Mexicali.- Mientras la Procuraduría de Justicia busca sin éxito obtener la declaración del novio de Valeria Ahumada Jáuregui, se dio a conocer que la joven presentaba 22 lesiones en su cuerpo, dos de ellas con arma blanca, las cuales perforaron una arteria que causaría el choque hipovolémico que terminó con su vida.
Familia, amigos y hasta el chofer de Uber que supuestamente brindaría el servicio a la fémina de 23 años de edad, ya se presentaron ante la unidad investigadora para apoyar en las pesquisas, pero por lo expresado por el subprocurador Fernando Ramírez Amador, el estudiante de la carrera de Deportes, Sergio Enrique Sánchez Dueñas, no ha sido ubicado desde la localización del cuerpo el lunes pasado, en Mexicali.
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El director del Servicio Médico Forense (SEMEFO), César Raúl González Vaca, comentó que además de las heridas mencionadas, se detectó evidencia de haber sido golpeada de forma brutal, ya que además presentó un traumatismo craneoencefálico que también habría causado su muerte de no ser atendido.
Agregó que existen características que podrían determinar una agresión sexual previa a su asesinato, pero será personal de Servicios Periciales el que concluya la indagatoria.
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La mujer, madre y empleada de una tienda localizada en Plaza Carranza, al Oriente de la ciudad, desapareció el pasado domingo y la última persona que la vio con vida fue justamente su pareja sentimental de nombre Sergio Enrique.
La familia de Valeria la identificó por un tatuaje localizado en el costado derecho con la leyenda “Ivana Sinaí”.
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