Una niña de aproximadamente siete años de edad, murió después de ser atendida en un consultorio dental, “por una muela que se le fue al dentista”, denunció un familiar a ZETA.
A la menor la habían llevado para su atención al consultorio del odontólogo Tonatiuh López Gorosave, quien atiende en la calle 15 de la zona centro de Ensenada, donde después de extraerle la pieza dental, ésta cayó hacia la cavidad de la tráquea.
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La abuela de la víctima presentó la denuncia ante el Ministerio Público, confirmó el subprocurador de Justicia Marco Antonio Chavarría, quien confirmó se encuentra la investigación abierta por el presunto delito de homicidio culposo, y el dentista está en calidad de imputado.
El expediente refiere que al momento de atorarse la pieza dental en la tráquea de la pequeña, el médico intentó auxiliarla, no pudo y fue trasladada a la Cruz Roja, donde trataron inútilmente de salvarla. Murió a causa de una obstrucción de objeto extraño, determinó la necropsia.
Reiteró el subprocurador que el dentista López Gorosave se encuentra en libertad, pues el nuevo sistema de justicia penal contempla el homicidio culposo como un delito que prevé la mediación de las partes, pues no se le considera un delito grave, toda vez que no hubo la intención y del cual se puede proceder mediante el diálogo para llegar a la reparación del daño.
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