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Como es sabido de todos o la gran mayoría de los mexicanos, por la llegada de Trump a la presidencia de los EUA y sus increíbles órdenes ejecutivas, está desquiciando no solo a los EUA sino a todo el mundo sin olvidar la afectación a nuestro México.
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Lo importante de todo esto es el gran sentimiento de unión que ha brotado entre los mexicanos para demostrar que no nos inmuta, y que esto nos ha solidarizado con nuestro presidente, que no quiere decir que le estemos perdonando todos sus errores, que esa es otra historia quizás más dura y difícil que del gringo.
Las redes sociales están logrando el milagro de unión, desafortunadamente algunos se están colgando de la brocha para sus propios fines aviesos, como ciertos partidos políticos fácilmente identificables, como también falsos o noveles líderes que quieren llevar agua para su molino y otros más para proyectarse políticamente, y que ellos pueden echar por la borda todo lo que se pueda lograr. Ideas han salido muchas, desde las manifestaciones que tienen su impacto momentáneo donde mucha gente se solidariza sin guía ni líder alguno, como fue el caso de Mexicali, aunque después se desvirtuó que como ejemplo queda para que no vuelva a repetirse, que es entonces cuando muchos empiezan a no querer participar y lo que tenía una buena y sana intención, y que como resultado tenemos la abrogación de la Ley del Agua para Baja California, que junto con lo del gasolinazo protestamos por darle marcha atrás.
Estos movimientos son importantes porque quiérase o no influyen en la toma de decisiones al corregirse las que afecten al bien común de las familias y la sociedad (ejemplo de lo del agua), ahora ya se dio marcha atrás al aumento a la gasolina en febrero, esperemos que el de marzo también lo cancelen o por lo menos le bajen al impuesto IEPS, que la verdad creo es para hacernos creer que el gobierno es sensible y se solidariza con nosotros, es más, ya está decidido, al tiempo.
Así como nos hemos solidarizarnos con las marchas ahora tenemos que impactar más a nivel internacional aunque principalmente con el vecino del norte, de que se dé cuenta su presidente que la unión de los mexicanos los puede afectar, y créanme dejar de comprar un día a la semana, y si es en domingo en que muchos a veces vamos de compras a los EUA les va a doler a los comerciantes americanos, que presionarán a su presidente, y si no cambia Trump, los mismos comerciantes lo van a obligar que cambie su forma de gobernar, allá sí se le hace caso a los grandes consorcios, y no solo a los negocios grandes y pequeños por los daños colaterales económicos que ocasionará, como los descendientes de familias de mexicanos, asimismo por los pleitos internos que ya se están generando entre funcionarios tanto federales como estatales en contra de esas políticas racistas, xenofóbicas, proteccionistas y que creo que no lo van a dejar terminar su presidencia porque también la presión mundial día a día será más fuerte y agresiva que nunca.
Pero bueno, la idea de que en un solo día a la semana y que éste sea el domingo, y no solo de 8 am a 3 pm, todo el día, dejemos de ir y comprar en los Estados Unidos (lastimándolo en su economía, donde más les duele) y que sea representativo como ya ha circulado en las redes y entre la propia gente, que sea en domingo como el pasado 5 de febrero, y todo el mes de febrero mínimo para darnos cuenta de la afectación que ocasionaremos.
No solo dejemos de comprar sino de ir también, si quieren surtirse o comprar algo que realmente necesiten, háganlo otro día pero que ese día ni de paseo vayamos, y si están acostumbrados a salir y pasear hagan turismo en nuestro estado, tantos lugares bellos y divertidos que tenemos.
Gracias como siempre a mis dos que tres lectores por hacer circular este mensaje de solidaridad y que la unión de los mexicanos prevalezca por siempre.
El autor reside en Tijuana, B.C.
