En días pasados, la directiva de los Cargadores de San Diego anunció la intención de mudarse de la ciudad, de no concretarse un nuevo estadio. Y es que en los últimos años, la familia Spanos, propietaria del equipo del rayo, ha manifestado su interés de dejar el Estadio Qualcomm si no reciben el apoyo del gobierno para estrenar una nueva casa. Por tal motivo, el viernes 20 de febrero presentaron un proyecto en conjunto con los Raiders de Oakland, el cual consiste en la construcción un nuevo estadio en la zona de Carson en California. Este nuevo escenario, que fungiría como casa de ambos equipos, alcanzaría una inversión de mil 700 millones de dólares. Ambos equipos militan en el Oeste de la Conferencia Americana y sus enfrentamientos se han convertido en toda una tradición, por lo que es difícil pensar que tanto Cargadores como Raiders compartan el mismo terreno para jugar. El mensaje de la directiva fue claro, con esto buscan el subsidio del condado sandieguino para el inicio de construcción de nuevo espacio, de lo contrario proseguirán con el plan de estadio en Los Ángeles, el cual está ubicado en 168 acres, cerca del Freeway 405 y el Bulevar Del Amo. Aunque esto no ha sido aprobado por el gobierno de ese condado, hay otros equipos interesados en mudarse a la ciudad angelina, como los Carneros de San Luis, quienes han puesto bastante interés a través del dueño, Stan Kroenke, de construir un estadio en Hollywood Park. Apenas habían trascurrido unas horas de la noticia cuando el alcalde de San Diego, Kevin Faulconer, convocó a una reunión en pleno domingo con Dean Spanos. Fue la primera ocasión que ambas partes se encontraron para conversar acerca de la permanencia del conjunto sandieguino. “Nos complace que la fuerza de tarea se decidió el viernes para acelerar su trabajo y entregar un reporte dentro de los próximos tres meses. Éstas son buenas noticias para el proceso. Nos comprometimos a continuar la cooperación con la fuerza de tarea”, comentaría Alex Spanos. Los dueños de Cargadores enfatizaron que siguen sujetos a hallar una solución aceptable y pública en San Diego, pero también explicó detalladamente al alcalde que la franquicia debe crear otras opciones para sí misma, “en el caso que no se alcance dicho acuerdo”. Por su parte, Faulconer manifestó que la reunión con Spanos se dio para que la directiva sandieguina entregue sus planes de financiamiento para lo que podría convertirse en la nueva casa de los “voltios”. “Le expliqué al señor Spanos que trabajaremos para mantener aquí al club, pero nunca aceptaré un acuerdo que San Diego no pueda costear. Continuaremos trabajando para producir un estadio viable que sea justo para los habitantes, que proteja a los contribuyentes y sea aprobado por los votantes. El grupo de consejeros del estadio ha accedido en acelerar sus esfuerzos y presentar un producto de su trabajo en los siguientes 90 días. Me emociona compartir el plan, cuando llegue, con el público”, afirmó Faulconer. El martes 24 de febrero, el Cabildo de San Diego programó una reunión para el próximo 18 de marzo, en la que se tratarán diversos temas en pro de la construcción de la nueva casa del equipo del rayo. Por ahora, el destino de los Cargadores está en el aire, aunque en los próximos días se podría conocer su permanecía o su mudanza hacia la vecina ciudad angelina. Un gran ejemplo El ex pateador de los Cargadores de San Diego, John Carney, visitó Tijuana para impartir una clínica a los jugadores de la Organización Estudiantil de Futbol Americano (OEFA). El minicampamento se llevó a cabo el sábado 21 y el domingo 22 de febrero, en el campo de la Escuela de Deportes que se ubica dentro de las instalaciones de la Universidad Autónoma de Baja California (UABC). Carney, de 50 años, quien vistiera el uniforme del equipo del rayo por más de una década y se convirtiera en el máximo anotador de puntos de la franquicia, se dio tiempo de asesorar personalmente a los pateadores de la Liga, mientras el resto de los jugadores de otras posiciones trabajaron con miembros de su asociación Letics. Por espacio de dos horas, interactuó con cada uno de los jóvenes de nivel preparatoria y universitaria, dándoles consejos y técnicas sobre cómo ejecutar un intento de gol de campo. “Estoy contento de estar aquí en Tijuana, todos han mostrado una gran disposición para aprender, los jóvenes han pateado muy bien. Estos muchachos han entendido y han estado atentos a las instrucciones, ha sido fantástico trabajar con ellos”, dijo el ex pateador. En su carrera de 23 años dentro de la NFL, Carney disputó un par de Súper Tazones, jugando para los Cargadores en 1995 y con los Santos de Nueva Orleans en 2010; con este equipo fue campeón siendo jugador y entrenador. Por último, el egresado de Notre Dame se mostró sorprendido por la intención de los Cargadores, de abandonar San Diego para trasladarse a Los Ángeles: “Obviamente nadie desea que esto suceda, nadie quiere que se pierda el equipo, pero desde hace 12 años la directiva de San Diego ha buscado lo mejor para todos y han visto opciones para construir un nuevo estadio. Creo que ahora han logrado tener la atención que deseaban, y esperemos que pronto se haga algo que beneficie al equipo y a los aficionados”.
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