Un abogado acusó al precandidato a la presidencia de México, Ricardo Anaya Cortés, de haber dispuesto de un esquema de lavado de dinero para hacerse llegar millones de pesos.
El litigante, de nombre Adrián Xamán McGregor, aseguró que entre 2016 y 2017, dos clientes suyos se prestaron a hacer transferencias y triangulaciones mediante empresas fantasma a favor del político queretano y que en ese ánimo, aparentaron la venta de una nave industrial por aproximadamente 54 millones de pesos, operación que habría sido realizada entre la empresa Juniserra y Master Plan Development.
Publicidad
Los dos involucrados supuestamente fueron contratados para tal efecto, por un empresario de Querétaro, llamado Manuel Barreiro.
Según trascendió, las remisiones del dinero se hicieron a distintos países, a efecto de que no pudiera seguírsele el rastro; y habiendo constituido “personas jurídicas colectivas”, los clientes de Xamán McGregor triangularon el recurso en México, Canadá, Gibraltar y Suiza.
A decir del defensor, ambos han sido objeto de hostigamiento por parte del abanderado de la fórmula PAN-PRD-MC. A propósito, la revista Proceso publicó que denunciaron en la Procuraduría General de la República, haber sido hostigados luego de realizar los movimientos monetarios.
Publicidad
En un video publicado vía red social, Ricardo Anaya manifestó: “es francamente absurdo y de risa afirmar que yo amenacé a personas que ni siquiera conozco y con quienes jamás he tenido absolutamente ningún trato”. Indicó que ciertamente posee una empresa, la cual vendió un inmueble; solo que no se trata de una entidad fantasma, toda vez que “está declarada” bajo el formato 3 de 3 y “siempre ha estado al corriente en todas sus obligaciones fiscales”.
Al candidato electo de la coalición Por México al Frente se le atribuye la posesión de Juniserra.
Anaya Cortés consideró que “todo este golpeteo se da en el contexto de las campañas políticas”. Como responsable de los supuestos “ataques” se refirió al Partido Revolucionario Institucional, “y es que los del PRI ya no saben ni qué inventar para levantar la campaña en ruinas de su (pre) candidato (José Antonio Meade)”, expuso.
Se dijo dispuesto a acudir “ante la autoridad que quieran y cuando quieran”. A él, según mencionó, no lo van a detener “con mentiras”.
Cuando aún no inicia la contienda formal (a llevarse a cabo a partir del 30 de marzo), sostuvo en alusión a los priistas: “les vamos a ganar”. En ese tenor, el ex dirigente del PAN remató que “afortunadamente, el PRI ya se va”.
