Por los cuatro años que estuvo al frente de la Secretaría de Infraestructura y Desarrollo Urbano del Estado, Manuel Guevara Morales recibió un nada despreciable finiquito de 312 mil 070 pesos con 60 centavos. Esto quiere decir que por dejar el cargo percibió tres meses de sueldo, lo que normalmente se da en los despidos, no en las renuncias, aunque seguramente llegó a un acuerdo con su jefe para poder salir en buenos términos. Y aunque desde hace meses se anunciaba la renuncia del funcionario, el gobernador Francisco Vega de Lamadrid la congeló hasta que se arreglara el lío generado en el tema de los proyectos de Asociaciones Público Privadas, donde sus resultados fueron desastrosos, pues a Guevara se le adjudica el planteamiento de las APP que generaron gran descontento por parte de la ciudadanía y el mega endeudamiento.
Aunado al desastroso tema de las APP, Guevara Morales tuvo que recular en sus intenciones de construir un acueducto para dotar de agua a la planta cervecera Constellation Brands, para lo que había contratado a una filial de Urbaca, constructora favorita del Gobierno del Estado. La empresa cervecera y la administración estatal tuvieron algunas relaciones que sugerían un posible conflicto de interés, como por ejemplo, que el ex jefe de obra de Constellation, Sergio Montes Montoya, renunció a ese puesto para convertirse en director de Administración Urbana en el trienio del alcalde mexicalense Gustavo Sánchez, por lo que le correspondió revisar el tema de los permisos municipales. Junto con Guevara, Montes Montoya fue copropietario al adquirir en 2006 un terreno en Ensenada, donde también aparecían nombres como el de Héctor Osuna Jaime y el empresario Tomás Pérez Vargas Rosales. Total que a pesar del desaseo en los proyectos y la renuncia de Guevara, este fue premiado con su finiquito.
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