La pugna del Cártel Jalisco Nueva Generación, aliado con los resabios del Cártel Arellano Félix para restarle control criminal a Sinaloa en Tijuana, incrementa la estadística homicida en Baja California, llevando los promedios mortales a ocho ejecuciones diarias y más de 200 muertes violentas mensuales. Envalentonados ante la impunidad, “La Maña” acusa a la PEP de secuestradores y los de Jalisco a la Policía Municipal de torturadores. “… yo no me meto con ustedes y ustedes no se meten conmigo”, amenazó un sicario
Los meses de abril y marzo de 2018 han superado la barrera de los 200 asesinatos mensuales en Tijuana, las 24 horas transcurridas entre el 12 y el 13 de junio acumularon 16 víctimas de homicidios violentos, el mayor número de ejecuciones cometidas en un día en Baja California en lo que va del año.
Hasta las ocho de la mañana del jueves 14 de junio, la estadística de Baja California en materia de homicidio cerró con mil 343 ejecuciones, de las cuales mil 077 se han cometido en Tijuana, 118 en Ensenada, 75 en Mexicali, 37 en Rosarito y 36 en Tecate.
Luego del traslado del área de Homicidios a la Subprocuraduría de Tijuana, los resultados son los siguientes: con 212 homicidios en Tijuana durante abril, la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) reportó 12 detenidos en flagrancia por ese delito, 15 judicializados y los jueces les concedieron otras 17 órdenes de aprehensión.
En marzo, con 211 ejecuciones, la fiscalía logró consolidar ocho capturas en flagrancia, judicializar a 12 presuntos homicidas y obtener 16 órdenes de aprehensión. Y con 108 muertes violentas en los primeros 14 días de junio, el Ministerio Público del Fuero Común contabiliza nueve capturas en flagrancia, la judicialización de cinco sicarios y ocho órdenes de aprehensión solicitadas y concedidas.
La mañana del lunes 11 de junio, dos cuerpos masculinos decapitados fueron encontrados en un barranco contiguo a un camino vecinal en la calle la colonia El Valle; el 10 de junio, las dos cabezas de las víctimas habían sido abandonadas dentro de hieleras frente a Peluquería y Estética Miriam’s, en Sánchez Taboada. Los criminales habían circulado en redes sociales las imágenes de las mismas extremidades cefálicas ensangrentadas, pero en el interior de lo que parece un taller de reparación, donde se ven partes de aparatos de sonido, los muertos estaban acompañados de una cartulina con amenazas de los aliados del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) en Tijuana, contra ex miembros de su célula criminal.
También los días 11 y 12, una persona recibió una llamada telefónica y la hizo circular entre los uniformados locales, supuestamente hecha por Edgar Alejandro Herrera Pardo, alias Sergio Alberto Morelos Mejía “El Zame” y/o “El Caimán”, convertido en brazo operativo de los representantes del CJNG en la entidad y, de acuerdo al organigrama en poder del Consejo Estatal de Seguridad, cumple las órdenes de los líderes Héctor Manuel Morales Guzmán “El Gallero”, Jesús Rafael Yocupicio “El Cabezón” , Jesús Alfonso Trapero Ibarra “Torrentegui Ramos”;, Alejandro Estrada Bañuelos “El Lic del Diablo” y un sujeto al que solo identifican como “El Padrino”
En ambos mensajes el sicario amenazaba la vida de policías municipales y de elementos del Grupo de Operaciones Especiales (GOE). Lo mismo hizo un grupo que se hace llamar “La Maña” la noche del 9 de junio, pero en contra de agentes de la Policía Estatal Preventiva (PEP) a los que acusaron de secuestros cometidos en Rosarito, a través de una manta dejada en el acceso a un puente en la delegación Playas de Tijuana.
ALIADOS DE JALISCO VAN POR OTAY Y CENTENARIO; HEYNES MATA PARA SINALOA
La semana que concluye, el homicidio de más alto perfil se cometió en la delegación Otay, mientras el Grupo Coordinación coordinaba esfuerzos y concentraba agentes en la zona detectada como de mayor violencia homicida: La Presa y Presa Rural.
“No sabemos si así lo orquestaron, si sabían dónde estábamos, o fue incidental” comentó un jefe policiaco.
El sábado 9 de junio, la primera balacera en Otay se reportó a las 08:53 am. Los primeros datos fueron que había tres personas lesionadas por arma de fuego en un “picadero” ubicado en el entronque de las calles Macedonio Alcalá y Juventino Rosas de la colonia Nueva Tijuana, en el Módulo 3. Desde los años 80, los módulos han sido considerados por las autoridades un área de total control delictivo, primero administrada por el Cártel Arellano Félix (CAF) y recientemente por la mafia de Sinaloa
Allí, Óscar Flores Quevedo, sin antecedentes, fue lesionado y murieron un hombre aún no identificado y Erika Ivón Castillo Hernández, quien contaba con antecedentes por robo con violencia desde 2009. Como presunto responsable las autoridades identificaron a “El Pallín”, encargado de la distribución de la droga para venta al menudeo en la zona.
Las armas usadas en este doble asesinato se emplearon en el intento de homicidio contra Ramón Beltrán Meza el 4 de junio de 2018, en la delegación Sánchez Taboada.
Yen cuatro operativos homicidas en Otay: el deceso de Javier de la Cruz el 15 de marzo; la ejecución de Moisés Orizaba el 22 de marzo; la de armando Caballero y un masculino lesionado el 14 de abril; las muertes de Alberto García y Lisandro Jiménez, el 28 de abril; y los asesinatos de Alberto Castañeda y David Martínez el 18 de mayo.
Minutos después del ataque en el picadero, el mismo sábado 9 de junio, a las 9:31 am, el C4 emitió el segundo reporte de que en el Bulevar Bellas Artes de la colonia Nueva Tijuana, afuera de la casa de empeño First Cash, tres personas estaban en un auto cuando fueron atacados a balazos. Los heridos dijeron ser Adrián Torres Adriano, sin antecedentes; Juan Mondragón Guerra, también sin antecedentes delictivos; y Darinka Itzel Garza Arce, detenida y turnada por posesión de drogas en 2005, por robo a casa habitación en 2004 y posesión de arma blanca en 2003.
Esta mujer había intentado realizar un trámite de empeño, sin embargo, no fue atendida porque su nombre se encuentra incluido en una lista de alertas distribuida por las autoridades con personas que venden artículos robados.
Las víctimas abandonaron la escena de manera casi inmediata y, mientras la PGJE trabajaba en la escena del crimen, un hombre que se identificó como Luis Antonio Sotelo Marmolejo se presentó agresivo, asegurando ser el dueño del auto donde los dos hombres y la mujer fueron heridos, y exigiendo le entregaran el vehículo, los agentes ministeriales lo hicieron.
Sotelo Marmolejo forma parte de una averiguación previa por daños en propiedad ajena, fraude, robo en lugar cerrado, fraude específico y usurpación de profesiones.
Una de las armas utilizadas en este hecho, fue usada el 8 de marzo para matar a Cristian García Mayorga, a un hombre desconocido y herir a Leonardo García Espejo en la colonia Las Torres parte alta de la misma delegación.
Para entender estos dos asuntos, las policías Municipal y Estatal Preventiva movilizaron personal de manera especial. Todavía buscaban indicios en las inmediaciones de Ciudad Industrial cuando a la 1:32 pm llega el tercer reporte de ataque armado.
Esta vez en el restaurante Carl’s Jr. frente a la Universidad Autónoma de Baja California. Las cámaras de seguridad revelaron que un hombre aún no identificado, cubierto con una gorra y sudadera de capucha, ingresó al local antes que la víctima, vio cuando llegó Ramón Alonso Favela López, de 59 años, domiciliado en el Infonavit Presidentes; la víctima iba hablando por teléfono celular cuando el atacante se dirigió a él, lo mató a quemarropa y huyó con rumbo al Oeste.
“De acuerdo al trabajo de inteligencia, estos ataques van en dos sentidos, pero igual son resultado del pleito de la plaza, es el CJNG tratando de tumbar al Cártel de Sinaloa en esa zona, e incluso en las dos primeras balaceras de los heridos y los muertos en el ‘picadero’, donde se presume que los homicidas son sicarios que trafican en la misma área, se atribuyen a traiciones”, relató un jefe policiaco, sin embargo, esta información no está incluida en las carpetas de investigación.
Tampoco la versión dada por testigos -de manera extraoficial- a los investigadores ministeriales y que involucra a Alfredo Heynes Alonso, alias Miguel Ángel Rodríguez Solorio “El Flaco”, de 45 años de edad, quien de acuerdo al Grupo Coordinación, es el administrador operativo del Cártel de Sinaloa en Otay; ha sido detenido y liberado como sospechoso de homicidio en junio de 2011 y el 26 de febrero de 2018, tras el asesinato de un ex policía identificado como escolta de Octavio Leal Hernández, lugarteniente del CAF. El 17 de marzo también fue capturado en posesión de un arma de fuego tipo escuadra calibre 40, con nueve cartuchos útiles, pero eso no le ha afectado para continuar con sus actividades delictivas.
“En el caso del señor del Carl´s Jr. estamos trabajando para ver si no tiene otra identidad, y terminado de correr las bases de datos para saber si tiene antecedentes delictivos, si es así, entonces se investigará como parte de la pugna” refirieron desde la PGJE.
Al cierre de esta edición, Favela López no había resultado con delitos en México, sin embargo, de acuerdo a las bases de datos en Estados Unidos, en aquel país fue juzgado en dos ocasiones por tráfico de drogas, lo capturaron en Long Beach, California, y en Arizona. En 1989 fue sentenciado a cinco años, y en 1992 lo condenaron a veinte años de cárcel.
En la misma delegación fueron asesinados, el 19 de abril, Manuel Godoy Castro “El “Danny”, lugarteniente del CAF apenas liberado, un encapuchado lo mató mientras hacía ejercicio en un gimnasio. Y el 4 de mayo, en la cenaduría Concordia, el ex policía federal Gyula Haraszti Veera, de 50 años y propietario empresa Haraszti e Hijos, dedicada al arrastre, transporte, traslado y manejo de materiales. Las carpetas de investigación de estos dos asesinatos tampoco registran avances en la fiscalía estatal.
EN LOS TERRENOS DEL CAF
Otro asesinato de perfil diferente se perpetró en una zona que no está considerara de alta incidencia homicida, sobre la Avenida Acacias del fraccionamiento Cubillas en la Zona Centro, reservada para la vieja guardia del CAF. La noche del 29 de mayo asesinaron al sinaloense Eduardo López Ávila, de 47 años, quien radicaba en Jalisco.
Usaron dos armas, una calibre 40 y otra calibre 45, los peritos localizaron alrededor de diez orificios de bala en el vidrio del parabrisas, justo frente al conductor. “Los familiares que llegaron a reclamar el cuerpo dijeron venir desde Jalisco y no quisieron decir nada, ni pidieron investigar ni aclarar nada, ni siquiera fueron capaces de decir cuándo había salido López de Jalisco, o cuándo había llegado a Tijuana, ni las razones del viaje”, detalló un investigador del Grupo Coordinación.
En este caso, las autoridades continúan trabajando en verificar si el muerto no tenía otra identidad, por lo pronto, no le resultaron antecedentes ni en México, ni en Estados Unidos.
El 6 de junio, en la Avenida Sonora del fraccionamiento Chapultepec, en el exterior del bar MOB de Plaza San Ángel, se denunció la presencia de cuatro hombres armados.
Según el reporte policiaco, al ver a los uniformados, los hombres arrojaron las cuatro armas a una jardinera de donde fueron recuperados un fusil calibre 223, una pistola calibre 38 y dos calibre 9 milímetros.
La Secretaría de Seguridad Pública Municipal de Tijuana presentó el reporte de la captura de Adalberto, Jesús, Francisco y Alejandro “N” como integrantes del CAF y, de acuerdo a datos de inteligencia, presuntos servidores de Pablo Edwin Huerta Nuño “El Flaquito”.
Los jóvenes quedaron libres, ya que en las primeras indagatorias federales determinaron que los habían capturado dentro del bar y no en el estacionamiento, como plasmaron los agentes en el Informe Policiaco Homologado (IPH). Sin embargo, el Ministerio Público federal asegura que sigue trabajando la carpeta para procesarlos.
Una vez revisados los antecedentes de los detenidos, resultó que: Adalberto Medina Navarro ya había sido detenido por un delito penal en 2016 y le concedieron un amparo indirecto; Francisco Javier Badilla Medina fue juzgado en 2010 en el Distrito de California por tráfico de narcóticos; mientras Alberto Guerra y Alejandro Alvarado no cuentan con expediente delictivo.
LAS CABEZAS
En cuanto a la identidad de los tres hombres localizados decapitados esta semana, hasta el jueves 14 de junio la fiscalía estatal continuaba sin determinarla, pese a que confirmó que los cuerpos encontrados en la colonia El Valle el 11 de junio correspondían a las cabezas localizadas un día antes frente a una peluquería en Sánchez Taboada.
En las mismas condiciones está la extremidad cefálica dejada para amenazar a policías estatales el sábado 9 de junio.
“El Quillo”, uno de los presuntos asesinos del periodista Javier Valdez, es vinculado a proceso
La Fiscalía Especial para la Atención de Delitos cometidos contra la Libertad de Expresión (FEADLE) informó que aportó las pruebas necesarias para obtener la vinculación a proceso de Juan Francisco Picos Barrueto alias “El Quillo”, imputado por ser uno de los presuntos asesinos materiales del periodista Javier Valdez Cárdenas.
Al momento de resolver, el juez de Control otorgó tres meses para la conclusión de la investigación complementaria y determinó imponer la medida de prisión preventiva a Picos Barrueto durante el trámite del proceso penal.
Picos Fue notificado de su detención al interior de una prisión en Baja California, adonde fue ingresado tras su captura el 24 de agosto de 2017 en Mexicali, Baja California, por violaciones a Ley Federal de Armas de Fuego y Explosivos.
“El Quillo” fue trasladado el lunes 11 de junio a Culiacán, Sinaloa, para la continuación de la audiencia inicial, donde la FEADLE solicitó se le vinculara a proceso.
El presunto asesino arribó al aeropuerto de Culiacán y posteriormente se le trasladó a los Juzgados federales, donde se le imputó por su probable participación en el homicidio del corresponsal del diario La Jornada y cofundador del semanario Ríodoce.
Junto a Heriberto Picos Barraza “El Koala” y Luis Ildefonso Sánchez Romero “El Diablo” -asesinado en Sonora en septiembre de 2017-, “El Quillo” era sicario del Cártel de Sinaloa, y fueron ellos quienes supuestamente asesinaron al periodista sinaloense.
Picos Barrueto estaba preso por procesos penales en los que le imputan los delitos de posesión de arma de fuego de uso exclusivo de las Fuerzas Armadas, con agravante.
Aquel 24 de agosto fue detenido por elementos de la Policía Federal y de la Secretaría de Marina (Semar) en Mexicali, tras pasarse un alto a exceso de velocidad. En la revisión del vehículo le hallaron una pistola Ruger 985, dos armas calibre 9 milímetros, una calibre 45 milímetros y una caja con 35 cartuchos.
En su momento, la Procuraduría General de la República informó que la orden de aprehensión contra “El Quillo” -familiar de “El Koala”, capturado el 23 de abril en Tijuana- fue obtenida gracias a las investigaciones conjuntas de la PGR, Comisión Nacional de Seguridad (CNS) y la Fiscalía de Sinaloa.
Javier Valdez fue asesinado el 15 de mayo del 2017 en Culiacán, Sinaloa, por presuntos miembros de una célula del Cártel de Sinaloa bajo el mando de Dámaso López Núñez “El Licenciado”, detenido en Ciudad de México el mismo mes del homicidio y actualmente preso, sujeto a juicio de extradición.
Según la investigación de la PGR, el móvil del crimen tuvo que ver con unas publicaciones realizadas por Valdez en contra del “Licenciado” y su hijo Dámaso López Serrano “El Mini Lic”, hoy detenido en Estados Unidos.
Mientras que “El Koala” permanece recluido en el penal de Aguaruto, en Culiacán, aunque solicitó traslado al Centro Federal de Readaptación Social Número en Guasave, argumentando temor hacia su integridad física; petición que fue aceptada por el juez. Carlos Álvarez
Narco amenaza a policías Defiende a Juan Manuel, de 16 años. detenido en tres ataques armados
“Me acaban de atorar unos chavalos en X38 (Sánchez Taboada), si no los sueltan los gorras (municipales) los voy a trozar…” inicia el mensaje de voz que circuló en varios chats de policías de Tijuana el 11 de junio.
De acuerdo a los jefes policiacos, se refería a la captura de Jorge Gerardo Ojeda Pérez, de 19 años de edad, y Juan Manuel D. E., de 16. Quienes huían en una camioneta Caravan blanca y los detuvieron en posesión de un fusil R-15 y una pistola calibre 45, tras el asesinato de Luis Ángel, de 16 años, en el interior de una llantera en la delegación Sánchez Taboada.
En la audio-amenaza la voz advierte: “… esto va para toda la Policía Municipal de Tijuana, somos de la Nueva… si no sueltan a mis chavalos, les voy a hacer un desmadre, ahí están los pinches vaquitas, van a ver cuando andan 10-10, le aplican al… pero al rato que los agarre cuando 10-5, bien francos, ahí tengo ubicaciones, identificados a todos. Si se pasan con los chamacos míos, los voy a trozar”. Estas frases acompañan a decenas de mentadas de madre y otra decena de referencias fálicas.
Él que habla termina diciendo: “… y soy ‘El Caimán’ de la Nueva, para que sepan con quién se están metiendo”, y advierte, “les voy a hacer un desmadre”. Las autoridades tienen identificado el apodo de “El Caimán” con Edgar Alejandro Herrera Pardo, alias Sergio Alberto Morelos Mejía.
Consultados desde el Grupo Coordinación, aseguraron que la respuesta fue ese mismo lunes, llevar los operativos conjuntos a los terrenos donde delinque “El Caimán” en la colonia Sánchez Taboada, aunque no reportaron ninguna captura importante. Como parte del análisis, las autoridades revisan la posibilidad que el mensaje lo haya grabado un uniformado, porque hay muchas referencias a claves policiacas.
Al día siguiente recibieron un segundo y extenso narco-audio-mensaje que inició con un “buenas tardes”, y se resume en los siguientes renglones:
“La molestia aquí de uno es esa que agarran las personas y las torturan, viejo, las golpean demasiado y la neta ese no es el rollo que … y la neta también uno se pasa de lanza , yo no tengo problema con el gobierno ni nada, pero sí me molestó eso que al muchacho que agarraron, o sea, el muchacho es trabajador de un trabajador mío, lo agarraron y lo golpearon, llegan a las conectas y los golpean, y en ocasiones los entregan a los grupos rivales, entregan a los detenidos van y se los entregan por 30 mil, 40 mil pesos pesos…pero no hay pedo, aquí se habla y aquí no pasa nada, yo no me meto con ustedes, y ustedes no se meten conmigo”.
Al respecto, de la Procuraduría General de Justicia del Estado informaron que ninguno de los dos detenidos había sido golpeado y existía un certificado médico que lo acreditaba.
Ojeda Pérez, el detenido mayor de edad, fue vinculado a proceso por homicidio en audiencia el 14 de junio, contaba con tres capturas previas por posesión de arma de fuego fechadas el 22 de enero, 29 de abril y 3 de junio, todas en 2013.
Y Juan Manuel, de 16 años, fue sometido al Sistema de Justicia para Adolescentes que les permite recuperar la libertad en corto tiempo. Este joven había sido aprehendido previamente, el 28 de febrero, como sospechoso de participar en un homicidio calificado, y el 14 de marzo por el homicidio en grado de tentativa en contra de un policía municipal; en ambos casos fue señalado de posesión de armas.
Edgar Alejandro Herrera Pardo se inició en el Cártel Jalisco, como mano derecha de su vecino y amigo Arturo Gómez Herrera “El Gross”, jefe de sicarios y lugarteniente operativo de la mafia jalisciense desde 2015 hasta el jueves 27 de octubre de 2017, cuando lo asesinaron en una peluquería en Jalisco. El Grupo Coordinación ubica a “El Caimán” como uno de los relevos, sin embargo, sigue sin orden de aprehensión.