La historia de Noelia y Óscar provoca el morbo y la curiosidad del espectador cuando el sugerente título “23 Centímetros” se lee en la marquesina.
Óscar (Joaquín Ferreira) y Noelia (Fernanda Vizuet) son un matrimonio que pone una “empresa” donde ofrecen servicios sexuales, la materia prima es el esposo, gracias a que éste posee un atributo físico fuera de lo común. La labor inicia muy bien, con buenas ganancias gracias a dos de sus mejores clientas, Verónica “La Viuda Negra” (Olivia Collins) y Carlota (Sugey Ábrego), pero al pasar del tiempo el juego se vuelve peligroso cuando del placer se involucran sentimientos.
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Apoyado por su esposa, Óscar, quien además es arquitecto de profesión, tiene una gran demanda de trabajo, lo que contribuye a tener contenta económicamente a su mujer, no así en la vida íntima, puesto que el alto índice de citas con mujeres, deja sin energía a su cónyuge, provocando serios problemas maritales, al grado que por celos, Noelia causa malos entendidos, una crisis sentimental y hasta golpes. El enredo se sale de control para concluir con un dramático cambio en la vida de Óscar, Noelia, “La Viuda Negra”, Carlota y Enrique (su asistente).
Con las actuaciones de Olivia Collins, Sugey Ábrego, Joaquín Ferreira, Fernanda Vizuet y Enrique de la Riva, “23 Centímetros” hizo reír a los pocos tijuanenses que se dieron cita en la primera de dos funciones que ofrecieron la tarde del lunes 19 de septiembre en la Sala de Espectáculos del Centro Cultural Tijuana (CECUT), donde la poca ropa, el negligé, los juguetes sexuales y un desnudo masculino completo fueron el aderezo de la historia.
“Eso es parte de un estudio actoral, cuando estudiamos actuación tenemos ciertos ejercicios, no de desnudez, pero sí ejercicios donde se tiene que perder el pudor y ser conscientes que somos una orquesta y nosotros somos un instrumento, entonces si el guión está justificando un desnudo, nosotros como instrumento no podemos faltar ni fallar para que esta orquesta funcione al cien por ciento”, afirmó Joaquín Ferreira.
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Por su parte, Olivia Collins dijo a ZETA: “El mensaje es que cuando te relacionas con alguien y hay sexo siempre hay consecuencias. Mi personaje paga por sexo y no quiere compromiso con nadie, ella tiene su vida hecha, solo lo que le gusta es su servicio (de Óscar) y ella sigue con su marido, con sus hijos y con su vida. El que él esté súper dotado y se le ocurra a ella (la esposa) poner un lugar de citas, tiene consecuencias (porque) después la mujer se siente abandonada, sola, ya no hay relaciones sexuales y entonces vienen las consecuencias”.
Controvertida, con tintes de picardía y con escenas solo para adultos,”23 Centímetros” seguirá recorriendo la República Mexicana, en donde la polémica por el desnudo ha causado que en algunos lugares sea censurada. En Tijuana la convocatoria fue escasa, sin embrago, la puesta cumplió su cometido: hacer reír al espectador y que por ambas partes (mujeres y hombres) disfrutaran del atractivo visual.
“Finalmente el mensaje que queremos decir es ‘atiende bien a tu mujer o a tu hombre, para que no busquen nada por fuera’”.
