Para directivos de Rivera Gas, el Dictamen Técnico de Congruencia que les negó el gobierno de Baja California, no es requisito indispensable, ya están de hecho por culminar la construcción e iniciar operación de la planta de almacenamiento de 750 mil litros de gas LP; solo poseen licencias federales y de Tecate, cuando se determinó que el terreno donde edificaron, corresponde a Tijuana.
La planta de distribución de Hidrocarburos del Noroeste S.A. de C.V., propiedad de Francisco Javier Rivera Yepiz, se ubica en el predio con clave catastral 4-XA-050-298, el cual se localiza “dentro del Municipio de Tijuana B.C., pero fuera de los límites del centro de población Tijuana, pocos metros del municipio de Tecate B.C.”, se lee en el análisis de congruencia sobre la implementación de uso de suelo industrial de alto riesgo, que se realizó sobre este proyecto.
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En el documento se hace referencia que “por su localización y características de uso, es necesario el cumplimiento del procedimiento que se establece en los artículos 12 y 150 de la Ley de Desarrollo Urbano del Estado de Baja California, en materia de Dictamen Técnico de Congruencia por parte del Ejecutivo del Estado, a través de la Sidue para usos de suelo especiales, de industria de alto riesgo, con posibilidad de impacto negativo en el medio ambiente o no considerados en los Planes y Programas de Desarrollo Urbano”; bajo ese precepto, en Sidue negaron ese dictamen.
Carlos López Rodríguez, director de Ordenamiento Territorial de la dependencia, dijo que toda urbanización debe contar con ese dictamen, “cuando se ubique fuera de los centros de población definidos en los Planes y Programas de Desarrollo Urbano, previa presentación de estudio de impacto urbano”. Sin embargo, de la gasera no realizó el trámite para autorizaciones y permisos en el Ayuntamiento de Tijuana como correspondía.
Ricardo Lomelín Clapera, secretario de Desarrollo Urbano y Ecología Tijuana, dijo no tener conocimiento, aun cuando el 27 de septiembre de 2017, la Dirección de Administración Urbana (DAU) municipal recibió un documento en el que Sidue informó “que dicha planta no cuenta con el Dictamen Técnico de Congruencia y se ubica dentro de la jurisdicción territorial del municipio de Tijuana”.
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El funcionario expuso que si bien es cierto, existe un convenio amistoso de límites territoriales, donde Tijuana cedió esa zona conurbada a Tecate, legalmente el proceso no ha sido concluido, por lo que “no puede ser aplicado para efectos legales”.
Al respecto, el jurídico de Rivera Gas, Jorge Acosta, dijo: “es incongruente que el propio gobierno del Estado se pronuncie contra una situación que ya está vertida y votada dentro del Congreso del Estado… en la actualidad, de acuerdo a lo que nos marca la Ley, nosotros contamos con todos los permisos que nos marca el Gobierno Federal y del Ayuntamiento para las licencias de construcción, y la negativa es un documento que la Sidue emite tres años después de que las licencias de construcción y la licencia por parte de ASEA (Agencia Nacional de Seguridad Industrial y de Protección al Medio Ambiente, del Sector de hidrocarburos)”.
— ¿No es requisito tener la anuencia de Sidue para que la planta funcione?
“No”, dijeron los de Rivera Gas.
En este contexto y con una tercera suspensión en la construcción, emitida el 14 de mayo por el Juzgado Cuarto de Distrito en Materia de Amparo y Juicios Federales en Baja California, la planta estaría operando “a partir del segundo semestre de este año”, para abastecer el 40% de la demanda del mercado regional, la cual se sitúa en seis mil toneladas mensuales de gas, lo que lo coloca en el cuarto más grande del país; detalló Luis Enrique Rubio, director de Rivera Gas.
