Comparten los hermanos Hernández (Tony y Cano), líderes y cofundadores de la banda de cumbia, punk, metal, hardcore, hip-hop y reggae, El Gran Silencio, dos noches en la región junto a Cártel de Santa, liderada por Babo (Eduardo Dávalos de Luna), creador de la agrupación de hip-hop oriunda de Santa Catarina, Nuevo León. En la capital bajacaliforniana, la fiesta del rap se consumó en las instalaciones de El Fex, mientras que en Tijuana, la reunión de los cinco elementos se atrincheró en las inmediaciones del Parque Estatal Morelos, justo el viernes 27 y sábado 28 de junio, respectivamente, logrando convocar lo que ningún otro proyecto sonado en la radio puede conseguir: más de 10 mil personas cantando, bailando y dejándose hilar en un capítulo para el recuerdo en cada plaza. Sobre el móvil de subsistencia musical, Babo explicó a ZETA que Cártel de Santa fue de los pioneros en creer que internet sería el futuro: “A pesar de que nuestros discos se publican a través del sello Sony Music, a nosotros no nos tocan en la radio, ni en la televisión, ni contamos con una manera de promocionarnos como cualquier otro artista. Aprovechamos todo lo que nos ofrecen las redes sociales como YouTube, Facebook, Instagram, y lo multimedia. Creo que somos pioneros en creer que eso así sería, y apostamos por la internet, como por contar nuestras aventuras; nosotros no le queremos decir a nadie qué hacer, ni cómo pensar”. De la discografía de Cártel de Santa, “Volumen ProIIIbido” (2006) y “Sincopa” (2010), lograron ser premiados con Disco de Oro por sus altas ventas. Cinco álbumes en su haber, además de “Golpe Avisa”, próximo a ser publicado, avalan la carrera de once años de Babo y su crew, quienes a través del tiempo han posicionado temas como “Ay Mamita”, “Cheka Wey”, “Todas Mueren por Mí”, “Blah, Blah, Blah” y “Perros”, por citar algunos. 
Hecho en los barrios, Cártel de Santa llegó a Tijuana para maniatar a 10 mil almas que recibieron su dosis de hip-hop al filo de los últimos minutos del sábado y primeros del domingo 29 de junio, donde jóvenes de distintos lugares, principalmente de la Zona Este de la frontera, se apoderaron del recinto natural, donde por momentos el olor a marihuana impregnó el conglomerado que atentó en una noche calurosa, dejándose guiar por las densas rimas y los provocativos mensajes de los raperos. Según relató Babo, la banda oriunda de Santa Catarina, Nuevo León, se hizo su propio camino entre rockeros hasta forjar su movimiento, tomando como epicentro su ciudad natal, donde desarrolló Casa Babilonia, su propio sello discográfico con el que decidió fomentar el talento rapero. “Hay mucho talento, mucha raza en la calle haciendo cosas propositivas, más que nada. No me gusta lo que se copia. Había raza haciendo ese tipo de jale, y las disqueras no estaban dando apoyo a ese tipo de proyectos, nadie apostaba por nadie más; de forma que apostamos nuestro propio recurso, estudio, ahí donde hemos grabado la mayoría de los discos. Empecé a invitar a Millonario, de Hacienda Los Morales (barrio bravo de San Nicolás de los Garza), y Big Man, de Ciudad Juárez”, dijo Babo. “Hemos conseguido todo un movimiento a base de apoyar todo lo que se hace en el barrio; los tatuajes, grafitis, y enseñarle a los chavos una mentalidad empresarial, porque luego los programan para ser esclavos de un sistema, nadie los enseña para ser jefes”, considera. Referente a la realidad del barrio de Santa Catarina, el líder de Cártel de Santa señaló que escribió el guión de una película que tituló “Los Jefes”, en la que él mismo actuó bajo el papel de “El Perro”, además de Millonario, quien interpreta uno de los papeles estelares (“La Bomba”). Las locaciones del filme fueron San Pedro, Monterrey, San Nicolás y Santa Catarina, Nuevo León. “Escribí una historia que no es retrato de nuestras vidas, ni un documental de Cártel de Santa, sino una historia que imaginé y desarrollé. Trata de cómo es la situación en el Norte del país, en general, las calles, desde los niveles más altos a los bajos, confronto las clases, pero no es nada ajeno a los que sucede en el Norte del país, sobre todo en las fronteras. Es la misma situación a donde vayas, nada más cámbiale la camiseta y el equipo. Habla de dos chavos que van a armar un toque de mota al barrio, pero ahí se ven sumergidos en una aventura que los lleva por todos los niveles del narcotráfico”, subrayó el intérprete de “Los Mensajes del WhatsApp”, cuyo video cuenta con más de 20 millones de vistas en YouTube. La cinta “Los Jefes” fue dirigida por Chiva, reconocido director de videos musicales y cortometrajes, filmada por Burro Casillas y El Chango, quienes han realizado películas como “Amores Perros” y “Sexo, Pudor y Lágrimas”. En la cinta escrita por Babo actuaron también Fernando Sosa, Emilio Salazar, Hugo Chávez, Bicho Rodríguez y Mauricio Morriz Graza, algunos de ellos, oriundos y habitantes de los barrios de Santa Catarina, Nuevo León, situado en la frontera con Saltillo, Coahuila. “Los Jefes” llegará a las salas cinematográficas de México en noviembre. Para su realización, se utilizaron cámaras con tecnología Epic Rec, presente en cintas como “La Chica del Tatuaje de Dragón”; mientras que el audio fue diseñado por el rapero, así como el soundtrack, que incluirá temas de Cártel de Santa, incluso muchos de ellos extraídos de “Golpe Avisa”, disco que saldrá a la venta este mes de julio bajo el sello Sony Music., De ese material se desprenden temas como “Dr. Marihuana” y “Los Mensajes del WhatsApp”. “Este disco me llevó mucho más tiempo hacerlo porque lo tuve que grabar dos veces, ya que Dharius (ex segunda voz) decidió dejar la banda, y hacer su carrera de solista. Tuvimos que armar todos el disco de cero, y rearmar el soundtrack de la película, pero nos sirvió de mucho porque nacieron nuevas canciones. Sinceramente el disco logró una gran evolución musical, como todos los discos, mantiene la esencia, pero experimentamos en los ritmos, porque siempre tenemos en la cabeza la idea de sorprender, manteniendo la raíz, nuestro estilo”, enfatizó Babo. Avala El Gran Silencio a Cártel de Santa 
En su visita a Tijuana, Tony Hernández, líder y cofundador de la banda El Gran Silencio, conversó con ZETA sobre las presentaciones en Baja California, en las que compartió escenario con Cártel de Santa, y ese público tan diferente entre cada propuesta, lo cual fue toda una aventura para los oriundos de la capital de Nuevo León. “Nos gustaron mucho las dos presentaciones, sabíamos que nos íbamos a encontrar con un público muy diferente, pero tenemos un buen número de seguidores, sobre todo una generación diferente a la que nos sigue, morros de secundaria y adultos de 30 y 40 años de edad; además de familias y gente que le gusta desde lo norteño, tropical, cumbia, hasta el reggae, hardcore, metal y punk”, indicó el cantante de “Cumbia Lunera” Para el cantante de “Chúntaro Style”, la diferencia de públicos no radica solo en la vestimenta, y aunque el común denominador es el hip-hop, la forma de cantarlo también hace el contraste. “Nosotros hacemos una mezcla de ritmos con hip-hop, con mayor velocidad, y la gente del Cártel de Santa es más densa, más tumbada. Nosotros somos multisilábicos, y ellos monosilábicos. La diferencia también radica en la música en vivo, en el estilo y las frecuencias, lo nuestro es más estéreo por todos los instrumentos, cuando ellos trabajan con pistas y una guitarra. Nuestros fraseos son más pegados y rápidos, y el flow de Babo es más atempado. Somos más old school, y ellos más modernos, en la onda de Cypress Hill y Dr. Dre, muy gangsta”, describió Tony. Durante la ceremonia musical del sábado 28 de junio, pasadas las diez de la noche, El Gran Silencio inició el recital, al que incluyó canciones como “Círculo de Amor”, “Chúntaro Style, “Dormir Soñando”, “Tonta Canción de Amor”, “Cumbia Poder”, “Déjenme si Estoy Llorando”, entre otras extraídas de “Revolusound”, última placa discográfica en 23 años de carrera artística, cuyo desarrollo nació al poniente de Monterrey, alrededor de la Unidad Modelo y Artilleros, en los linderos de Santa Catarina, por lo que Tony Hernández, dice conocer a Babo desde la adolescencia. “Cuando estaba morro Babo, el bato andaba de skate, era público de El Gran Silencio, lo recuerdo muy bien, llegaba y saludaba a todos, vestía de overoles, con camisetas blancas, llegaba en su patineta. Ya después nos encontramos en la radio, siempre atento, con hambre de hacer algo interesante y organizarse, nosotros los apreciamos mucho porque son un grupo que se la ha partido bien machín, tanto como para revolucionar el cotorreo del hip-hop a nivel nacional”, resaltó el músico.
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