De Trez en Trez
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Uno.- Cuando usted lea esto, apenas habrán transcurrido dos días de haberse cerrado el ciclo escolar 2016-2017, en educación básica; es decir, estaremos en lo que la autoridad llama “receso escolar” y es cuando alumnos y docentes gozan de merecidos días de descanso, sin embargo, bien vale la pena echar un vistazo retrospectivo a algunos pequeños “prietitos en el arroz”…
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Por ello, traigo hasta este espacio un documento elaborado por un docente con más de 30 años de servicio que se ha distinguido por sus excelentes resultados en las evaluaciones que ha presentado, es más, lo he citado antes en “De Trez en Trez” simplemente como “My friend”, el profesor Luis Mendoza León (me autorizó a mencionar su nombre). Él ha estado de los dos lados, representando al SNTE, como secretario General de su delegación y secretario de Trabajo y Conflictos, en un par de ocasiones; como también de subdirector comisionado en tres ocasiones, de escuela secundaria y una vez como director.
En suma, “My friend” es un profesor de esos que realmente trabajan, que no se queda callado, que aporta, pero que a la vez exige lo que en derecho procede, y eso no a todos les gusta.
Doz.- En un escrito dirigido a la profesora María Luisa Santoyo Gutiérrez, secretaria general de la Sección 37, del SNTE (Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación), afirma: “…los profesores y todo el personal de base o interino que labore en escuela pública, debe estar consciente que es un servidor público y está obligado a cumplir con los reglamentos, normas y lineamientos que se establecen para el buen funcionamiento de las escuelas y denunciar a la, o las personas que lleven a cabo acciones que sean violatorias de las mismas”.
Agrega: “También en las escuelas públicas deben imperar las reglas morales y los principios éticos; las primeras son vitales para la sana convivencia y el respeto entre el personal, los principios éticos marcan la pauta para lograr los objetivos y el fin último de la educación”.
A lo largo de su documento, el profesor Luis Mendoza León dice que líderes sindicales y autoridades educativas tienen a las escuelas públicas de Baja California al borde del colapso, por su actuar negligente y complaciente, los primeros violan sus estatutos y los segundos incumplen las leyes. Para ello, cita ejemplos:
“…no hay personal completo en ninguna área, ni siquiera directivo, y cuando lo hay, es sin nombramiento. Claro, sin el sueldo que por ley corresponde a ese puesto, y el sindicato, lejos de proteger los derechos adquiridos como es su función, ahora coloca en las comisiones directivas (encargados de despacho) a sus incondicionales, violando sistemáticamente los estatutos en los ámbitos de antigüedad, preparación y desempeño; y peor aún, no solo permite, sino que fomenta la explotación laboral de sus agremiados, donde, por la misma función, unos cobran una cantidad y otros apenas una parte de ésta.”
Y continúa: “Las autoridades encantadas con su mejor aliado (el sindicato), en lugar de pagar dos subdirectores, o más bien dicho, cuatro subdirectores, porque la tan llevada y traída reforma educativa (que ya lleva varios años que dizque entró en vigor), establece que cada escuela (secundaria) debe tener dos subdirectores por turno y un director de doble turno (al que no pagan el doble, sino una compensación) y que los interesados deben ser evaluados por el SPD (Servicio Profesional Docente) y solo aprobando (idóneo) puede ser directivo”.
Sigue: “En esta ‘confusión’ entre el SEE el SPD y el SNTE, el gobierno paga únicamente un ‘encargado de despacho’, con el mismo sueldo de profesor, así se ahorra una buena cantidad de millones de pesos… Por si esto fuera poco, las autoridades ‘liberan’ del servicio, no jubilan, ¡liberan! (no existe ese estatus legalmente) a miles de maestros (no a todos los que tienen derecho, por supuesto), por tener el derecho a jubilarse, en apego al contrato colectivo de trabajo, firmado por gobierno y sindicato. Con esto, el gobierno otra vez se ahorra miles de millones de pesos al no pagar los finiquitos, evadiendo su responsabilidad, alegando que son muchos y, desde luego, violentando las leyes, además de provocar un desmantelamiento de las escuelas donde falta personal en todas las áreas.”
Afirma: “el sindicato se vuelve una mega agencia de empleo (temporal) que contrata, subcontrata y sustituye personal a su antojo y conveniencia, unos trabajan y otros cobran. A los que tienen derechos los hacen a un lado y a los que los apoyan, hasta les consiguen puestos directivos, ¿y el SEE? ¿Y el SPD?, ni ven, ni oyen; y es este círculo vicioso, el que está acabando con las escuelas públicas, con los derechos de los maestros y demás personal y, por consiguiente, con la educación pública de calidad”.
Trez.- Cita “My friend” solo un ejemplo de los muchos que existen en el caso de la secundaria donde labora, en la que se dan algunas situaciones “poco claras”, por decir menos, desafortunadamente, no es el único centro escolar con dificultades. Al SEE, desde hace tiempo, se le “está haciendo bolas el engrudo”, en perjuicio de quienes deben ser su prioridad, los alumnos, y en detrimento de los derechos de los docentes.
Y para colmo, algunas “autoridades superiores” hostigan hasta decir basta, a los “encargados del despacho” que se atreven a aceptar el reto de dirigir una escuela, en lugar de apoyarlos y guiarlos para mejor funcionamiento del plantel. Hay formas de ejercer la autoridad.
En fin, lo invito a visitar la página www.estosolopasaenmexico.es.tl, creada por el profesor Luis Mendoza León, porque el espacio se termina. Ahí encontrará su texto íntegro.
Óscar Hernández Espinoza es egresado de la Facultad de Derecho por la UABC y es profesor de Cultura de la Legalidad y de Formación Cívica y Ética en Tijuana. Correo: profeohe@hotmail.com
