Durante Semana Santa, cientos de familias buscan oportunidades para salir a conocer su localidad y aprovechar un rato de convivencia familiar. Uno de los lugares que se encuentra listo para recibir a los paceños, sudcalifornianos, connacionales y extranjeros, es el Área Natural Protegida (ANP) Santuario del Cactus, a 40 kilómetros al sur de La Paz. Cada año recibe a miles de turistas para observar a las diferentes cactáceas y fauna de la localidad. Algunas en peligro de extinción, otras pequeñas y gigantes, con más de 50 años de edad.
Este sitio es ideal para apreciar la naturaleza del desierto que guarda Baja California Sur, punto donde podrá observar la mayoría de las especies de cardón en un solo lugar.
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“Cardón barbón, cardón pelón y otras variedades diferentes, garambullo, pitahaya dulce, está la familia cactácea, biznaga, choya… Las cuatro estaciones del año aquí hay flores y fruta, ahorita está la fruta de la biznaga”, declaró Demetrio González, prestador de servicios en el Santuario del Cactus.
Se trata de un recorrido que se puede hacer a pie por cualquier miembro de la familia, con áreas de descanso; las maravillas de la naturaleza están plasmadas en cardones de hasta diez metros. Todos los especímenes abrazan el sendero por el cual circulan los habitantes, el recorrido también se puede hacer en bicicleta, la única petición es que la visita sea con “cero impacto” y la basura generada, recolectada por los propios visitantes.
Algunos los conocen como “Los Gigantes del Desierto”, los únicos que sobreviven a las altas temperaturas y los rayos UV, se encuentran por miles.
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“Tengo dos salas, una de 700 metros y otra de mil metros, una familia entera lo hace, una señora adulta o niño lo hace, ese no es problema, porque se divierten, descansan, se desestresan y pues les gusta”, agregó el encargado.
El Santuario del Cactus fue uno de los más afectados durante el huracán “Odile” en 2014, hoy en día el ANP está en espera de visitantes durante Semana Santa.
Decenas de cactus y árboles fueron arrancados con el paso del huracán, hoy en día el parque luce vivo de nuevo, es uno de los atractivos que no se pueden dejar de visitar en la región y solo está a poco más de 30 minutos de la ciudad.
“’Odile’ le pegó a Todos Santos, por aquí pasó. Tuve 40 jornaleros aquí unos días y se restauró todo, se pintó las piedras, se pintó los senderos, se hizo limpieza, se hicieron unas áreas de descanso con material regional, cardones y mezquites; ahorita está especial para que en Semana Santa vengan”, citó González en alusión al trabajo a través de un Programa de Empleo Temporal (PET) de la Comisión Nacional Forestal (CONAFOR).
