Entre las fotografías que el tatuador estadounidense Jon Boy difundió del trabajo que le hizo a Sofía Castro Rivera -hijastra e hija del presidente Enrique Peña Nieto y de la primera dama Angélica Rivera Hurtado, respectivamente-, mostró una imagen donde se observa a la joven usar unos zapatos Gucci Black Princetown, de piel, con incrustaciones de perlas, cuyo precio es de mil 750 dólares, unos 33 mil 398 pesos mexicanos al tipo de cambio actual.
La actriz fue blanco de ataques en las diversas redes sociales, ante lo que muchos usuarios catalogaron de “frivolidad”. Sin embargo, Castro Rivera afirmó a través de su cuenta de Instagram, que ella invitó al tatuador de estrellas de Hollywood, a la que considera su casa: la residencia oficial de Los Pinos, con el fin de “intercambiar” tatuajes, y ofreció disculpas si causó molestias por la visita de Jon Boy, “especialmente a nuestros papás”.
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“Jon Boy es mi amigo y lo invité a venir adonde vivo para intercambiar tatuajes. Yo le puse Sofía, él me puso una J, la inicial del nombre de mi papá. A Pau (Paulina Peña Prettelini) le puso ML en memoria de una frase que le decía Mónica, su mamá. Él no cobró”, explicó la joven. “Pedimos una disculpa a quienes con esto hayamos causado molestias, especialmente a nuestros papás”, añadió en alusión a Peña Nieto y su esposa Angélica Rivera.
El tatuador Jon Boy -quien cobra por trabajos a domicilio no menos de mil dólares-, viajó a México para trabajar con Sofía Castro Rivera, Paulina Peña Pretelini, así como una amiga de estas, y reveló el jueves en Instagram su visita a la residencia oficial de Los Pinos, divulgando fotografías dentro de las instalaciones oficiales.
“Jon Boy” es uno de los tatuadores más cotizados del mundo y uno de los más solicitado por las celebridades. Agenda hasta con 6 meses de anticipación y entre sus clientes se encuentra a los cantantes Zayn Malik, Rihanna, Justin Bieber y Miley Cyrus, así como la “socialité” Kendall Jenner y la modelo Bella Hadid.
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A Paulina Peña le grabó las iniciales “M L” en la parte interna del antebrazo, y a Sofía Castro la letra “J” en el tobillo. Además, el tatuador del estudio Bang Bang, en Manhattan, llamó “mis hermanas” en la descripción de una fotografía en las que aparece junto a las jóvenes hijas del presidente de la República.
El trabajo de Jon Boy, al que dedica aproximadamente 15 minutos por tatuaje, se identifica por ser de trazos sencillos, pequeños, que se han puesto de moda por su discreción, pero también por la cantidad de famosos que se han sumado a esta tendencia.
