Durante la semana las 54 viviendas de Camino Verde registraron mayor hundimiento, lo que las ubica a punto de colapso, mientras las autoridades siguen sin determinar las causas.
El Secretario de Desarrollo Urbano y Ecología de Tijuana, Ricardo Lomelín Clapera, aseguró que el estudio ya se realizó y que el mismo ratificó la publicación geológica realizada por el CICESE en 2016, el cual determinó que es una zona de alto riesgo.
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El jueves se envió el resultado al Colegio de Ingenieros Civiles de Tijuana, para que especialistas determinen si el deslizamiento fue provocando por las lluvias y si la zona afectada se encontraba en un “estado de reposo residual”, esto es, que se encontraba latente para que un evento externo venciera su resistencia al deslizamiento.
Aseguró que especialistas del Colegio ya estuvieron en la zona afectada y que su opinión la emitirán el próximo viernes. Ya con el resultado, de ser necesario el municipio ordenará un estudio geofísico más profundo para respaldar la propuesta del Colegio.
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No obstante, los vecinos no se han percatado de la presencia de personal que se haya presentado a realizar algún análisis.
Por ello, y en caso de que el resultado del estudio oficial no les fuera favorable, Karina Cárdenas, una de las afectadas, comentó que los habitantes se organizan para contratar a expertos para la realización de un análisis, de manera que cuenten con los fundamentos para proceder legalmente contra quien corresponda para exigir indemnización.
Admitió que el hecho de que algunos de los afectados no sean propietarios de los predios que ocupaban, y que éstos están dispuestos a aceptar lo que se les ofrezca de apoyo, “aunque esto sea un terreno en la periferia de la ciudad y sin servicios”, quienes sí están regulares demandarán el resarcimiento del daño.
En tanto, algunos residentes de la zona colapsada duermen a la intemperie, junto a las pertenencias que pudieron rescatar, como el caso del señor José Juárez, de 60 años de edad.
