El Distrito Judicial del Este de Nueva York, ciudad a la cual llegará esta noche, sede donde se consolidaron todos los procesos que enfrentaba el narcotraficante sinaloense Joaquín Archivaldo Guzmán Loera, alias “El Chapo”, que este jueves fue extraditado por México a los Estados Unidos.
Allí será juzgado Guzmán Loera por diversos delitos como posesión de cocaína, lavado de dinero, homicidio, manufactura y distribución de droga. Una acusación que consolida casos de Arizona, Texas, Illinois y Nueva Jersey, un expediente de de 32 páginas, con más de 70 cargos contra el ex líder del Cártel de Sinaloa, informó la cadena estadounidense Univisión.
En contra de “El Chapo” hay demandas en al menos siete estados de EU —Arizona, California, Texas, Illinois, Florida, Nueva York y New Hampshire—, sin embargo, se inició un proceso de extradición por dos: el de la Corte Federal de Distrito para el Distrito Oeste de Texas, emitida en abril de 2012; y el de la Corte de Distrito para el Distrito Sur de California, de septiembre de 1995.
El 16 de junio y el 31 de agosto de 2015, las autoridades estadounidenses solicitaron a la SRE la extradición del narcotraficante, por los delitos de asociación delictuosa para importar y distribuir cocaína, delincuencia organizada, contra la salud, lavado de dinero, homicidio y posesión de armas de fuego, entre otros.
Cuando aprobaron su extradición, las autoridades mexicanas aseguraron que “el gobierno estadounidense proporcionó las garantías suficientes de que no se aplicará la pena de muerte (…) en caso de ser extraditado y juzgado en ese país”.
“El Chapo” estará preso en el Centro Metropolitano de Detención, ubicado en el número 80 de la Calle 29 en Brooklyn, instalación que resguarda a individuos a la espera de juicio, y que ha tenido algunos reclusos de alta peligrosidad, entre ellos está Abid Naseer, supuesto miembro de Al-Qaeda, extraditado desde el Reino Unido en 2012 para enfrentar cargos de haber tomado parte en una conspiración internacional para llevar a cabo atentados con bomba en los EU y Europa.
Lo opera la Oficina Federal de Prisiones, una división del Departamento de Justicia de los EU. Se abrió a comienzos de la década de los 90 del Siglo pasado, con una capacidad de albergar a 3 mil reclusos, lo que lo convierte en el centro de detención más grande de Estados Unidos.
De acuerdo con el Manual de Orientación y Admisión del Centro, a su llegada, a todos los reclusos se les asigna un número de identificación y registro. Es una instalación libre de tabaco. A los recién llegados se les practica un examen médico para certificar su estado de salud y se les asigna una celda.
Asimismo, se les entrega el uniforme de la prisión y los artículos de uso personal tales como: almohadas, ropa de cama y toallas. Todos los días se verifica la limpieza de las instalaciones, que a las 07:30 horas deben estar limpias y presentables.
Los reclusos extranjeros pueden recibir visitas del personal consular de sus respectivos países para asuntos de carácter oficial. Además, si los reclusos desean enviar correspondencia, esta se recoge de lunes a viernes a las 8:00 am. Las autoridades proveen el papel, los sobres y/o bolígrafos.
Para sus visitas a la Corte, a los reclusos se les provee de vestimenta, aunque familiares o amigos pueden proveer ropa civil con la debida autorización. Mientras que los horarios de visita van de las 12:00 pm a 7:45 pm de lunes a viernes. Los fines de semana son de 8:00 am a 3:00 pm.
El centro provee servicios médicos, dentales y psicológicos y quienes tengan un escaso dominio del idioma inglés, deben asistir a clases obligatorias de este idioma. Además, a los reclusos se les permite una serie de actividades recreativas supervisadas y también hay una biblioteca para uso de los internos.
-Información en desarrollo…