En medio de la polémica que se ha desatado en los últimos días por la construcción del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (NAICM) y su supuesta cancelación si Andrés Manuel López Obrador llega a la Presidencia de la República, fondos controlados por la familia del empresario mexicano Carlos Slim Helú se encuentran en proceso de adquirir una parte de un fideicomiso de inversión para financiar el proyecto.
De acuerdo con reportes de prensa, tres fuentes con conocimiento del acuerdo confirmaron que Grupo Financiero Inbursa, a través de vehículos que incluyen la Afore Inbursa, se harían de alrededor de 13 mil millones de pesos en certificados del fideicomiso de inversión especializado en infraestructura creado para financiar parte de la construcción del nuevo aeropuerto.
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Según las fuentes, la parte obtenida por Inbursa es la más grande de todos los inversionistas, y representa más de una tercera parte de los 30 mil millones de pesos recaudados por la compañía responsable de la contracción del nuevo aeropuerto.
“Inbursa también trabajó en el acuerdo como uno de los colocadores y vendió parte de los certificados a clientes”, dijo una de las fuentes.
El NAICM tiene una fuerte relación con la familia de Slim. El arquitecto Fernando Romero ganó el contrato para diseñarlo, junto con el reconocido arquitecto británico Norman Foster. Romero está casado desde el año 2000 con Soumaya Slim, hija de Carlos Slim, y es el fundador de FREE Fernando Romero Enterprise.
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En los últimos días, tanto la Presidencia de México como el candidato de la coalición “Todos por México”, José Antonio Meade Kuribreña, salieron en defensa de la construcción del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM), en rechazo a la propuesta de Andrés Manuel López Obrador, quien aseguró que en caso de resultar ganador de las elecciones del próximo 1 de julio cancelará la obra.
Eduardo Sánchez, vocero de la Presidencia, dijo que mover el NAICM a la base militar de Santa Lucía ha sido calificado como inviable por consultores aeronáuticos internacionales. “Mitre, la consultora más importante en materia aeronáutica ratifica la enorme conveniencia de que sea ahí en donde se desarrolle el aeropuerto y ha determinado inviable, desde el punto de vista técnico, la propuesta de que opere el actual aeropuerto junto con donde es la base militar de Santa Lucía”, dijo en una conferencia de prensa.
Sánchez aseguró que el actual aeropuerto y la base militar de Santa Lucía no pueden operar al mismo tiempo y la base sólo puede operar cuando el AICM no lo hace.
López Obrador quiere que el Aeropuerto se construya en Santa Lucía. Su argumento es simple: costaría mucho menos a los mexicanos y tendría menos margen a la corrupción.
