A la opinión pública:
Ante una serie de denuncias en torno a agresiones escritas y amenazas a través de diversos medios, en contra de las comunicadoras Licenciada Adela Navarro Bello, codirectora del semanario ZETA, y Dora Elena Cortez Juárez, directora de la Agencia Fronteriza de Noticias, surge la imperiosa necesidad de que la Asociación de Periodistas de Tijuana exija la inmediata intervención del Gobernador de Baja California, Francisco Vega de Lamadrid, para que se esclarezcan los hechos en los que se involucra a dos funcionarios de su administración como probables responsables de estos ataques.
Publicidad
Es vital que en este escenario, la autoridad a cargo del Jefe del Ejecutivo estatal, actúe con la celeridad que la situación amerita, pues las colegas aludidas, han externado ante la comunidad bajacaliforniana, del país y a nivel internacional, que temen seguir siendo víctimas de todo tipo de embates que incluso llegaran a lo físico.
En sus denuncias, tanto la Licenciada Adela Navarro Bello como Dora Elena Cortez Juárez, han aportado información valiosa que obliga a que se investigue el origen de las agresiones de las que afirman son objeto por parte de integrantes del actual Gobierno del Estado. Actuar a tiempo, y sobre todo, aclarar con el fin de corregir esta grave situación, es obligación de quien gobierna Baja California.
Es un hecho que las agresiones, consistentes en calificativos personales, insultos, calumnias y difamación, que exponen al descrédito de las periodistas denunciantes, reúnen lo suficiente como para que tanto la Secretaría de Seguridad Pública al mando de Daniel de la Rosa, a través de su Policía especializada en delitos cibernéticos, como la Procuradora del Estado, inicien una indagatoria a fondo y que de haber responsabilidad en los señalamientos, se proceda conforme a la Constitución Política de Baja California.
Publicidad
La gravedad de lo denunciado conduce a que la administración estatal de Baja California, solicite apoyo del gobierno de Estados Unidos a fin de que las corporaciones vinculadas con la investigación de este tipo de probables delitos, como el Buró Federal de Investigaciones, el FBI, auxilien a resolver lo expuesto.
Incluso la Procuraduría General de la República debe atraer la investigación, pues va de por medio la integridad de dos periodistas.
Sin más que agregar, se espera una pronta solución a lo planeado.
Atentamente.
Mtra. De la Asunción Gutiérrez; Presidenta
Tijuana, B. C.
