosa del Estado de Sinaloa fueron hallados cinco cadáveres en fosas clandestinas. Todos los cuerpos eran de varones. * SONORA 18 de noviembre de 2013 En el poblado de Navomora, en Navojoa, encontraron los cuerpos de dos mujeres y seis hombres dentro de una fosa. * TAMAULIPAS 9 de abril de 2013 Tras la detención de 10 sujetos dedicados al narcotráfico, las autoridades dieron con el paradero de dos fosas clandestinas en las que había restos humanos. 31 de enero de 2014 En el ejido de Bonfil, municipio de Gómez Farías, autoridades localizaron una fosa clandestina con al menos 30 cuerpos y diez barriles con restos humanos. * VERACRUZ 20 de diciembre de 2013 En la playa La Cava, en la zona pesquera de Alvarado, se localizó una tumba clandestina con tres cadáveres de mujeres y cuatro de hombres. 17 de junio de 2014 En el rancho abandonado “El Diamante”, en Nopaltepec, Región de Tres Valles, cerca del kilómetro 11 de la carretera Cosamaloapan-Santa Cruz, en la cuenca del Río Papaloapan y en los límites con Oaxaca, fueron localizados 31 cuerpos (extraoficialmente se habla de 41) en 13 fosas. El subprocurador regional de justicia estatal, Arturo Herrera Cantillo, fue cesado de su cargo el 24 de junio, por informar a los medios de comunicación sobre el hallazgo. El secretario de Seguridad Pública, Arturo Bermúdez Zurita, señaló que los cadáveres localizados eran producto del enfrentamiento entre bandas delictivas, y que las víctimas “no eran personas decentes”. Más muertos en Guerrero Ni los operativos especiales, ni la presencia de fuerzas federales y militares inhiben la actividad criminal de alto impacto en el Estado de Guerrero. Luego del hallazgo de 11 cabezas humanas y 10 cuerpos completos en fosas clandestinas en el municipio de Chilapa de Álvarez, ayer jueves 8 de enero de 2014 se reportó la localización de restos humanos dentro de bolsas negras en Chilpancingo. La noticia se conoció poco después de las 8:30 am, cuando una llamada al número 066 de Emergencias, alertó a las autoridades sobre la presencia de restos humanos en el paraje Tierras Prietas, muy cerca de la carretera federal Iguala-Chilpancingo. Agentes policiales acudieron a verificar el reporte y confirmaron la versión. Dentro de tres bolsas de plástico para la basura se encontraron los fragmentos de seres humanos cuya cantidad y características se desconoce. Personal del Servicio Médico Forense de Guerrero se trasladó al lugar y, en coordinación con peritos de la Fiscalía del Estado, se encargaron del levantamiento de los restos para trasladarlos a la morgue en la capital de la entidad. En el puerto de Acapulco, donde los asesinatos tampoco cesan, al menos 15 mil alumnos de cien planteles escolares no reanudaron las clases tras el periodo navideño conforme lo marca el calendario oficial, debido a la inseguridad con la que iniciaron 2015. Profesores de educación básica decidieron mantener el paro laboral que iniciaron desde noviembre pasado en 200 escuelas y que se suponía, levantarían al regresar a clases el miércoles 8 de enero. También la Iglesia Católica recibió el nuevo año con una gran preocupación por la ola de violencia e inseguridad que existe en Guerrero, aseguró el Obispo de la Diócesis Chilpancingo, Alejo Zavala Castro. El clérigo dijo que la delincuencia organizada amenaza y extorsiona, vía telefónica, a los curas de la Diócesis, lo que ya motivó una reunión con el Fiscal General de esa entidad. Otro de los temas candentes en Guerrero -derivado de la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa- es el de las elecciones. Al reactivar sus protestas para exigir la presentación con vida de los estudiantes, maestros disidentes destruyeron muebles y equipo de cómputo de un módulo de atención ciudadana del Instituto Nacional Electoral, con sede en Chilpancingo. Las protestas sociales y la inestabilidad que se vive en el estado meridional obligaron al INE a reajustar el calendario de preparación de los funcionarios electorales para los comicios del 7 de junio. Así lo anunció el consejero presidente del Instituto, Lorenzo Córdova, quien señaló que los cambios iniciaron el 20 de diciembre de 2014, cuando no se permitió la aplicación de los exámenes a los capacitadores electorales, por lo que las fechas se recorrieron y se rediseñarán estrategias específicas para diversas zonas de la entidad. Por su parte, las investigaciones sobre los jóvenes desaparecidos no presentan mayor novedad que la ya conocida consignación de María de los Ángeles Pineda Villa, esposa del ex alcalde de Iguala, José Luis Abarca Velázquez. Ella fue enviada al Centro Federal de Readaptación Social Número 4 en El Rincón, Nayarit, al igual que diez policías municipales de Iguala. Luis Carlos Sáinz Martínez Detenciones y libertades en Michoacán Familiares de los 44 detenidos por su presunta participación en la balacera del 6 de enero en Apatzingán, en la que nueve personas fallecieron, se organizan con la finalidad de protestar por la consignación de sus parientes al penal federal de Nayarit. Al conocer la versión del comisionado por la paz de Michoacán, Alfredo Castillo Cervantes, en el sentido de que agentes federales no ejecutaron a quienes mantuvieron tomada la Presidencia Municipal de Apatzingán, sino que reaccionaron a una emboscada, las familias de los indiciados aseguran que mostrarán fotografías y videos de lo que realmente ocurrió. Erika Rivera Moreno, familiar de dos de los detenidos, declaró a periodistas: “Nadie los agredió a ellos, los agredidos somos el pueblo de Apatzingán, la gente, los limoneros; si el señor Presidente (Enrique Peña Nieto) manda ‘gobierno’, que mande ‘gobierno’ capacitado para protegernos, para preguntarnos, no para matarnos”. Los inconformes convocarán en breve a una manifestación pacífica para exigir la liberación de sus esposos, hijos y padres, pues consideran su encarcelamiento como una injusticia. Por su parte, tras decretarse los autos de formal prisión a líderes de los grupos de autodefensas de Michoacán, Hipólito Mora Chávez y Luis Antonio Torres “El Americano”, el comisionado Alfredo Castillo advirtió que la función de la Fuerza Rural será temporal y su estructura será depurada, por lo que algunos elementos serán dados de baja, debido a que no han cumplido con su encomienda de garantizar la seguridad de los michoacanos. Castillo Cervantes señaló que la Fuerza Rural inició con poco más de 900 elementos, pero será en el primer trimestre de este año cuando operen unos 500 de ellos, debidamente validados por sus comunidades. Abogados defensores de Mora y del “Americano” confían en que sus clientes saldrán pronto de la prisión “Mil Cumbres” de Morelia, en cuanto se resuelva el recurso de apelación que ya interpusieron. Por cierto, a raíz del encarcelamiento de ambos personajes y de 35 de sus seguidores, el penal es resguardado por al menos cien elementos policiales, para evitar que otros grupos intenten liberarlos o atentar en contra de ellos. El sacerdote michoacano Gregorio López, mejor conocido como “Padre Goyo”, anunció que acudirá ante Amnistía Internacional para solicitar que se trabaje en la liberación de todos los miembros de la Fuerza Rural Estatal, quienes, aseguró el párroco, son inocentes y su único delito es enfrentarse a la delincuencia ante la omisión del gobierno. En su visita al penal conocido como “Mil Cumbres”, en Michoacán, el sacerdote denunció que hay funcionarios que trabajan al servicio del líder de Los Caballeros Templarios, Servando Gómez “La Tuta”, quien a la fecha permanece prófugo. Quien ya recuperó su libertad, con las reservas de Ley, es el alcalde perredista de Charapan, Simón Vicente Pacheco, al exhibir una fianza ante el Juez Tercero de lo Penal, tras ser detenido el martes pasado en cumplimiento a una orden de aprehensión por el delito de enriquecimiento ilícito. Presuntamente, el presidente municipal adquirió 11 vehículos durante los últimos meses, entre éstos, tres autobuses y tres camiones de volteo que no fueron manifestados en su declaración patrimonial. Simón Vicente Pacheco egresó del penal “Eduardo Ruiz” de Uruapan y acudirá a firmar periódicamente el libro de procesados, pues la causa penal continúa. Luis Carlos Sáinz Martínez
Fosas clandestinas: la muerte sembrada
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